Festejar el cumpleaños de tu hijo es importante para su salud emocional, según un estudio
Cada año te prometes que no harás tanto despliegue. Pero ahí estás una vez más, celebrando su cumpleaños a lo grande (¡Y haces bien!)
Fernanda Gonzalez Casafús
Para los niños el festejo de su cumpleaños es un evento sumamente importante. Muchas veces esperan todo el año a que ese día llegue, y toda la familia se contagia de entusiasmo. A todos nos encanta celebrar la vida con una fiesta, y según los expertos, para los niños es sumamente importante hacerlo.
Desde que soy madre, cada año me emociona preparar el festejo de cumpleaños de mis hijos. Elegimos juntos la temática y planificamos cómo será. Me siento dichosa de poder brindarles cada año una fiesta donde ellos serán los protagonistas. Y ahora tengo más razones de peso para no pasar por alto el merecido festejo.
Razones claves para hacerlo, según la psicología
De acuerdo a un estudio realizado por la Dra. Jacqueline Woolley, de la Universidad de Texas, para los niños, los festejos de cumpleaños tienen una relación directa con el proceso de crecimiento. Es decir, que un niño que cumple 3 años, si no tiene un acontecimiento de celebración -por más austero que sea- sentirá que aún no ha cumplido años.
“¿Mamá, ya tengo 4?”, me dijo mi hijo cuando su fecha de cumpleaños ya había pasado pero aún no llegaba el día de celebración con sus amiguitos. Su percepción le indicaba que cumpliría 4 años el día de la fiesta. Y de esto habla el estudio de la Dra Wooley.
La investigación determinó que para los niños en edad preescolar, la celebración de su cumpleaños determina un papel causal en el proceso de crecimiento, y para los pequeños, el cambio de un año a otro se da cuando el hecho concreto de un festejo se lleva a cabo. Sin celebración, no hay crecimiento, según la apreciación del infante.
No te engañes, no hace falta una fortuna
Seguramente tú también tengas recuerdos maravillosos de las celebraciones de cumpleaños en tu infancia. Un pastel, los amigos, juegos y algo de música. No había fiesta temática, ni recuerdos personalizados, ni animadores estrella. Con muy poco, mamá y papá nos regalaban un festejo maravilloso.
Es cierto que en muchas familias celebrar el cumpleaños de los hijos se hace cuesta arriba. Sin embargo, aunque no puedas darte el lujo de hacer un cumpleaños con muchos detalles (que implica mucho gasto), créeme que con poco puedes hacer mucho.
Banderines, unos globos, un pastel, música, amigos, y mucha buena energía. Lo demás, es secundario; no te sientas presionada. Claro que todos queremos el mejor cumpleaños para nuestros hijos, pero si no tienes la posibilidad económica de hacerlo, opta por hacer un festejo más reducido y moderado. Pero jamás elijas no festejar. Tu hijo necesita esa celebración. Lo que cuenta es el ambiente de cariño y alegría.
Motivos para festejar los cumpleaños infantiles, según la psicología
1 Comprenden la percepción del tiempo
Tal como dice el estudio, los niños pequeños captan el paso del tiempo a través de hitos y hechos concretos. Una fiesta, por más pequeña que sea, les hará sentir que han crecido. Celebrar su cumpleaños es una perfecta forma de que ellos descubran el transcurrir del tiempo.
2 Se generan bellos recuerdos
¿Quién no recuerda su fiestas de cumpleaños en la infancia? Todos tenemos algún bello recuerdo que contar. Seamos creadores de gratas memorias para nuestros hijos, pues ello alimentará su alma y formará parte de su acervo emocional para toda la vida.
3 El niño se siente amado
Cuando un niño ve cómo sus padres preparan y planifican con anhelo su fiesta de cumpleaños, su autoestima se eleva y se siente querido e importante en su rol dentro de la familia.
4 Estrechan lazos sociales y familiares
Las fiestas de cumpleaños son el momento perfecto para reunir a la familia y para estrechar lazos. Además, ayuda al niño a valorar la importancia de las reuniones con los seres queridos en las fechas trascendentales.
Concéntrate en lo realmente importante
En el afán de hacer la mejor fiesta para nuestro hijo, o al menos aquella que él recuerde para siempre, nos enfocamos demasiado en las cosas materiales y no damos lugar a los sentimientos y necesidades del niño.
Así, nos enloquecemos armando decoraciones que vemos en los tutoriales en Internet, gastando fortuna en los recuerdos que daremos al final de la fiesta, o pasando noches en vela pegando figuras y armando centros de mesa para llegar a tiempo con todo.
Es muy bonito todo lo que los padres hacemos para la fiesta de cumpleaños de nuestros hijos. Sin embargo, a veces nos olvidamos de que la verdadera importancia de una fiesta radica en que el homenajeado se sienta a gusto y feliz el día de su fiesta, y eso no será proporcional al dinero que inviertas sino al ambiente de amor que se sienta.
Organízate con tiempo, pide ayuda a la familia o amigos, y acepta la colaboración del cumpleañero en aquellas manualidades para la fiesta. Involucrar a tu hijo en la preparación de la fiesta es una forma de demostrar cariño y confianza en él.
No necesitamos la fiesta más ostentosa, ni los adornos más prolijos, ni el pastel mejor decorado. Nuestros hijos necesitan el cariño y la mejor voluntad para celebrar ese día único. No te estreses. Poniendo el corazón en cada detalle, todo saldrá a la perfección. Y la sonrisa de tu hijo te dará la certeza de que lo estás haciendo muy bien.
Fernanda Gonzalez Casafús
Fernanda es Licenciada en Periodismo, especialista en Redacción Digital y Community Managment. Editora de contenidos y redactora en Familias.com. Nacida en Argentina y mamá de dos, ama los animales, la danza, la lectura y la vida en familia. Escribir sobre la familia y la maternidad se ha convertido en su pasión.
