Joven madre es DISCRIMINADA al sentarse en la antigua primera clase
Un video nos demuestra que la división de clases aún existe en pleno año 2018.
Camila Ignacia Gómez González
Hace algunos días ha comenzado a circular por internet un video que muestra una fuerte discusión entre una joven madre y una señora de la tercera edad a bordo de un tren en Reino Unido. Todo comienza porque la joven decide sentarse en un asiento PREFERENCIAL y toma el bolso de mano de la señora para ponerlo en el portaequipajes.
Pero la señora se altera hasta límites insospechados, pues comienza a enrostrarle que ella no debía estar en ese lugar por no pertenecer a la PRIMERA CLASE. Desconociendo absolutamente que las reglas de división de clases dejaron de existir desde hace algún tiempo.
El diálogo de la conversación es el siguiente:
Abuela: No puedes sentarte aquí, esto es primera clase y tú no pagaste un boleto para estar acá. Tienes que aprender a respetar a tus mayores que son mejores que tú.
Madre: Es un asiento preferencial, claro que puedo usarlo. Aquí dice que puede usarlo quien lo necesite.
(La gente comenzó a unirse a los reclamos)
Abuela: A demás no quiero un bebé llorón aquí.
Madre: No está llorando, incluso se comporta mejor que tú.
Abuela: Estoy resfriada, voy a contagiarlo (tosiendo al lado del bebé)
Madre: Estás poniendo en riesgo a todo el vagón del tren, no solo a mi bebé.
En ese preciso momento, un amable señor se paró y le ofreció su propio asiento a la joven madre que para esas alturas se encontraba realmente cansada por la situación.
El video ha dado la vuelta al mundo, cuesta creer que en pleno año 2018 la gente siga creyéndose superior a los demás por tener un poco más de dinero. Tristemente la división de clases ha continuado y la discriminación contra una madre y su pequeño hijo se hizo latente una vez más.
Lógicamente detestamos la situación que esta joven mujer tuvo que vivir, sabemos que NADIE tiene el derecho de discriminar a otro por su posición social y por NINGÚN argumento.
Por lo mismo queremos recordarte que según la Declaración Universal de los Derechos Humanos TODOS tenemos los siguientes derechos:
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Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
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Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición. Además, no se hará distinción alguna fundada en la condición política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónoma o sometida a cualquier otra limitación de soberanía.
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Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
Estos son solo 3 de los principios de la Declaración de Derechos Humanos, pero en ellos se deja ver claramente que a pesar de estar viviendo en una civilización que se jacta de los avances diarios de la humanidad, aún no puede lograr respetar al otro, por el simple hecho de ser humano.
Camila Ignacia Gómez González
Camila, es Relacionadora Pública, con orientación en Marketing, actualmente reside en Villa Alemana, Chile. Es esposa y madre, y ama escribir para ayudar a fortalecer los lazos familiares.
