La regla de las 5 “R” para enseñar a tus hijos a cuidar el planeta
Si queremos un futuro sustentable y verde para ellos lo mejor es comenzar ahora, desde nuestro propio ejemplo.
Teresa Guadalupe Correa Pérez
Generar desechos es algo realmente fácil, pues solo con ir a comprar algo al supermercado y otras cosas cotidianas como pasar a diario por un café para llevar en la cafetería más cercana al trabajo, comprar fruta envasada en el autoservicio o fumar un cigarro ocasional, estamos produciendo cada vez más basura.
Nuestro mundo actual está casi diseñado para producir basura, pues ya son muchas las toneladas de objetos que se juntan en tiraderos y rellenos sanitarios a diario.
Estamos llegando ya a los límites de nuestro planeta tierra y eso se refleja en la extinción de miles de hermosas especies que son también pilares para la vida humana, como es el caso de las abejas que se encargan de la polinización.
El cambio climático, la contaminación del agua por las fábricas textiles, y todos los problemas ambientales a nivel local y global ya son un problema colectivo.
Todos somos parte del problema
“Acusamos a los gobiernos y a todos los sectores de la problemática ambiental, pero en realidad no volteamos a ver hacia nosotros y a nuestra familia como parte de la sociedad, ¿qué es lo que nosotros estamos haciendo para cambiar el problema de la basura?” dice la activista Gabriela Baeza.
Este es un pensamiento que comparto, y que me ha llevado a reflexionar acerca de la necesidad de voltear hacia nosotros mismos y hacer cambios positivos para que podamos disfrutar con nuestros hijos de un medio ambiente más limpio.
Y lo mismo aplica para muchos otros problemas. A muchos nos educaron para esperar a que los demás tomen acción, sobre todo el gobierno o las industrias, pero nosotros debemos tomar conciencia e iniciativa.
Sin embargo, antes de salir e intentar cambiar a los demás, debemos de poner el ejemplo, y a través de este es como muchas otras personas se pueden inspirar al cambio. Verdaderamente ese es el valor del cambio local, y es lo que realmente necesitamos en nuestro entorno, una revolución que empiece en la conciencia de cada persona.
Desafortunadamente, con esta realidad, imaginar ser parte de los cambios necesarios suena como una labor compleja, pero actualmente existen iniciativas que están transformando esto y en las que podemos introducirnos junto con nuestras familias.
Existen alternativas: formemos parte
Un gran ejemplo de esto es la historia de Proyecto Cero Basura en México, cuya mayor exponente es la activista Gabriela Baeza, creadora de la iniciativa, quien al conocer a una amiga con un estilo de vida minimalista y que no compra cosas con empaquetado para evitar contaminar, la hizo reflexionar mucho sobre el tema de los desperdicios.
A partir de allí se dio cuenta de que quería llevar una vida más sustentable y que no dañara o pusiera en riesgo a los ecosistemas en que habitan especies en peligro, y por lo tanto a terceras personas.
La primera semana de su proyecto Cero Basura fue una de las más importantes, Gabriela “comenzó a comprar alimentos e ingredientes a granel y sin bolsa”. Ya que la clave para que esta iniciativa funcione, según la activista, es usar las 5 “R” que son:
Rechaza
Reduce
Reutiliza
Reincorpora
Recicla
“Cuando estos pasos se logran, la producción de basura de una familia de cuatro personas se aminora casi a 2.5 bolsas pequeñas de basura por mes, una vez que se juntan todos los desechos, pueden intercambiarse por alimentos o ingredientes en un Mercado de Trueque específico para este fin ecológico”, asegura la activista.
Cómo enseñar a los más pequeños a cuidar el Medioambiente
Es necesario que los niños adquieran hábitos positivos en lo que se refiere a la naturaleza, para esto primero debemos primero explicarles la importancia que tiene y su incalculable valor.
Existen múltiples materiales audiovisuales como por ejemplo, una de mis películas favoritas y que siempre me hace derramar más de una lágrima: “El Lorax: en busca de la Trúfula perdida”. Se trata de una película infantil animada que a mi parecer aborda muy bien el tema de la importancia de cuidar la ecología, no solo para el ser humano, sino también para los animales. Así también existen un sinfín de libros y materiales educativos de los que podemos hacer uso en esta tarea para lograr un cambio.
Consejos para la concientización infantil
Debemos enseñar a los niños a no dejar desechos en áreas inadecuadas, en especial zonas naturales al salir de paseo, ya que estos perduran y pueden ser ingeridos por los animales.
También es muy necesario enseñar a los niños a separar la basura en orgánica e inorgánica, y si es posible a separarla lo más posible para reciclarla.
Usar el agua con moderación es una excelente manera de cuidar el planeta, ya sea en la hora del baño, al momento de lavar las manos o cepillar los dientes, y cuidar que las llaves queden bien cerradas, así evitaremos el desperdicio, ya que el agua es un recurso natural no renovable y es limitada.
Plantar, sembrar, irrigar y cuidar de la tierra, es otra de las tareas a hacer con los hijos en casa. Es muy importante que siempre exista un adulto que ayude con estas actividades y explique cómo debe hacerse (un huerto casero es una idea excelente, para practicar el activismo cero basura y así consumir alimentos orgánicos).
Visitar bosques, granjas, jardines botánicos y museos también puede ser una gran iniciativa. Es imprescindible que los niños aprendan, de una forma natural y divertida el valor que tiene cada recurso natural de forma directa y siempre de forma supervisada.
No hacer daño a los árboles y plantas, ni a los animales, es una forma de enseñarles a preservar la naturaleza, así también evitaremos que se hagan daño a sí mismos o sean atacados.
Como padres, ejercemos un importante papel en este sentido de la responsabilidad ambiental y somos nosotros quienes debemos dar los mejores ejemplos. Nuestros pequeños nos imitan en lo bueno y en lo malo; si queremos un futuro sustentable y verde para ellos lo mejor es comenzar ahora.