Conoce el lenguaje de tu esposo

Aunque a veces te resulte muy difícil, entender el lenguaje de tu marido te ayudará a disfrutar de tu matrimonio y dejarte consentir.

Adriana Acosta Bujan

En muchas ocasiones no entiendo nada de lo que me platica mi esposo. Y no es porque no quiera poner atención o no desee escucharlo, al contrario. Pero mientras mis pensamientos se enfocan en las actividades que tengo que hacer en un futuro inmediato, los de él solo se dirigen a ciertos acontecimientos que vive en su presente.

En momentos creo que no hablamos el mismo idioma, ¿te ha pasado? Y no solo porque habla de sus deportes favoritos o de algún comic o película de ciencia ficción, sino que en la vida cotidiana ¡sus prioridades son tan diferentes a las mías! No creo que sea posible para ninguna mujer hablar el idioma de los hombres, sin embargo, podemos conocer y entenderlos para poder vivir en armonía. Para que te quede claro de lo que hablo, te dejo cuatro acciones que realizan ellos, analizarlas puede ayudarte a comprender su idioma.

1. Ellos son proveedores

Por naturaleza o porque así fueron enseñados por sus padres, ellos adquieren el rol de proveer a la familia; a mi parecer eso es correcto. Para no caer en una discusión sin sentido con tu esposo, en caso de que tú contribuyas con el gasto familiar o administres la economía, te recomiendo que reconozcas y comprendas que para él es importante seguir siendo ese proveedor, porque así fue educado.

Algunos matrimonios tienen dificultades por ese aspecto cuando la esposa tiene mayor ingreso que su esposo, dejando que él pierda el control y se sienta defraudado y frustrado.

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2. Ellos son protectores

Una de las funciones que adquieren los hombres dentro del seno familiar es la idea de que son protectores, que deben brindar seguridad a todos los integrantes del hogar. Por ello, debes comprender que dos perros guardianes, una estructura de metal por toda tu casa y millones de alarmas, no son el reemplazo de tu esposo.

Algunas ocasiones su deseo de proteger a la familia rebasa los límites de la sobreprotección, por ejemplo, no te deja caminar una cuadra bajo los rayos del sol por desear tu bienestar y protegerte, o no le da de comer helado a sus hijos para que no se enfermen. Te invito a que reflexiones y comprendas que es maravilloso contar siempre con él para la seguridad que necesitas.

3. Ellos son los fuertes

No trates de cargar algo muy pesado, como una maceta, una mesa o mover un refrigerador. Su hombría lo dice todo: ellos sienten que son los encargados de realizar las tareas que requieren fuerza en el hogar. Tú siempre serás esa frágil mujer que no debe mover nada, aunque ¡claro que no es para tanto! Déjate consentir pero no a grados mayores, deja que realice las labores pesadas, pero no le pidas que abra una lata de atún por ti.

4. Ellos son los incansables en la intimidad

Hay un dicho que dice que los hombres piensan solo en sexo, no estoy segura de ello, pero eso nos han hecho pensar los medios de comunicación. Sabemos que ellos son los que inician las relaciones íntimas y cuando una mujer comienza puede parecerles extraño. Es una excelente idea que la mujer comience de vez en cuando con la intimidad para salir de la rutina y fortalecer los lazos en su matrimonio, sin embargo ellos se sienten cómodos tomando el control.

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Como mujeres, por nuestro bien y para evitar alguna discusión, es mejor que conocer que ellos gustan de ser los protectores, proveedores, los fuertes e incansables en la intimidad. Conoce su lenguaje y no trates de enfrentarlos o retarlos. Déjalos ser y disfruta de tu relación.

Adriana Acosta Bujan

Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.