Estas son las señales de que eres una persona mentalmente sana
Buscar la paz y el equilibrio mental es vital para poder disfrutar de una vida feliz.
Erika Patricia Otero
Todos aspiramos a tener una vida tranquila, equilibrada y tan feliz como sea posible. Para lograr esto se requiere disfrutar de una salud mental sana.
Es de vital importancia saber que gozar de una salud mental sana no es algo con lo que se nace. Hay factores genéticos que ejercen alguna influencia en la salud mental humana. Al día de hoy se sabe que hay una serie de enfermedades mentales de orden hereditario.
Ahora bien, el ambiente en el que crecemos, cómo nos crían y todas las situaciones que vivimos en nuestra primera etapa de la vida influyen ampliamente en nuestra salud mental.
¿En qué consiste ser una persona mentalmente sana?
Una persona mentalmente sana es aquella que, según la Organización Mundial de la Salud, vive libre de enfermedades y disfruta de un estado de total bienestar físico, mental y social.
Ten en cuenta que además, la OMS explica que no solo se trata de la ausencia de enfermedades y condiciones psiquiátricas. Es también lograr mantener el equilibrio interno y la relación con su realidad.
Es de esta manera cómo, la OMS incluye aspectos tales cómo desarrollar el potencial individual, enfrentar los problemas diarios y ser alguien productivo.
Características de una persona mentalmente sana
Buen amor propio y confianza en sí mismo
Una autoestima saludable implica mantener una buena relación con nosotros mismos. ¿Cómo seria? Bueno, tenerse en buena estima, ser amable y autocompasivo consigo mismos. Además, ponerte como prioridad y escuchar tus necesidades y requerimientos.
Una persona con un amor propio sano es un factor que indica que cuidas de todo lo que te puede hacer daño. Por esto, es un factor que indica que gozas de una buena salud mental.
Capacidad de adaptación psicológica
Ser capaz de adaptarse a las situaciones cambiantes de la vida, también es un indicador de una salud mental sana.
Básicamente consiste en ser capaz de mantenerse en calma y un estado mental equilibrado tanto en situaciones de paz, así como cuando hay problemas. Este estado de adaptación se logra solo si la persona es flexible psicologicamente hablando.
¿Qué habilidades incluye la flexibilidad psicológica?
- Tener una mentalidad abierta.
- Aceptar los cambios sin frustración excesiva.
- Ser capaz de hallar formas efectivas de actuar ante los problemas y desafíos diarios.
Inteligencia emocional
Una persona que sabe identificar lo que siente y ha aprendido a regular sus emociones; es decir, que disfruta de una alta inteligencia emocional, se considera alguien mentalmente sano.
Dicho de otra forma, las personas sanas mentalmente no se dejan gobernar por sus emociones y no reacciona en función de lo que siente.
Es consiente de sus emociones y sabe gestionarlas de manera saludable. Además, aplica estos mismos procesos que pone en función para ella misma, en otras personas. Esto le permite entender y comprender a los demás, y con esto en cuenta la persona sabe cómo actuar al respecto.
Trabajo interno
Algo que muchas personas desconocen, es que si bien hay que mantener una buena relación con el entorno, no se debe descuidar el procurar mejorar como persona.
Las personas con una salud mental óptima suelen trabajar en sí mismas. Es decir, buscan fortalecer sus debilidades y mantener bajo control esos aspectos de sí mismos que no les son tan benéficos. Ellos saben que trabajar en sí mismos es fundamental para crecer, evolucionar y adaptarse a la vida cambiante.
Practica el autocuidado
Si algo es característico de las personas mentalmente sanas es que saben tener espacio para ellas mismas. Saben administrar su tiempo repartiéndolo de manera adecuada entre su trabajo, tiempo para ellos mismos y tiempo para relacionarse con otros.
Tienen buenas habilidades comunicativas
Se puede saber si uno es mentalmente sano si sabe analizar la manera como se relaciona con los demás.
Si, por ejemplo, sabe que el tratarse con alguien le genera emociones intensas y negativas, analiza qué es lo que no está bien con ella misma y qué es lo que hace que se sienta de esa manera en compañía de esa persona.
No daña al otro ni se aísla; por el contrario, revisa sus emociones y trabaja en ellas para cambiar.
¿Cómo trabajar en ser alguien mentalmente sano?
Empezaré por decir que una persona mentalmente sana puede ser producto de una crianza buena y equilibrada. Sin embargo, como no todos crecemos con padres sanos emocionalmente hablando; las personas pueden recurrir a terapia y sanar sus heridas y relaciones consigo misma.
Ahora bien, estos pasos pueden ayudarte a conseguir de a poco salud mental:
- Ten cuidado con cómo te hablas. Ser amable y gentil contigo es primordial para tener un amor propio sano. Además, nos ayuda a comprendernos mejor y a buscar crecer y mejorar hasta llegar a nuestra mejor versión.
- Trabaja la aceptación y la no resistencia a los cambios. Aprender a aceptar que la vida no es estática, que todo avanza y evoluciona es parte vital para crecer. Además, te ayuda a desarrollar resiliencia y a adaptarte mejor a las circunstancias de la vida.
- Esfuérzate por alcanzar tus objetivos. Una persona que se esfuerza por lograr sus objetivos y se mantiene motivada, es alguien mentalmente fuerte.
- Aprende a escucharte. Aprende a interpretar tus sentimientos y emociones. No los niegues y los reprimas. Tu misma sabes con claridad que es lo que necesitas o no para ser feliz.
- Cuida cómo y con quien te relacionas. Si bien sabes controlarte y no dejas que tus emociones te dominen, no estás obligada a soportar los malos ratos que alguien te cause. Aprender a decir “no” y a poner limites es sano para tus relaciones.
Por último, pero no menos importante, recuerda que siempre puedes buscar ayuda terapéutica que te guíe sobre cómo mantenerte en sanidad mental y paz contigo misma y los demás.