La vida sin televisión
Nuestros hijos no tienen que pasar horas frente a la televisión, sino hacer varias actividades que los ayudan en su desarrollo y crea memorias que duran para toda la vida. Mira cómo es la vida sin televisión.
Denhi Chaney
Aceptemos que como madres TODAS necesitamos un descanso, o por lo menos cinco minutos para recobrar nuestra energía y la poca paciencia que nos queda, y encender la televisión es la manera más fácil de lograrlo. Basta poner una película o un programa y dispones de quince minutos en los que tus hijos ni te voltearán a ver, pues sus ojos van a estar fijos en la pantalla. Ahora, este artículo no te va a hacer sentir mal por recurrir a la televisión como una distracción; sin embargo, es importante que tengamos más actividades para limitar su uso a una hora o dos cuando mucho al día, ya que con esto les estaremos haciendo un gran favor a nuestros hijos y favoreceremos sin duda su desarrollo mental, físico y emocional.
El hacer estas actividades que en realidad son alternativas a la televisión requiere de nuestra energía y completa intención de hacerlo, de modo que te puedo decir que esto no será más fácil que el poner una película, pero creo que ese es precisamente el punto: aquello que requiere más de nosotras les proporciona mucho más a nuestros hijos y por ello vale la pena.
1. Desarrolla su lado artístico
Es increíble lo que se puede hacer con un poco de imaginación: papel, plumas, colores, crayones, pinturas, plastilina, incluso ingredientes para cocinar, pueden contribuir a llevar a cabo toda una sesión artística. Es importante que prepares un lugar especial para esta actividad, pues lo más probable es que el sitio acabe sucio y lo último en que quieres invertir energía es lavar un sillón o limpiar una mesa.
2. Crea un “gimnasio” en tu sala
Coloca varias cobijas y almohadas en tu sala de tal forma que los niños puedan correr e interactuar entre ellos sin lastimarse; también puedes hacer una fortaleza de cojines y pretender que habitan un castillo. La cuestión es ayudarlos a volcar esa energía que les es propia por su edad.
3. Hagan música en la cocina
No necesitas comprar instrumentos acústicos o percusiones para crear tales sonidos: ollas, sartenes y demás utensilios que utilizamos en la cocina pueden usarse para crear música y divertirse aprendiendo diferentes sonidos.
4. ” A mojarse se ha dicho”
Durante el verano pocas coas refrescan o divierten tanto como el agua; si no tienes una alberca no hay problema, toma la manguera y emprendan una guerra, mójense; puedes también llenar globos con agua y jugar con ellos, o simplemente llenar contenedores con agua y arrojar juguetes que floten en su interior.
Existen tantas alternativas a la televisión que es impresionante lo que se puede hacer con los materiales que ya tenemos en casa, hay además muchas más ideas en internet para recrear u obtener ideas y ¡crear las tuyas! Nuestros hijos puede que olviden el tiempo que pasaron frente a la televisión, pero nunca van a olvidar el sentimiento de amor que se siente y se refuerza al jugar con ellos.