Desorden disfórmico del cuerpo: el nuevo padecimiento de las niños desde los 6 años; sus síntomas
Una enfermedad con síntomas sutiles que NO podrás detectar a menos que sepas de qué se trata, es hora de comenzar a informarse del trastorno disfórmico.
Camila Ignacia Gómez González
La gran mayoría de nosotros pasa algunos minutos al día frente al espejo, ya sea arreglándose para enfrentar un nuevo día o bien buscando algunos defectos que nos gustaría mejorar y para el común de las personas esto no representa ninguna dificultad para enfrentar su diario vivir. Sin embargo, el problema nace cuando aquellos “defectitos” se convierten en la peor pesadilla que podamos vivir y por lo tanto, pasa a llamarse trastorno disfórmico corporal y hoy se sabe que puede comenzarse a padecer incluso desde la infancia.
Por esta razón, es que he preparado una pequeña lista que da cuenta de aquellos peligrosos síntomas a los que como padres debemos estar atentos:
- Fealdad imaginaria
Este trastorno también se ha denominado fealdad imaginaria, puesto que comienza con la preocupación por detalles que pueden parecer insignificantes para cualquiera, por ejemplo: tener el cabello muy fino, el tronco corto, las piernas muy largas o la aparición de un lunar en alguna parte no deseada.
- Comportamientos obsesivos
Si una persona cree que sus labios son muy delgados, puede pasar durante horas investigando cómo hacer que luzcan más carnosos e incluso puede llegar hasta maquillarse de diferentes maneras a lo largo del día para poder preguntarle a su entorno si de esa manera logra disimular bien su “defecto”.
- Poca actividad social
No importa si el día está frío o con mucho calor o si incluso vendrá su artista favorito, la poca actividad social se vuelve pan de cada día, pues de esta manera se evita que las personas puedan notar lo que tanto les preocupa, generando que quienes padecen este trastorno se aíslen en sus casas y de sus seres queridos por el miedo a que descubran sus defectos.
- Rechazo a ir a la escuela
Tal como se indicó arriba, cada día es más difícil salir de casa, por lo que el rechazo a la escuela es parte de este problema. Pues el niño siente que alguien puede notar su defecto y comenzar con bromas pesadas referentes al tema, afectando de tal manera el autoestima que ir todos los días a clases se convierte en una tortura.
- El problema no se soluciona con nada
Si el problema es atacado desde la medicina, pero quien lo sufre sigue en constante búsqueda de defectos que puedan arruinarle la vida, debes saber que es absolutamente normal. Pues lo estético, razón por la que se sufre este trastorno, pasa a segundo plano cuando el problema es solucionado, pues siempre habrá más razones para sentirse afligido.
Pero entonces ¿cómo se puede atacar este trastorno?
Lo primero es fijarse muy bien en todos los síntomas que pueda estar presentando nuestro hijo, conversar profundamente el tema, hacerle sentir el amor y apoyo incondicional de la familia para en segundo lugar visitar a un psicólogo o psiquiatra que pueda ayudar , mediante una terapia, a aliviar los síntomas y pensamientos negativos. Haciéndole ver que lo importante para salir adelante es aceptarse sin tener que mortificarse a diario.