Estos 9 remedios naturales te ayudarán a aliviar el malestar de las várices
No hay que esperar a estar enfermo para cuidar tu salud. "Prevenir es mejor que lamentar".
Erika Patricia Otero
Muchas mujeres y hombres sufren de las molestias causadas por una deficiente circulación sanguínea. Uno de los síntomas más comunes de problemas circulatorios son las venas várices.
Las várices no son solo un problema estético, son una condición grave de la salud que debe ser tratado por un especialista. La razón es que generan malestar y pueden llegar a ser muy dolorosas, llegando a causar problemas más graves de salud en quien las padece.
¿Qué son las várices?
Las venas varicosas son venas retorcidas y agrandadas; esto se debe a que las venas se dilatan y evitan una correcta circulación de la sangre. Debido a lo anterior, se producen bultos que son fáciles de ver y que a la larga pueden resultar lastimados por el roce de la ropa o algún objeto. Además, las venas várices son una consecuencia de lo que se conoce como enfermedad por reflujo venoso, también denominada insuficiencia venosa crónica.
Síntomas
Es relevante tener en cuenta que las venas varices pueden o no ser dolorosas. Y estos pueden ser los síntomas más comunes:
–Venas que son de color violeta o azul oscuro.
–Estas parecen pequeñas mangueras retorcidas y dilatadas de manera desigual. Como si fueran una especie de cordón que se enrolla alrededor de las piernas.
Cuando hay existencia de dolor pueden incluir los siguientes síntomas:
–Sensación de dolor o de pesadez en la zona afectada (piernas).
–Ardor, sensación pulsátil, calambres musculares e hinchazón en las extremidades inferiores.
–El dolor se hace más grande después de estar sentado o de pie durante mucho tiempo.
–Picazón alrededor de una o más venas.
–Cambios en el color de la piel alrededor de una vena varicosa.
Es muy importante tener presente que aunque puedes hacer algunos tratamientos caseros naturales para aliviar los malestares causados por las varices, lo más adecuado es consultar al especialista.
Remedios naturales efectivos para menguar los malestares de la várices
1 Cambio de hábitos
El sedentarismo es una de las principales causas de enfermedades en las personas. Un ejemplo de esto son las venas várices.
Para menguar los malestares causados por las várices, así que como para evitarlas, se recomienda mejorar los hábitos diarios:
- Dejar de fumar
- Ejercitarse (caminar, correr, trotar, montar bicicleta).
- Mantener un peso equilibrado y acorde a la estatura.
- Evitar usar ropa ajustada.
- Cambiar de posición cada tanto para evitar futuras varices (si estás mucho tiempo sentado o parado, caminar o poner las piernas en alto da descanso a la extremidades)
- Hidratarse bien durante el día.
- Uso de medias de compresión.
- Masajear regularmente las piernas para fomentar la circulación.
2 Ajo
El ajo es un alimento que contribuye con la salud cardiovascular. Es por esto que muchas personas lo incluyen en su dieta con regularidad. También se puede consumir a través de cápsulas con alguna de las comidas principales. No se supone que al consumirlo la cura sea “por arte de magia”, pero sí ayuda a complementarla.
3 Sábila
La sábila es una planta con grandes propiedades medicinales. Se puede consumir en batidos o como emplastos o cataplasmas para aliviar las molestias dolorosas de las várices. Además, hidrata la piel irritada y la nutre facilitando la curación de algunas heridas cercanas a las venas varicosas.
4 Vinagre de manzana
Esta es una opción alterna si no te entusiasma usar la sábila ni como bebida o para hacerte cataplasmas.
El vinagre de manzana sirve también para preparar compresas y aplicarlas sobre las zonas afectadas con las varices. Esos cataplasmas de vinagre de manzana alivian la pesadez en las piernas después de un largo día.
Es importante que tengas en cuenta que solo pueden aplicarlo las personas que no sufran dermatitis, psoriasis y otras afecciones de la piel, ya que va a resultar contraproducente. Recuerda que después de aplicarlo, podrías realizar un masaje para estimular la circulación.
5 Pomada de vinagre, zanahoria y sábila
Puedes realizar de manera casera una pomada con los siguientes ingredientes: sábila, vinagre de manzana y zanahoria. Solo debes hacer una mezcla en un procesador de alimentos o licuadora y procurar que quede más o menos espesa.
Luego, solo debes proceder a aplicarla sobre las venas várices con suaves masajes. Esta pomada ayuda a aliviar dolores y malestares sobre las venas afectadas. Recuerda que al retirarla debes enjuagarte con agua tibia.
6 Baños de inmersión
Los baños de inmersión se realizan en un balde con agua y sal marina. Solo debes sumergir las piernas durante veinte minutos mientras masajeas las piernas.
Estos baños son un remedio muy sencillo que se puede realizar a diario y es un gran alivio para las piernas y los pies casados luego de un arduo día de trabajo.
7 Extracto de semilla de uva
Los estudios han sugerido que el extracto de semilla de uva ayuda a combatir la hinchazón luego de largos estados de sedentarismo. Este extracto es una alternativa para tratar dolores y malestares en los casos con síntomas intensos.
8 Solución de hojas de manzanilla y caléndula
Aunque requiere un poco más de preparación merece el esfuerzo. Lo que debes hacer es hervir dos litros de agua y agregar un puñado de manzanilla y uno de caléndula.
Lo que harás luego, es dejarla reposar durante cinco minutos y después se aplica sumergiendo los pies en una tina o balde. Haz con esta solución lo mismo que con los baños de inmersión y tienen el mismo propósito y beneficio.
9 Aceites esenciales
Los aceites esenciales son muy buenos para hacer masajes y promueven el alivio y aumentar la sensación de bienestar. Todo lo que debes hacer es comenzar por aplicarlos en los pies y tobillos para ir subiendo poco a poco hasta los muslos mediante movimientos suaves y circulares. Lo mejor es que lo apliques en la noche para que se dé el efecto de relajación apropiado mientras duermes.
Si tienes un estilo de vida sedentario o un trabajo donde permaneces mucho tiempo en una sola posición, estos remedios te ayudarán a mejorar el malestar causado por este.
Recuerda: “Prevenir es mejor que lamentar”.