Esta maestra está haciendo con sus alumnos algo que le pone a los padres los pelos de punta y que promueve la propagación de virus y bacterias

Los padres están indignados.

Fernanda Gonzalez Casafús

Detrás de un niño educado hay unos padres educados y respetuosos. Pero, qué pasa cuando aprender valores y buenos modales se hace “a la fuerza”. Sucede lo que pasó en esta escuela de Inglaterra, donde los padres pusieron el grito en el cielo ante las nuevas directivas en el inicio de clases.

Según The Sun, los padres de los alumnos de la escuela primaria Posh Tunbridge Wells en Inglaterra están algo molestos con la directora del establecimiento, Amanda Simpson, al imponer para la institución una nueva práctica en pos de enseñar buenos modales: los alumnos deben sonreír y estrechar las manos de sus maestros cuando ingresan al salón de clases.

Una práctica en la mira

Si bien el hecho de estrechar las manos de sus maestros enseña a los niños la concreción de los buenos hábitos y modales, es entendible la preocupación de los padres, ya que la nueva política introducida significa que los maestros podrían estar temblando alrededor de 150 manos al día, provocando temores sobre la propagación de gérmenes.

Muchos profesores llevaron a las clases algún tipo de desinfectante, como alcohol en gel, para evitar la propagación de virus, al estar en contacto con tantas manos durante el día.

El argumento de la Directora

Para Amanda Simpson, la medida tiene que ver con una forma de educar en valores y buenos modales a los alumnos de la escuela. Según Simpson, estrechar las manos al encuentro de cada clase hace que los alumnos se sientan “bienvenidos y apreciados” y que ya había incluido esta política de saludo en una escuela anterior y no hubo ningún aumento de la propagación de virus y bacterias.

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La mujer alegó, de acuerdo al diario británico Express: “Aunque mantenemos la escuela tan limpia como sea posible, los alumnos tocarán inevitablemente los pasamanos, las manijas de las puertas y otros artículos que otros niños han tocado previamente durante el día, por lo que centrarse en el contacto a través de un simple apretón de manos es extraño. En cualquier caso, los desinfectantes de manos estarán disponibles en toda la escuela para cualquier persona que tenga preocupaciones sobre la infección”.

Si bien el hecho de estrechar las manos y realizar este tradicional saludo que enseña buenas prácticas de conductas sociales a los niños y adolescentes, lo cierto es que los padres están en desacuerdo y ahora la escuela está en el eje de todas las noticias.

Un apretón de manos que puede ser perjudicial

Lo padres de esta escuela inglesa no están tan equivocados. Y no es que estén en desacuerdo en que sus hijos sean “bien educados”, sino que se basan en la opinión de los expertos que afirma que el apretón de manos puede transmitir gran cantidad de virus y bacteria, y con ellos enfermedades.

Según Mail Online, y de acuerdo a un estudio realizado en 2014, un apretón de manos firme es el saludo menos higiénico, ya que supone la transferencia de 124 millones de bacterias vivas en promedio. Es por ello que los hospitales de Estados Unidos y Gran Bretaña están alentando a la población a saludarse a través del choque de los puños y no con un apretón de manos.

El Dr. Dave Whitworth de la Universidad de Aberystwyth fue quien realizó el estudio que prueba la gran cantidad de bacterias que se transmiten en un apretón de manos y remarcó: “Probamos la idea de que diferentes saludos de contacto podrían permitir que diferentes números de bacterias se muevan entre las personas y descubrimos que un firme apretón de manos prolongado permitió la mayor transferencia de bacterias de cualquier otro saludo que probamos” Lo que menos bacterias propagó fue el choque de puños, por lo que los doctores están alentando a que se adopte ese tipo de saludos en todos los hospitales y ámbitos sociales.

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En la prevención está la clave

Noticias como éstas dejan un poco paranoicos a todos. No se trata ahora de dejar de saludar a la gente o evitar estar cerca o dejar de tener contacto alguno. De hecho, según dicen los especialistas el problema no es el apretón de manos, sino quién lo realiza. Es decir, si todos mantenemos hábitos de higiene, tanto personales como en nuestro hogar y lugares de trabajo, el riesgo de contraer y transmitir enfermedades disminuye significativamente.

El Centro para Control de enfermedades de Estados Unidos sugiere una serie de consejos para prevenir las enfermedades a través de hábitos de higiene:

Lavar las manos con frecuencia

esto es, antes y después de cada comida, y luego de estar en contacto con productos de deshecho, o de manipular alimentos crudos, o de estar en contacto con animales, o cuando está en contacto con alguna herida, etc. Aplicar bastante jabón haciendo mucha espuma y frotar las manos durante 20 segundos (ése es el tiempo necesario para quitar los gérmenes de las manos). En lo posible, secarse con toallas de papel descartables.

Limpiar y desinfectar superficies con regularidad

Ya sea en el hogar como en el lugar de trabajo. El baño y la cocina deben estar completamente limpios siempre.

Manipular los alimentos de forma segura

esto es mantener los alimentos crudos separados de los vegetales, limpiar las superficies que están en contacto con los alimentos con frecuencia, cocinar los alimentos a la temperatura adecuada y refrigerar los alimentos antes de que se descompongan.

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Vacunarse

Otra de las formas de evitar la propagación de enfermedades es seguir el calendario nacional de vacunación vigente en su país. Es la mejor forma de salvar vidas y prevenir enfermedades.

Yo siempre llevo mi botellita de alcohol en gel en mi bolso, y me aseguro de tener siempre mis manos libres de bacterias cuando no puedo o no encuentro lugar donde lavarme las manos con rapidez. Y tú ¿qué medidas de higiene implementas en tu familia para evitar la propagación de virus y bacterias?

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Fernanda Gonzalez Casafús

Fernanda es Licenciada en Periodismo, especialista en Redacción Digital y Community Managment. Editora de contenidos y redactora en Familias.com. Nacida en Argentina y mamá de dos, ama los animales, la danza, la lectura y la vida en familia. Escribir sobre la familia y la maternidad se ha convertido en su pasión.