¿Deseas bajar tu ansiedad? Cambia estos hábitos alimenticios y vive feliz
Fernanda Gonzalez Casafús
Existen alimentos que debes evitar y otros que debes consumir si buscas frenar la ansiedad
Tal vez nos resulte relajante abrir un paquete de snacks para calmar la ansiedad o recurrir a las galletas cuando estamos nerviosos. Sin embargo, éstos y otros alimentos pueden brindarnos una ligera sensación de bienestar para luego volver a subir el pico de ansiedad.
De acuerdo al Psiquiatra James Lake, existe una estrecha relación entre lo que comemos y nuestra ansiedad diaria. Los carbohidratos, la cafeína y las proteínas juegan un rol preponderante y una adecuada ingesta puede llevarnos a estar en modo zen o, de lo contrario, ser un “manojo” de nervios.
Para el especialista, la ansiedad se relaciona directamente con un descenso rápido del azúcar en sangre, que sucede luego de haber comido algún alimento o bebida con gran cantidad de azúcar. Esto es, si tomas un refresco azucarado te sentirás rápidamente despierto y vitalizado, pero a los pocos minutos tu cuerpo te pedirá más, porque el azúcar ha descendido más de lo normal. Es allí cuando aparece la ansiedad.
Los enemigos de la ansiedad
El consumo de alcohol y cafeína también puede producir este fenómeno conocido como hipoglucemia reactiva, cuyas causas no están relacionadas directamente con la diabetes, y sus síntomas incluyen debilitamiento, apetito, sudoración y ansiedad.
El consumo de cafeína también se asocia con un mayor riesgo de ansiedad, ya que aumenta los niveles de epinefrina, norepinefrina y cortisol en la sangre, dando como resultado sentimientos de “nerviosismo” y ansiedad generalizada y, en algunos casos, ataques de pánico.
De acuerdo a la Clínica Mayo, los cambios en la dieta pueden mejorar la ansiedad pero no necesariamente suplanten el tratamiento.
Síntomas de ansiedad
Todos manifestamos ansiedad y preocupaciones en la vida cotidiana. Pero cuando los problemas de la vida diaria nos afectan fuertemente y la ansiedad y el estrés no desaparecen por varias semanas, se podría estar frente a un caso de ansiedad que necesite tratamiento.
El cambio en la alimentación puede funcionar para aquellos episodios de ansiedad comunes, que tenemos diariamente o en momentos en que estamos expuestos a situaciones de estrés. Mientras tanto, existen algunas señales que pueden indicarnos que estamos sufriendo de ansiedad crónica.
Si experimentas algunos de estos síntomas, consulta con un psicólogo o profesional de la salud.
- Nerviosismo
- Sudoración
- Insomnio
- Ataques de pánico
- Problemas digestivos
- Obsesiones o trastornos obsesivo-compulsivo
- Agitación
- Preocupación constante por cosas de la vida diaria
Cambios en la dieta
Enfrentar la ansiedad puede ser un reto diario para muchas personas. Si eres de preocuparte demasiado y ponerte muy nervioso con situaciones que te son difíciles de sobrellevar, puedes probar realizando pequeños cambios en tu dieta para que tu metabolismo elabore los mecanismos para bajar la ansiedad.
Algunos consejos incluyen:
- Comer proteína en el desayuno
- Reducir al máximo la ingesta de carbohidratos y azúcares
- Beber abundante líquido
- Evitar el alcohol y la cafeína
- Respetar las ingestas diarias y no saltearte ninguna comida
Alimentos que combaten la ansiedad
- Alimentos ricos en triptófanos (queso, nueces, calabaza, maní)
- Chocolate amargo
- Almendras y nueces
- Arándanos
- Granos enteros (integrales)
- Espinacas
- Ostras y salmón
- Aguacate
Mientras tanto, además de la alimentación, otros hábitos pueden ayudar, como salir a caminar, tomar un baño de espuma, dormir lo necesario, probar con técnicas de conversación, y lo que nunca falla: hablar con un amigo o amiga.
No estás solo. La ansiedad puede llevar por un camino muy duro de altibajos emocionales. Enfrenta esta sensación cuidando tu cuerpo y tu mente, y manteniendo tus pensamientos en positivo. No dejes que la ansiedad controle tu vida. ¡Tú puedes ganarle a la ansiedad!