Hallar luz en la oscuridad, después de la muerte de un hijo
No hay dolor más grande que la perdida de un hijo. Aquí encontraras cinco consejos que te ayudarán a encontrar paz en medio del dolor.
Erika Otero Romero
En una ocasión escuché a una madre decir con tristeza que cuando una mujer pierde a su esposo, le llaman viuda; al hijo que pierde a sus padres, le llaman huérfano; pero, ¿qué nombre se da a la madre o al padre que pierde un hijo? Cuánta razón en esas pocas palabras.
La pérdida de un hijo es un dolor que no tiene comparación, y es que se supone que la vida debe llevar una especie de orden cronológico en lo que respecta a la muerte. Sorpresa nos da cuando llega sin dar aviso y se lleva a un hijo, dejando el hogar vacío y desolado. No importa si el hijo tenía un año o veinte: la muerte es la muerte y exige no volver a ver a ese ser que se llevó en el vientre por nueve meses y que se amará para siempre.
Nada prepara para la pérdida de un ser amado, pues quien ha perdido a alguien sabe que por mucho tiempo se experimenta un vacío en el corazón y la vida que no se puede llenar, aunque pasen los años. Pese a esto, la lógica de la existencia manda a que continúes el camino de la vida, dejando que el dolor poco a poco vaya cediendo. Pero, ¿de dónde se sacan fuerzas cuando el dolor de la muerte de un ser que has llevado en tu vientre, te supera?
Yo no pretendo darte “consejos” para superar el dolor de la pérdida de un hijo, no tengo un punto de dónde partir, pero sí puedo darte algunas recomendaciones que quizás puedan darte algo de luz y esperanza en momentos tan difíciles.
Cinco consejos que podrían darte luz en medio de la oscuridad
1. Aceptación de la muerte del hijo
Es el más difícil de asumir, es muy común que una madre o un padre que esté pasando por esa situación crea que es solo un mal sueño del que pronto podrá salir. Sin embargo, lo mejor es expresar el dolor hablándolo con alguien o llorando, ya sabes que son acciones liberadoras.
2. Liberarse del complejo de culpa
En la mayoría de los casos, muchos padres entran en un conflicto mental de “¿Y si hubiera hecho esto o aquello?”. Ten en cuenta que cuando la muerte se presenta, es muy probable que esa interrogante no te ayude más que a seguir sumiéndote en la tristeza. La invitación es recordar a tu hijo con amor y en sus mejores momentos.
3. No te fijes un tiempo meta para superar la muerte de tu hijo
El dolor por la pérdida no se puede reprimir, deja que se manifieste de manera libre; la mejor cura para esa situación es el tiempo.
4. Recuerda a tu hijo con amor
Es lo mejor que puedes hacer para mantenerte; no podrás olvidarlo y tampoco se pretende eso, pero es mucho más saludable recordar los momentos felices y sacar fuerza de ellos para vivir, sobre todo cuando te sientes sumergido en el dolor que provocan los momentos de pérdida.
5. Celebra los buenos acontecimientos y no te sientas culpable
En lugar de sentir culpa, piensa mejor que estás disfrutando de momentos gratos y que a tu hijo le gustaría que fuera así. Como expuse antes, recuérdalo con mucho amor y dedica tu vida a hacer que la existencia valga la pena. No vuelvas a cometer los errores del pasado y esmérate por ser feliz, aunque a veces tengas periodos de tristezas.
Cada persona tiene un ciclo y una meta en la vida y quizá no lleguemos a conocerla nunca. En mi experiencia, para afrontar el dolor de la pérdida de mis seres queridos, elijo pensar que mi ser amado era tan especial que este mundo no lo merecía. De una u otra manera eso me llena de fuerzas para seguir adelante en la búsqueda de ser feliz, hasta que tenga la oportunidad de encontrarlo de nuevo en mi camino, según mis creencias, más allá de la muerte. Un abrazo y fortaleza.