La importancia del pensamiento crítico en los niños y cómo ayudar a tu hijo a desarrollarlo
Un adulto libre y autónomo fue un niño a los que sus padres le permitieron conocer el mundo por sí mismo.
Erika Patricia Otero
Todos tenemos la capacidad para discernir el mundo que nos rodea. Ser capaces de tomar nuestras propias elecciones es una habilidad que desarrollamos de niños. Sin embargo, esa capacidad de formar nuestra propia opinión depende de la libertad que nos otorguen nuestros padres.
Desde luego, también hay ocasiones donde nos dejamos llevar por lo que otros digan; aun así, esto no pasa todas las veces. Esto tampoco representa un mayor problema, porque siempre podemos formarnos una idea propia de la situación.
¿De qué se trata el pensamiento crítico?
Consiste en permitir al niño a que forme su propia opinión de las cosas; además, basado en esto tomará decisiones adecuadas.
Te preguntarás entonces cómo es que un padre incentiva esta habilidad en su hijo. Pues bien, le permite al niño analizar, evaluar y valorar una determinada situación. Lo que hace el niño a través de este proceso, es formarse una idea propia de esa situación. Esto es lo que se conoce como pensamiento crítico.
Básicamente lo que se pretende es “despertar” al niño para que no se deje manipular por una primera impresión, sino que se forme su propio pensamiento, y entonces decida qué o cómo actuar.
El poder oculto de escudriñar y decidir
Seamos sensatos, si hay algo que a veces nos resulta bastante complicado es elegir entre varias opciones. Sin embargo, cuando sometemos una situación a un análisis exhaustivo, la decisión se hace más fácil.
El pensamiento crítico permite conocer las dos caras de una situación y discernir entre lo falso y cierto; esto es lo que los padres deben procurar que su hijo aprenda. Además, les permite no dejarse manipular por nadie.
El niño al tener sus propios conceptos y conclusiones de cosas, desarrolla independencia. Al darse cuenta que puede construir sus propios conceptos, se hará consciente de que los demás hacen los mismo. Esto, lo que hace en el niño es ayudarlo a ser más tolerante y a aceptar la diversidad.
La oposición protectora
Parece absurdo, pero hay padres que se oponen a que sus hijos tengan sus propias opiniones y conceptos del mundo. Esto se debe a esa necesidad inconsciente de que sus hijos dependan de ellos.
Para este tipo de padres, sus niños son demasiado pequeños para decidir qué quieren comer o a donde quieren ir. Ellos sienten y creen que sus hijos no tiene la edad suficiente para saber lo que quieren.
Es cierto que los niños pueden no tener experiencia, necesitan adquirirla y eso lo logran a través del pensamiento crítico. Sin embargo, en ese afán protector muchos padres coartan esa libertad en sus hijos.
Proteger y sobreproteger
Proteger y sobreproteger son dos cosas muy diferentes. Cuando proteges a tus hijos le das la oportunidad de hallar su propio lugar en el mundo. Ayudas a tus hijos a investigar, analizar y decidir de la manera correcta. Es decir, les estás dando herramientas para que sea un adulto audaz a la vez que sabio. En cambio, cuando se sobreprotege a un niño casi que se le impide el libre desarrollo de sus habilidades mentales.
Es cierto, hay cosas en las que los niños no pueden decidir; por ejemplo, ir al médico o no, es algo de pertinencia paterna. Sin embargo, si se trata de qué quiere vestir o con quien quiere jugar, podría decidir.
Beneficios de desarrollar el pensamiento crítico en los niños
Este permite que los niños desarrollen las siguientes habilidades:
Punto de vista propio
Cuando el niño desarrolla el pensamiento crítico, analiza de diferentes maneras una misma situación. Esto le permite darse cuenta de lo que es correcto o no; a la vez, el niño no se deja manipular para hacer algo que no quiere.
Aumenta la capacidad de resolución de problemas
Cuando los niños son capaces de darse cuenta de lo que sucede y analizan esos eventos, poco a poco desarrollan la capacidad para resolver problemas. Pueden incluso ofrecer soluciones bastante creativas a problemas cotidianos.
Mejora la capacidad del lenguaje
Todos los niños pasan por una etapa de crecimiento donde es habitual que pregunten de todo un poco. Lo que el cerebro del niño hace es adquirir información importante que puede usar más adelante en su vida infantil.
Ahora bien, cuando el niño tiene la posibilidad de analizar los eventos de la vida, puede usar esos conocimientos para construir sus propios conceptos. Es así como muchas veces te verás sorprendido porque tu niño usa palabras que “solo usaría un adulto”. Ese es el pensamiento crítico haciendo su magia en tu hijo.
Amplia sus horizontes
Analizar el mundo da una perspectiva más amplia de la vida en general. Un niño con un buen pensamiento crítico entiende y comprende más los eventos de la vida.
Incluso, el niño puede ver y comprender de una manera más amplia él porqué de algunos problemas de índole social. Esto le libera de prejuicios y miedos sin fundamento y le ayuda a tener una mejor relación con las demás personas.
Dale a tu hijo la oportunidad de conocer la vida a su alrededor de tu mano. Incentívalo para que sea curioso, plantéale problemas sencillos para que los resuelva. Esto le ayudará a ser un adulto capaz de enfrentarse al mundo y a sus dificultades.
Erika Patricia Otero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
