De qué sirve el amor
Todas pasamos por momentos en la vida en que nos hacemos esta pregunta: ¿De qué sirve el amor? Aquí hallarás algunas razones para seguir amando.
Miriam
Todas las personas pasamos por momentos en la vida en que nos hacemos la siguiente pregunta: ¿de qué sirve el amor? Es entonces cuando todo parece salir mal a pesar de poner nuestro máximo empeño, las cosas pierden su significado y los valores que nos definen parecen volverse nulos. Al enfrentarnos a situaciones como ésta, es muy probable que nos cuestionemos sobre el sentido que tiene el amar. Es por esta razón, que me gustaría compartirte algunas de las razones por las que considero que hay que seguir amando, lo cual no significa que siempre tenga que ser a una sola persona. Puedes enfocarte en Dios, en tus padres u otros familiares; amigos, la humanidad en conjunto, una mascota, un hobby, etc.
Amar te hace vivir con pasión
El sentimiento que produce el amar te permite realizar lo que haces con una pasión y energía que no puedes conseguir de ninguna otra forma. Todo lo que hagas, lo harás mejor si tienes algo o alguien a quien amar, y para esto no necesitas pedir permiso ni sentirte correspondida. Decide tú el objeto y recipiente de tu amor.
Amar te ayuda a enfrentar los retos de la vida
¿Te sientes sin ánimo para levantarte y enfrentar el nuevo día? ¿Prefieres dormir o quedarte inerte mirando la televisión, sin tener que pensar en nada antes de tratar algo nuevo o salir y experimentar la vida? Probablemente es debido a que te hace falta amar. Enfócate en algo o en alguien hacia donde puedas dirigir tu amor, verás que empiezas a perderle miedo a la vida y a tener más iniciativa.
Amar te permite crecer
El amor te impulsará a hacer actos de bondad, de servicio, sin esperar nada a cambio.
Si amas esperando una recompensa o algo a cambio, te desilusionarás muy seguido y correrás el riesgo de deprimirte y sentirte usada. Ama por amar, verás que te sentirás mejor sobre ti misma y notarás un crecimiento espiritual y moral.
Amar te hará feliz
Seguramente puedes diferenciar estos dos estereotipos de los ancianos: uno es el viejito cascarrabias al que todos le tienen miedo, el que siempre está protestando y nadie quiere estar con él; el otro es aquel anciano sonriente, lleno de sabiduría, que siempre tiene algo para darte o te hace algún comentario gracioso o bondadoso. ¿Ya puedes imaginarte qué hace la diferencia entre estas dos personas? Exacto, es el amor que tienen.Déjame aclarar, es el amor que tienen para dar, que no es equivalente al amor que ellos han recibido en sus vidas. Sé feliz, ama.
El amor atrae al amor
Esta frase sin duda nos remite a la conocida ley de la atracción. Si vas por el mundo desbordando tu amor incondicionalmente; por todos lados por donde vayas y a todas las personas, sin ningún prejuicio, te prometo que encontrarás gente que te devolverá este amor. Probablemente encontrarás personas que quieran abusar de tu benevolencia, pero no te preocupes por ellos; enfócate en seguir dando amor. Si haces esto, notarás cómo más y más personas sentirán una afinidad muy especial hacia ti y querrán tu compañía y amistad. De esta forma, al dar amor a otros, seguramente en algún momento alguien más te amará de ese otro modo especial. Y esto, es lo que todos buscamos.
Atrévete a dar el primer paso amando sin temor y sin restricciones.