La voluntad es un músculo. Si tú no la ejercitas, se atrofia

Todo el tiempo se habla de ejercitar y mantener el cuerpo saludable. Pero hay otras parte de tu ser que necesitan un ejercicio diario. Porque si Popeye vivía de las espinacas, tú vive de tu voluntad, ejercítala.

Laura Abbott

Vivimos en una sociedad en la que se valora en demasía el cuerpo físico, en la que mucho importa la estética y la imagen. Eso, en la mayoría de las veces, nos hace olvidar las cuestiones internas, que son mucho más importantes porque se vinculan con factores que benefician a todo nuestro ser y aportan a nuestra salud física, emocional y espiritual.

¿Alguna vez pensaste que hay partes de ti –no físicas– que también necesitan ejercitarse? Las hay, sin duda. Y es hora de que las ejercites, porque de no ocuparte de tu mundo emocional y espiritual, poco podrás hacer por el físico. Por ejemplo, si no ejercitas la voluntad, te resultará muy difícil ir al gimnasio, o salir a caminar o entrenar para mantener tu cuerpo sano.

De modo que la encomienda es ejercitar tu voluntad todos los días, y lo mejor es poner manos a la obra a partir de hoy:

Hazlo paso a paso

Como todo en la vida, si lo haces con constancia el beneficio será mayor. Empieza por trabajar tu voluntad fijando pequeñas metas por día. No seas cruel contigo si no logras lo que te propusiste, más bien sé flexible. Si, luego de varios intentos, no lo consigues, redobla esfuerzos. No te justifiques, ni te des por vencido. No hay nadie a quien rendirle cuentas, piensa que el mayor beneficio será para ti.

Piensa en su importancia

“Todo se puede lograr con voluntad”. Muy pocas cosas en la vida se hacen sin ella. Y en las más importantes la voluntad es un ingrediente principal. Con ella puedes lograr todo, hasta las más impensadas. No hay nada que no puedas lograr si te lo propones, solo hace falta que pongas tu energía en ello.

Piensa en ella como en un músculo

Puedes pensar que es débil y que no te llevará a nada, pero puedes trabajar para fortalecerla día tras día y en pequeños actos que, sumados, pueden llevarte a mucho. No esperes grandes logros, solo piensa que paso a paso se pueden construir mundos. Todo, absolutamente todo, empieza con un primer paso y aunque pequeño, es movido por tu voluntad. Así que empieza hoy y que no te importe cuándo podrás disfrutar de los resultados.

Direcciona tu voluntad

Es mejor si tus esfuerzos tienen un sentido. Si ya sabes cuál es tu objetivo, maravilloso; si todavía no sabes cuál es, no te desanimes, ejercita tu voluntad hasta que sepas en qué utilizarla. Nadie sabe lo importante que es tener sus músculos sanos hasta que tiene que usarlos en algún esfuerzo. Mientras esperas tener claridad en tus objetivos, aprovecha para ejercitar tu voluntad a bien de tenerla preparada para los tiempos que vendrán.

El día es hoy. Prepárate. No esperes a tener los desafíos enfrente. Ejercita tu voluntad porque ella te llevará a lugares que no imaginas. Se puede ser muy inteligente, capaz y astuto, pero si careces de voluntad todos tus logros se quedarán en la nada. Aprovecha y ejercítala, tal como ejercitas tu cuerpo. Seguro te llevará a lugares sorprendentes y estarás muy feliz de usarla, mucho más contento que por haber pasado toda una tarde en el gimnasio.

Laura Abbott

Laura Abbott tiene muchas pasiones:sus hijos, su esposo, escribir, la danza y el yoga, el contacto con la naturaleza, compartir con sus amistades, los libros, la música...Para contactar: lauabbott@hotmail.com