Enamorarte no es amor
"Amor es solo una palabra. hasta que alguien llega para darle sentido". Paulo Coelho
Erika Patricia Otero
Todos conocemos -o creemos conocer- lo que es el amor durante la adolescencia. Es en esa edad, cuando todo lo magnificamos, que creemos que el primer amor será el único en la vida. Es normal también que suframos porque alguien nos rechaza o nos lastima. Por fortuna, con la experiencia aprendemos que no es el fin del mundo.
Sin embargo, es vital que los más jóvenes aprendan que el enamoramiento dista mucho de lo que es el amor. Entre más rápido se aprenda a distinguir el uno del otro, más pronto aprenderemos a darle más importancia al último.
Es importante aclarar que no se trata de restarle importancia al enamoramiento. Es solo que muchas parejas creen que una relación terminó cuando dejan de sentir “mariposas en el estómago”.
El asunto es que una persona puede decidir acabar con su relación porque de verdad ya no hay afecto. Sin embargo, otras más deciden darle fin porque aunque aún quieren a su pareja, ya no sienten lo mismo. En este último caso, lo que están haciendo es descartar una buena relación porque no distinguen la transición del enamoramiento al amor maduro.
Enamoramiento y amor, ¿qué son?
Para empezar, vale decir que no son sinónimos entre sí; además, son emociones, pero una más profunda que la otra. Incluso es justo decir que el enamoramiento es solo la fase inicial del amor hacía una pareja.
Vale decir además, que hay varios tipos de amor:
-Filial.
-Romántico.
-Fraternal.
-Erótico.
-Amor propio.
-Identificación con la totalidad del ser (amor a Dios).
Mientras que si hablamos de enamoramiento, este solo da inicio al amor romántico.
Así las cosas, el enamoramiento es ese cúmulo de sensaciones agradables que surge cuando conocemos a alguien que nos atrae y con la cual nos sentimos bien.
Diferencias entre ambos
Algunas personas dicen que es quizás la etapa más bonita de una relación; sin embargo, yo opino diferente. Sí, el enamoramiento es algo bello que te hace sentir que la vida merece la pena; pese a eso, el amor es superior porque es la prueba de que aceptas y amas a esa persona a pesar de sus fallas.
Y es que ese “a pesar de” es la clave que diferencia al uno del otro.
El enamoramiento es condicional; es decir, depende y sobrevive si la persona te sigue atrayendo después de un tiempo, de cuánto seas capaz de tolerar sus rarezas. Depende de si es o no correspondido, de las excusas y de tantas cosas.
Cuando una persona se enamora necesita sentir que es correspondido, se idealiza a la otra persona y teme a que lo rechacen. Añádele a eso que se pierde la concentración, se piensa de manera constante en esa persona y además hay deseos de intimidad física.
Aparte de eso, la etapa del enamoramiento dura entre 6 meses y 3 años; esto se debe al descenso hormonal, porque el enamoramiento es químico. El punto es que dure unos meses o incluso años, este siempre tiene un fin.
En cambio, cuando se trata de amor verdadero, la pareja aprende a amarse a pesar de las diferencias y los defectos. Además, con el tiempo el amor se fortalece y crece. La pareja aprende a adaptarse a los cambios y a solucionar los conflictos porque hay comprensión y buena comunicación. Cuando hay amor, hay respeto y ambas partes miran hacia una misma meta. Agregale que cuando se trata de amor de verdad, este permanece en el tiempo.
El amor no es perfecto, es humano
Tengamos algo en cuenta. El amor no es perfecto porque es sentido por humanos; esto quiere decir que la pareja que se ama va a cometer errores, se van a equivocar. Es posible que también hayan discusiones e incluso se vean tentados a darse por vencidos. La situación es que la pareja se esfuerza en lograr acuerdos y hallar un punto medio que les ayude a ser felices.
En antaño era natural ver matrimonios que alcanzaban 50 años juntos. Las personas de esa época estaban acostumbradas a luchar y esforzarse por lo que querían. Si también habían uniones desastrosas que por miedo al “qué dirán” permanecían juntos, pero siempre tenían la opción de separarse. Eso ya no es culpa del amor como tal, sino de las decisiones que las personas toman.
Y es que el amor es justo eso: un conjunto de decisiones que una pareja toma y que hace que el amor crezca y se fortalezca.
El amor no es compatible con el egoísmo
En una pareja que se ama no existe el egoísmo. Por eso, si no estás dispuesto a hacer sacrificios y a asumir compromisos, no te metas en una relación de la que esperas recibir, pero no dar.
Lo que pasa es que el amor con el paso del tiempo se hace más profundo y estable; entonces, hay seguridad y confianza y eso hace que no haya necesidad de querer acaparar o de buscar solo el bienestar propio.
En el amor, el afecto, la entrega, la consideración, la confianza y el respeto deben ser recíprocos. Si no hay reciprocidad, no hay amor.
Lo más bonito del amor es que no tiene límites de edad y está más allá de la belleza física. Desde luego, llegar a este punto requiere madurez mental y emocional.
Muchas veces el amor de verdad tarda en llegar; te puedes enamorar mil veces, pero amar, solo lo logras pocas veces en la vida y muchas veces a edades que no imaginas posibles. Como dice la canción: “El amor no tiene horarios ni fecha en el calendario”.