Cómo subir las notas de tu hijo con 20 minutos más de sueño
La falta de sueño se traduce en desconcentración en la sala de clases, fastidio a la hora de hacer las tareas escolares y, como consecuencia, grandes problemas en el aprendizaje.
Marta Martínez Aguirre
Según Daniel Vigo, investigador médico del Conicet y profesor de la Universidad Católica Argentina, tener una buena calidad de sueño, aumenta la capacidad para estar atentos, mejora la memoria y permite tener mejores estrategias cognitivas.
No dormir bien afecta el rendimiento escolar
Los niños y adolescentes que no duermen bien, tienen mayores problemas para concentrarse y rendir bien. Así es: la falta de sueño se traduce en desconcentración en la sala de clases, fastidio a la hora de hacer las tareas escolares y, como consecuencia, grandes problemas en el aprendizaje.
Cuando tu hijo no duerme lo suficiente, disminuye su capacidad de para focalizar la atención, se altera su memoria de fijación y se alteran las estrategias cognitivas, además de perder la flexibilidad para adaptarse a situaciones nuevas. Por otro lado los niños con pocas horas de sueño son niños más impulsivos, irritables e hiperactivos.
Duración ideal
La profesora asistente de psicología en la Universidad de California, Sara Mednick, plantea que dormir bien ayuda a las personas a ser más creativas y más inteligentes. Ella plantea tres categorías de siesta según las necesidades:
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Para un golpe rápido de energía: 10 a 20 minutos.
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Para mejorar la memoria cognitiva (recordar datos, lugares, rostros, etc.): 60 minutos.
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Para la creatividad y la memoria emocional: 90 minutos, los que equivalen a un ciclo completo de sueño.
Otras investigaciones han demostrado que los desórdenes del sueño tienen repercusión directa en el aprendizaje. En especial en las áreas de matemáticas y lenguaje.
Observa a tu gato
Mis lectores saben que soy fanática de los gatos y, aunque no lo creas, estoy segura que los investigadores podrían haber ahorrado mucho dinero y tiempo si observaran más a los gatos. Ellos son durmientes polifásicos es decir no duermen todo de corrido como nosotros, sino que los mininos alternan ciclos de vigilia y sueño durante un periodo de 24 horas. Ellos toman siestas de corta duración a lo largo del día.
La palabra siesta viene del latín guardar la sexta, los romanos eran durmientes bifásicos es decir se tomaban dos tiempos para dormir. En especial ellos guardaban la sexta hora, es decir luego del mediodía según sus horarios. De ahí la palabra sestear (sextear). La vida moderna nos ha robado esta condición de dormir un rato luego del mediodía, sin embargo tus hijos la necesitan.
Siestas energéticas
Compañías como Google, Nike, The New York Times, fomentan la siesta entre sus trabajadores, por sus beneficios para rendir mejor.
Si tu hijo no duerme lo suficiente, no esperes que rinda bien en sus estudios, por eso es importante que lo alientes a tener “siestas energéticas”. Éstas son siestas cortas de veinte minutos de sueño, para afrontar el resto de la jornada de estudio. Según el Dr. Vigo, con ello tu hijo se despertará lleno de energía y con mejores niveles de atención, además de elevarle el estado de ánimo.
Relee: Si te pasas la mañana queriendo tomar una siesta, este artículo es para ti.
Una mala calidad de sueño disminuye la capacidad para focalizar la atención, altera las estrategias cognitivas y afecta la memoria. Además, influye negativamente en el humor, lo que finalmente también interfiere en el aprendizaje. Ahora ya lo sabes, ¿puedes fomentar en tus hijos al menos veinte minutos de siesta?
Marta Martínez Aguirre
Marta Martínez es de Uruguay. Posee una licenciatura en Psicología, y un posgrado en Logoterapia. Ama todo lo que hace y adora servir. Es especialista en atención psicológica domiciliaria. Contacto:
