Hijos que agreden a sus padres: 5 soluciones para erradicar la violencia de raíz
Niños que gritan a sus padres,los ofenden usando palabras duras, humillan, ridiculizan y hasta los golpean ¿Cómo cortar este comportamiento de raíz?
Emma E. Sánchez
Mi esposo dice que estas cosas solo las veo yo, que solo a mí me toca presenciarlas porque las ando buscando ver. Pensé que de alguna manera tenía razón, pues ciertamente donde hay niños, por hábito adquirido en mi profesión, comienzo a observar sus conductas, pero esta semana estando juntos mi esposo y yo en la zona de restaurantes de una plaza comercial, le dije: “Observa al niño de aquella mesa”, y frente a nuestros ojos y las muchas personas que estábamos ahí, pudimos ver con claridad el drama completo de una madre golpeada por su hijo.
Fue una escena sumamente vergonzosa y triste, para mí hasta irritante, pues como si no fuera poco, ahí mismo en la misma mesa estaba el padre quien simplemente no hizo nada para evitar la agresión a su esposa. Los comensales de las mesas aledañas no podían creer lo que veían y los gritos del menor hicieron que muchos más se enterarán.
De regreso a casa mi esposo y yo comentábamos lo que habíamos visto, y a partir de ahí en otros lugares él ha estado observando la misma conducta en distintos niveles y con diferentes matices.
Hijos que les gritan a sus padres, que les ofenden usando palabras duras y ásperas, que los avientan, humillan, ridiculizan y hasta los golpean.
En el caso del centro comercial, el niño de aproximadamente unos 9 ó 10 años estaba muy molesto con su madre porque la hamburguesa que le trajo “tenía demasiado ketchup”. El chiquillo tiró la comida, y cuando la madre le dijo que no hiciera eso, él simplemente la abofeteó dos veces, y ni la madre ni el padre lo detuvieron, se limitaron a pedirle que no lo hiciera ahí.
El niño se paró y se fue enfadado hacia las escaleras eléctricas, el papá se fue tras él caminando lento y resignado, la mamá recogió la mesa y al hermano menor, para ir detrás de su esposo limpiando sus lágrimas, que no sé si eran más por pena o por humillación.
José Ubieto, Psicoanalista, señala que estas situaciones no son excepcionales, aunque aún no es una epidemia, pues en España esto solamente representa entre el 3 y 7% de las situaciones familiares.
También señala, muy acertadamente que aquí la cuestión es entender por qué sucede, para actuar y no simplemente voltear hacia otro lado simulando no ver lo que pasa.
Características de los niños agresivos con sus padres
Javier Urra, Psicólogo, da una lista de características sobre los niños que violentan a sus padres:
– Pueden iniciar muy pequeños y la violencia se sale de control en la pubertad o adolescencia
– Sus padres pueden ser personas bien educadas y con grados académicos altos
– Tienen un buen nivel social
– No tienen obligaciones
– Han dejado la escuela o van muy mal
– No hacen deporte
– Se levantan tarde
– La madre suele ser la más violentada
– Son chantajistas sentimentales
– No tienen límites establecidos
– Carecen de autodominio
– Pueden ser hedonistas-nihilistas
– Pudieron aprender la violencia del padre
– No niegan ser violentos, al contrario la describen fríamente o
– Culpan al padre /madre de provocarlos.
La BBC menciona el primer estudio europeo sobre el tema en 2013 elaborado por la Universidad de Brighton donde Paula Wilcox, investigadora del estudio dice que “los padres viven con temor pero el tema aún es tabú”.
Dicho estudio declara que este es un problema social propio del siglo actual, pues gran parte del problema suele ser que la familia no tiene un concepto claro de la autoridad y su sistema disciplinario o de límites es permisivo, son más amigos que padres, y crean “adolescentes caprichosos que no toleran la frustración” Un adolescente al que hay que decirle sí a todo, vive el presente y “explota” si no se le complace.
La falta de límites genera angustia y ansiedad.
A ningún niño se le debe permitir el uso de los golpes o la violencia física hacia cualquier persona o animal, y mucho menos ejercerla hacia sus padres.
Prevención
Educar a los hijos con límites claros y esforzarnos cada día por ellos en edades tempranas se ha vuelto una necesidad imperante, lo mismo que criarlos en el respeto y el amor. A continuación te comparto algunas buenas estrategias para implementar hoy mismo en casa con tus hijos sin importar sus edades
1 Identificación y manejo de emociones
A todos nos hace mucho bien saber qué son las emociones e identificarlas para poder actuar de manera funcional en nuestro entorno. Los niños hoy más que nunca requieren que les enseñemos con ejemplo y a reconocer las palabras que nombran las emociones.
Los niños deben ver cómo nosotros procesamos los sucesos que nos hacen enojar o sentir frustración, y entonces podrán imitar y reaccionar de manera más favorable.
2 Privilegiar el diálogo ante cualquier situación
Nuestro hogar es el mejor refugio para animar y empoderar a sus integrantes a expresarse, argumentar, poder escuchar a otros, buscar soluciones y ser respetuosos ante ideas distintas.
Toma un tiempo para sentarse en familia y discutir juntos las cosas que suceden, los retos, las alegrías y todo aquello donde la familia pueda opinar y ser escuchada.
3 Ser un ejemplo de autodominio y respeto
Si la familia -y especialmente el padre-, son violentos, el niño en formación y el adolescente sin límites replicarán estas conductas directamente sobre los más vulnerables del hogar: la madre, hermanos más pequeños, o mascotas.
4 Ser respetuoso y considerados hacia la madre
La madre es el primer flanco débil en la casa, inclusive antes de los hijos, de ahí que el padre siendo la figura de autoridad, deba dar el ejemplo de respeto y consideración hacia la madre y por tanto, todos los demás están implícitamente obligados a hacer lo mismo.
5 Estar atentos a cualquier expresión de violencia dentro del hogar
Los video juegos, programas de TV, caricaturas e inclusive otros familiares o compañeros de escuela, pueden ser el origen, ejemplo y enseñanza del uso y normalización de la violencia como forma cotidiana para relacionarse. No lo permitas, mantente alerta.
La violencia intrafamiliar en cualquiera de sus facetas es importante prevenirla, evitarla y sobre todo erradicarla en nuestros hogares.