La violencia intrafamiliar no tiene excusas, el poder está en tus manos

No seas victima inerte de tu maltratador, en tus manos está el poder de salir de esa situación. Tú eliges.

Erika Otero Romero

Hace poco me vi inmiscuida en un debate que surgió a raíz de un comentario que hice en una foto en una red social. Allí mostraban un collage de tres imágenes, dos de ellas alusivas al maltrato animal y una tercera hacía referencia a una mujer golpeada. Básicamente lo que expuse fue mi punto de vista y opinión como mujer que ha sido víctima de maltrato. Te pido, por favor, que antes de ponerte a la defensiva con lo que expondré, recibas con la mente abierta el consejo de una mujer que sabe por lo que estás pasando.

Lo que sostuve es que, si bien las tres imágenes eran fuertes, me amargaba mucho más ver a los dos animales en condición de maltrato ya que al ser animales estaban a expensas de lo que seres despiadados quisieran hacer con ellos. El caso de una mujer golpeada era diferente, ya que siempre tenía en sus manos el poder para huir de esa situación.

Por supuesto que las críticas de algunas mujeres que no compartían mi sentir no se hicieron esperar. El discurso de quienes no estaban de acuerdo, sostenía que la mujer sometida a años de maltrato de todo tipo, estaba tan reducida en su amor propio, que no podía defenderse y salir de esa situación. Lo siento, pero debo decirte que aunque lo sostenido tenga mucha verdad, en las manos de todo ser humano radica el poder para huir de la violencia. A razón de lo anterior, deseo enfatizar dos cosas:

1. No olvides que en tus manos está el poder de conferir a otro el poder para que te respete o te dañe.

2. El miedo es tu peor enemigo, es de ahí de donde el maltratador se “agarra” para hacer daño.

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Es mi deseo que no te sientas atacada, ya que mi propósito radica en que no te tengas lástima, que adquieras valor y sepas que ahora hay un mundo a tu disposición listo para abrazarte cuando decidas escapar de quien te hace daño. Para que esto ocurra, necesitas primero saber por qué eres víctima de maltrato; luego podrás acogerte a los consejos que expondré después. Por favor, hazlo antes que para ti y los tuyos sea tarde.

El maltrato surge de la impotencia del maltratador y su deseo de dominarte

Puede parecerte extraño, pero cuando una persona daña a otra lo hace porque la percibe como un peligro para su ego y predominio. Es decir, se siente inferior a ti y desea reducirte a su nivel. Cree que la manera de lograrlo es “asesinando” tu amor propio. Si logra hacerlo, hará que te sientas víctima y justifiques los insultos, golpes, chistes sexistas y demás acciones. Esto hará que sientas que es imposible salir de esa situación. Por favor, no permitas que llegue hasta ese punto.

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Recomendaciones para escapar de la violencia

1. Desde las primeras señales de violencia, puedes y debes poner un alto

Si no sabías que tu pareja podía llegar a ser violento, pero ahora ha mostrado que no logra controlarse, que desea dominio sobre tu persona, que cada vez es más altanero y no tolera bien que le lleves la contraria, eso ya debería ser una señal de alarma que te indique de manera interna que corres peligro a su lado. Ese es el momento justo para que hables con él y busquen ayuda terapéutica antes que la situación se complique y empieces a ser víctima de golpes.

2. No minimices las señales de violencia

Muchas veces he escuchado las siguientes frases en mujeres maltratadas: “¡Ah! Es que él no me golpea, solo me grita cuando no tengo su ropa lista y la comida caliente”, o “Nunca ha llegado a golpearme, pero me ha empujado y gritado; eso a mí no me parece que lo haga violento”. Repito: cualquier acción que te ofenda, lastime, hiera, te haga llorar y sufrir es sinónimo de violencia. Por tal razón, debes poner un alto, acudir a las entidades de apoyo y hacerle saber desde el mismo inicio que no le permitirás que te dañe.

3. No te victimices

Victimizarte es dar a tu atacante el poder de herirte de todas las formas posibles. Es acá donde te pido que no mires atrás, que reúnas fortaleza y valor necesario para escapar antes que sea muy tarde. Pueda que te haya golpeado una vez, no lo permitas dos veces o más, ya que entonces escapar se hará cada vez más complejo.

Por último, nadie te amará más de lo que puedes amarte y valorarte tú misma. Así que el poder de ser feliz y amada está en ti misma.

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Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.