El nuevo desafío de la sal y el hielo que alcanza gran popularidad entre niños y jóvenes dejando heridas peligrosísimas
No te lo dirán aunque se estén muriendo de dolor; los médicos advierten que pueden causar infecciones muy peligrosas.
Mariel Reimann
La adolescencia es una de las etapas más difíciles en la que la mayoría de los jóvenes hacen lo que sea, con énfasis, ‘en lo que sea’, para encajar en un grupo, para sentirse aceptados, o para parecer más fuertes y evitar el bullying.
Desde cortes de pelo, tatuajes, aretes y más, cada generación ha tenido alguna tendencia diferente.
El desafío de la sal y el hielo, la nueva tendencia
Casi como un tatuaje que no se puede borrar, esta tendencia es sumamente peligrosa, y sus víctimas no sienten el dolor por varios segundos hasta que la anestesia provocada por el hielo desaparece y el dolor los despierta a una nueva realidad.
¿En qué consiste?
La nueva y peligrosa moda consiste en colocar sal sobre la piel y luego hielo justo arriba de la parte de la piel con sal. La interacción entre estos dos elementos según lo reportó Up Social y de acuerdo a la madre de un joven afectado por una infección profunda, hace que la temperatura de la sal baje a 27 grados bajo cero causando quemaduras de hasta tercer grado.
La madre del joven que vio la tremenda quemadura en su hijo, lo llevó al médico y según lo publicado por la misma página, ella habría declarado en Hefty (manteniéndose en el anonimato) que:
“Es importante que las escuelas mantengan u ojo en las tendencias que emergen. El aumento de las redes sociales contribuyó al aumento de la presión social entre niños y esta ‘moda’ es un ejemplo claro de los riesgos”.
En algunos casos no causan infecciones pero son cicatrices imborrables
No es una novedad que desde el comienzo de la historia de la humanidad todos de alguna u otra manera hacemos cosas para ser aceptados en la sociedad, en el círculo de amigos al que queremos pertenecer, etc. Pero hay tendencias extremas como estas.
Lo peor…
Ellos saben que no lo deberían haber hecho, y cuando comienza una infección y el dolor es insoportable, la mayoría se las aguanta, hasta que puede ser demasiado tarde.
Parece inofensivo, pero no lo es. Padres a poner atención.