¿Estás criando hijos machistas? 6 cosas sobre las mujeres que tus hijos aprenderán de ti
Sin saberlo, podrías estar inculcando comportamientos machistas en tus hijos. Entérate de qué estás haciendo y cómo puedes cambiarlo.
Zaida Libertini
La Real Academia Española define la palabra “machismo” como una actitud de prepotencia de los varones respecto a las mujeres. También se puede definir como el conjunto de acciones que suponen superioridad del género masculino y discriminación en contra de la mujer.
En America Latina, el machismo es un comportamiento fuertemente arraigado a la cultura de la región. Es responsable de muchos problemas sociales, como la violencia doméstica contra la mujer, el acoso sexual, la desigualdad laboral, etcétera. También el machismo que genera una doble moral para el hombre y la mujer, es un factor contribuyente al alto número de familias compuestas por madres solteras, que existen en la comunidad latina. En un artículo sobre madres solteras, la doctora Dora Tobar explica que “esto sucede ya que el machismo y la ignorancia que a veces resta importancia al rol de padre en la vida de los hijos, contribuyen también al problema de los hogares compuestos por madres solas.”
Es muy cierto que el problema del machismo ha sido acarreado desde muchas generaciones atrás, y está tan sumergido en la cultura que erradicarlo pareciera una misión imposible. Sin embargo, ni un solo niño o niña nace conociendo el comportamiento machista. Si tomas esto en cuenta, entenderás el enorme papel que como madre tú aportas para perpetuar o eliminar este comportamiento en nuestra sociedad.
Toma consciencia de estas situaciones en las que tú puedes darle un mensaje peligroso a tu hijo, el cual podría llevarlo a crecer siendo un hombre con actitud machista:
1. La doble moral
No cometas el error de aplicar morales diferentes a los hombres y las mujeres, para no correr el riesgo de inculcarlo en tu hijo. Especialmente, no critiques a otras mujeres delante de tus hijos por acciones que catalogarías como “normales” en los hombres. Cualquiera que sea la moral que desees inculcar en tu hogar, asegúrate de aplicarla igualmente en tus hijos y tus hijas.
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2. Diferencia de labores diarias
No dudes en enseñarle a tus hijos varones quehaceres de la casa. Tampoco ignores enseñarle a tus hijas trabajos duros, considerados para varones. Al hacer esto, no quiere decir que criarás hombres que se dediquen al hogar, ni mujeres que practiquen labores duras; sino que criarás adultos autónomos y multifacéticos que podrán vérselas por sí mismos, independientemente de qué rol decidan practicar en sus vidas adultas.
3. Identidad personal
Inculca a tus hijos e hijas a conocerse interiormente y a mantener un sentido de identidad personal profundo. Esto les será de mucha ayuda, especialmente en los años de adolescencia cuando sientan que deben buscar modelos en los cuáles encajar. Enséñale a tus hijos que tanto hombres como mujeres tienen un valor único, el cual no varía por diferencia de género.
4. Inculca amor sano
En un mundo ideal, los hijos nacen dentro de un matrimonio feliz. Sin embargo, en nuestros tiempos por diversos factores sociales, este no siempre es el caso. Si tienes hijos y también mantienes una relación con tu pareja, ten mucho cuidado, ya que éste será el concepto que tus hijos o hijas desarrollarán del amor. No permitas que tus hijos entiendan que el amor se expresa con maltrato y mucho menos que tus hijas piensen que el amor se demuestra soportando sufrimiento y malos tratos.
5. Cuida tus expresiones
Somos tan bombardeados con expresiones machistas que a veces las escuchamos y las catalogamos como ciertas. Por ejemplo, criticar a una mala conductora con un “¡Tenía que ser mujer!” es muy ofensivo y es totalmente falso. No permitas que tu hijo escuche este tipo de comentarios y lo tome como un simple chiste. Corrige a quien lo dice y explícale a tu hijo que esos comentarios no son ciertos ni graciosos.
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6. Diversidad laboral
Explícale a tus hijos que cualquier persona puede trabajar en cualquier profesión que desee. No cultives estereotipos laborales. Muéstrale cómo existen mujeres que son policías o pilotos de aviones, así como hay hombres que son enfermeros o maestros. Incentívalos a trabajar duro por cualquier profesión a la que deseen dedicarse, sin importar su género.
Como mamás tenemos la responsabilidad de preparar a nuestros hijos física, mental y emocionalmente para que se desarrollen como adultos que formen familias sanas. Toma en cuenta que es mucho mas fácil corregir a un pequeño ahora, que intentar cambiar a un adulto. Tomemos conciencia de las cosas que podemos hacer ahora para revertir las estadísticas y erradicar el machismo en las próximas generaciones.