El noviazgo de los “viejos tiempos”. Anima a tus hijos a vivirlo
Si quieres que tus hijos tengan una vida emocional estable y saludable, conversa con ellos. Y una manera de hacerlo es enseñarles que el noviazgo es una etapa importante.
Andrea Echeverri Gutierrez
Vivimos en la época de la inmediatez. La información, las relaciones, el trabajo y otros aspectos de la vida se experimentan a rápidas velocidades. La sociedad ya no se detiene, se mueve las veinticuatro horas del día en todos los campos posibles. Han sido tantos y tan rápidos los cambios tecnológicos que la sociedad permanece conectada y activa en forma constante. Por consecuencia, las personas nos hemos tenido que adaptar a un mundo globalizado y exigente.
Al tiempo en que se han dado estos avances y la transformación, parecería sin embargo que la sociedad retrocede en aspectos trascendentales, a los que hemos ido restando importancia. Uno de ellos es el noviazgo.
¿Qué debes decir a tus hijos acerca del noviazgo?
Seguramente para ti, al igual que para otros padres, es difícil asumir que tus hijos ya están en la edad de comenzar sus relaciones de pareja. Sin embargo, es necesario estar ahí con ellos en esos momentos, porque son decisivos para su futuro. Lo más recomendable es hablarles respecto a lo sagrado de las relaciones sexuales que deben reservarse para después del matrimonio, pero también lo es que fomentes el gusto por el noviazgo, porque de esta manera evitarás que caigan en la trampa de sostener relaciones sexuales solo por placer, o cambiar de pareja todos los días.
Una buena manera de inculcar el noviazgo en tus hijos es contándoles los momentos maravillosos que tú, o algunos de tus amigos y amigas, vivieron dentro de esa etapa; mostrarles, a través de las propias vivencias, que el noviazgo es una etapa necesaria en las relaciones de pareja.
Da a tus hijos una lista de las cosas más positivas del noviazgo
Otra manera de conseguir que tus hijos asuman con mayor responsabilidad y calma las relaciones de pareja, es hacerles saber sus aspectos positivos:
- El noviazgo es una etapa para conocer al otro. Cuando te das el tiempo para ello tienes mayor capacidad para decidir si te merece o si, por el contrario, es mejor dejarlo marchar.
- El noviazgo te concede más libertad que cualquier otro tipo de relación. Si alguien te atrae y te interesa compartir con esa persona, el noviazgo te libera, porque te permite analizar los comportamientos, actitudes, gustos y metas que posee.
- El noviazgo nos deja momentos inolvidables: las mariposas en el estómago, el primer beso, la primera cita, el primer regalo; tantas y tantas cosas suceden en un noviazgo, que bien valen la pena vivirlas.
- El noviazgo nos protege de enfermedades sexuales y nos ayuda a valorar a la otra persona por ser quien es y no por su desempeño sexual.
- El noviazgo te protege a nivel emocional. Tener una pareja estable es mucho mejor que estar con personas diferentes cada día. En el noviazgo siempre habrá dificultades, pero te ayudarán a no enamorarte de alguien que no te quiere.
- El noviazgo te prepara para la vida. La juventud se vive con intensidad, pero si se hace de una manera responsable deja enseñanzas útiles para la vida. Por eso, el noviazgo ofrece una oportunidad para aprender a ser mejores cada día con respecto a la pareja, pero también con respecto a nosotros mismos.
Anímate a fomentar el noviazgo en tus hijos para que construyan su vida afectiva en forma saludable. Déjales claro que el interés en el sexo y nada más, no trae nada bueno y es riesgoso.