El secreto para que tú y tu esposo tengan una INTIMIDAD de 10
Enriquecer la vida sexual en el matrimonio no es impudicia, ni motivo de vergüenza. Por ello, comparto contigo el secreto para tener con tu pareja una sexualidad de 10.
Yordy Giraldo
A mujeres como a hombres nos preocupa mucho tener una intimidad placentera, tanto para nosotras como para nuestra pareja. Y en ese afán aguzamos el oído cada que sale el tema con la intención de hacernos de información que nos pueda ser útil. Gastamos en productos que prometen convertirnos en profesionales de las artes amatorias, sin embargo, la verdad es que no requiere tanto esfuerzo.
Creemos que ciertas características físicas son suficientes para garantizarnos el interés y complacencia de nuestra otra mitad pero, aunque ayuda, permíteme decirte que el amor, incluso el carnal, no es tan superficial como parece. Y siempre será mucho más placentera una atención personalizada que esas producciones en masa que no transmiten nada.
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Todo lo que necesitamos para convertirnos en un amante de 10 está en nosotras mismas. La diferencia radica en que estemos o no dispuestas a explotarlo. Y como yo ti te considero mi amiga y confidente, querida lectora, permíteme compartirte algunas de las ideas que tengo al respecto. Sí, seguramente ya prestaste atención a otros consejos, pero dame la oportunidad de platicarte los míos.
Las características de los mejores amantes
1. Deseo
Empecemos por lo obvio, lo primero que se requiere para disfrutar de algo es querer disfrutar de ello. Así que si estás ahí, pero resulta que crees que tienes mejores lugares para estar, entonces retírate, porque nada bueno sale cuando las cosas no se hacen con pasión y entrega. Cuando pensamos en la mejor noche de nuestras vidas siempre incluye ganas, muchas ganas.
2. Conocimiento
Seguidamente entra otro factor importante. Saber lo que nos gusta y lo que le gusta a nuestra pareja. Un profesional no llega a serlo así de la nada; alguien experto en cualquier materia requiere primero que nada de estar familiarizado con el asunto a tratar. Los entendidos siempre preguntan, analizan reacciones, conocen los resultados y toman las mejores decisiones para alcanzar el éxito.
3. Tiempo
Y que decir de la dedicación, alguien que da un servicio exclusivo sabe que requiere tiempo. Por ejemplo, chicas, ¿les ha pasado que van a la peluquería, pagan una millonada y el estilista se deshace de ustedes en un par de minutos? No sé que piensen, pero a mí me deja muy mal sabor de boca. Mínimo un masajito en el cuero cabelludo, una platicadita, para entrar en confianza. Si ya vamos a hacer el gasto, pues que valga la pena.
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4. Ganar-ganar
No se trata solo de las necesidades e intereses de uno, cualquier relación necesita de que ambos sientan que están ganando. De lo contrario, la sensación que queda es que se aprovecharon de nosotros, y eso no es bueno para ninguna de las partes. Además de que habla de egoísmo y poco interés. Mucho ojo con el mensaje que estás mandando.
5. Disposición
La disposición es otro punto im-por-tan-tí-simo en la intimidad. Es como cuando vas a una fiesta y no te integras al festejo: créeme, no importa qué tan bueno sea el regalo que hayas llevado, nadie va a disfrutar de tu compañía. Así que mi recomendación es que seas -siempre y cuando te sientas a gusto con ello. por supuesto- alguien presto a pasarla lo mejor posible.
El secreto no es un secreto, somos dos y como tal ambos cuentan. El sexo suele ser un tema tabú, pero uno que debemos superar porque de él dependen demasiadas cosas. Nuestra supervivencia, nuestra salud, nuestro estado de ánimo, incluso es capaz de reforzar los vínculos afectivos con nuestra pareja. Así que el que queramos enriquecer nuestra vida sexual a través de un mejor desempeño, no es impudicia: es hacer el amor, ni más ni menos.
