El estrés de los hombres disminuye si la mujer aporta ingresos económicos al hogar, según un estudio
Varón y mujer, colaborando juntos, logran una sinergia poderosa que potencia en la familia un crecimiento sano. El dinero puede desunirlos y potenciarlos.
Marilú Ochoa Méndez
El dinero es, después de la infidelidad, la segunda causa de divorcios en los Estados Unidos. Esta es una de las conclusiones obtenidas por Ramsey Solutions, quienes realizaron una encuesta a mas de mil adultos y parejas casadas en 2017.
De acuerdo con este estudio, las deudas y el ineficiente manejo del ingreso en el hogar, son la causa de innumerables tensiones que afectan grandemente la relación de los esposos.
Recientemente, se realizó un estudio que complementa esta información, afirmando que el estrés del varón está íntimamente relacionado al apoyo que éste reciba de su esposa para asumir los gastos del hogar. Te contaremos más de sus conclusiones más adelante.
El estrés impacta activamente nuestra calidad de vida
La armonía en el hogar genera vínculos sanos, orden en la vida de cada miembro de la familia y prepara sanamente a los niños para asumir la vida con entereza y regocijo.
Aunque el estrés es parte de la vida diaria, en muchas ocasiones es una constante abrumadora que nos electrifica cada parte del cuerpo, y nos prepara para descargar el agobio en los más cercanos. Como afirman los expertos:
“El estrés afecta la salud familiar. Es muy difícil padecer de estrés sin que otros lo padezcan. El portador o portadores lo contagian y esparcen. Con frecuencia llevamos a la casa el estrés del trabajo o de la calle y hacemos que el cónyuge o los hijos paguen por situaciones que le son ajenas”.
En ocasiones los padres se abruman y lastiman
El estrés de los padres de familia es directamente proporcional al estrés que sufren los hijos, y su agobio redunda en ambientes enrarecidos que lastiman a su familia. Es preciso buscar herramientas para manejarlo.
La primer herramienta es detectar los factores primarios que lo desencadenan. En concreto, te mostraremos aquí un factor que altera el equilibrio emocional de los padres de familia, y que puede atenderse con comunicación y colaboración entre los esposos: el aporte económico de cada uno.
La angustia psicológica del varón se aminora con colaboración de la esposa
Utilizando la encuesta transversal del Panel Study of Income Dynamics 2001-2015 realizada en 6,035 hogares, que cuenta con 19,688 observaciones, la doctora Joanna Syrda, de la Universidad de Bath en Reino Unido, investigó acerca de la relación entre el ingreso relativo de la esposa y la angustia psicológica del esposo, hallando datos interesantísimos:
El varón considera parte fundamental de su hombría y labor el hecho de mantener económicamente el hogar, aunque si la responsabilidad recae únicamente en él, se angustia.
Esta angustia disminuye hasta eliminarse cuando la mujer colabora con hasta un 40% del gasto familiar.
Si la mujer aporta un ingreso mayor a la media, hasta superar la colaboración económica del esposo, éste vuelve a angustiarse, y esto rompe la armonía.
¿Qué puede deducirse de estos resultados?
Dos consideraciones particulares nos ayudan a interpretar estas conclusiones: los varones que eligieron compañeras que desde el principio tenían mayor ingreso que ellos, no presentan ningún tipo de angustia durante la vida familiar. Y curiosamente, a las mujeres no les afecta que el esposo aporte un mayor o menor ingreso.
La autora también reflexiona sobre el papel de la cultura, pues podría entenderse que el hombre está siendo afectado por arquetipos de género. Sin embargo, no es una conclusión que se desprenda de su trabajo académico.
El varón y la mujer necesitan colaborar
La dinámica familiar se ve siempre afectada cuando marido y mujer cuentan egoístamente “lo que cada uno da”, buscando un equilibrio forzado, que siempre acaba dañándolos, pues no siempre ven uno y otro la realidad de la misma manera.
Se consigue mucho cuando en vez de contar, y dar cada uno hasta 50, esposo y esposa procuran entregar su 100%. Para lograrlo, es necesario un cambio radical de paradigma que salga del egoísmo primario y camine hacia la asertividad, la entrega generosa y el servicio desinteresado.
La joya de este estudio es que muestra desde el lado del varón el gran valor que aporta a su vida y salud mental y anímica contar con la mujer como su igual. Ese mismo descanso lo obtiene la mujer cuando el varón se involucra en el hogar, liberándola de la asfixiante carga mental.
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El reto: ser verdaderos “cónyuges”
La palabra “cónyuge”, que nombra a quienes contraen matrimonio, quiere decir “que llevan el mismo yugo”. El yugo es una estructura de madera que se coloca sobre el lomo de los animales de carga (como los bueyes) para conseguir que caminen juntos y colaboren eficazmente en las labores de labranza.
La idea, es que los esposos compartan la misma carga. Ni el esposo más adelante, ni la esposa en solitario, sino juntos ¿Sabes cuál es el secreto de una vida marital feliz? Que cada uno se esfuerce en hacer feliz al otro, que busque liberarle de la carga, que busque hacer su vida más llevadera.
No nos separarán ni el dinero ni la adversidad
Esta unidad de corazones que procure adelantarse a la necesidad, inquietudes y agobios del otro, es la actitud sanadora que consigue crear matrimonios a prueba de todo.
¿Cómo se consigue? Simplemente con la genuina actitud de servicio y amor práctico hacia nuestra pareja. Se lee sencillo, pero requiere un gran esfuerzo de autocontrol, determinación y generosidad, que solo los valientes emprenden.
Anímate a intentarlo, la armonía de tu hogar y tu serenidad serán la mejor ganancia, además de un avance enorme en la estabilidad de tus hijos.
Marilú Ochoa Méndez
Enamorada de la familia como espacio de crecimiento humano, maestra apasionada, orgullosa esposa, y madre de siete niños que alegran sus días. Ama leer, la buena música, y escribir, para compartir sus luchas y aprendizajes y crecer contigo.
