¡Levántate y anda!
Pretender que adherirnos a una silla califica siquiera como estilo de vida, tarde o temprano terminará por enfermar nuestro cuerpo y nuestra alma. Por ello te digo, ¡Levántate y anda!
Yordy Giraldo
Caminar, me comentaba una amiga, tiene que ver con nuestra evolución, nuestra independencia y hasta con nuestra dignidad. Y es que erguirnos y avanzar nos hace sentir seguros de nosotros mismos, pero ahora se sabe que además caminar también tiene que ver con nuestra salud.
Desde hace ya varios años los médicos recomiendan ejercitarnos no menos de 30 minutos al día. Sin embargo, la recomendación ha caído en oídos sordos. Nos hemos hecho dependientes de los trámites vía remota, de los autos, las escaleras eléctricas, elevadores, los servicios a domicilio, y al final movernos ha dejado de ser una actividad cotidiana.
Se dice que las generaciones anteriores caminaban alrededor de 12 kilómetros diarios en el caso de las mujeres y 15 o poco más para los hombres. En cambio, hoy día las cifras no alcanzan ni el kilómetro recorrido diariamente. Las grandes distancias, las prisas, el tráfico desbordado y el desarrollo son los grandes culpables y nuestra salud la gran víctima. Caminar, o no caminar, ¿es un dilema? Permíteme presentarte algunas ventajas de caminar cada día:
1. Caminar mantiene tu cerebro sano
El aumento del flujo de oxígeno al cerebro ayuda a que las células se mantengan saludables, gracias a que retarda el daño causado por las enfermedades y/o la edad. Un beneficio extra es que renueva la óptica desde la cual aprecias la vida, lo que te hace comportarte de manera más creativa.
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2. No caminar, ni realizar ningún otro tipo de actividad física
La falta de actividad física te expone a enfermedades letales. En números se dice que el 7% de la diabetes tipo 2, el 10 % del cáncer de mama y pulmón, y el 9 % de las muertes prematuras son atribuibles al sedentarismo.
3. Caminar te ayuda a bajar tus niveles de estrés
Entre otras cosas porque cambias de escenarios, te sales de la rutina, y todo ello te permite mantenerte motivado, así que sirve también como un excelente antidepresivo. Y es que sentirnos estancados es lo que hace que la depresión se haga presente en no pocos casos.
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4. No caminar provoca que tu metabolismo se haga lento
Por consiguiente tu peso se saldrá de control. Hoy día creemos que para bajar de peso es obligatorio estar en un gimnasio, la realidad es que si te mueves más, no importa dónde, verás los beneficios reflejados directamente en tu cuerpo.
5. Caminar te ayuda a tomar decisiones
Al sentirnos relajados los miedos, las dudas y las preocupaciones nos abandonan. En ese estado mental logramos ser más objetivos y enfocarnos en lo importante en vez de divagar sobre lo mismo sin ningún provecho, con ello la toma de decisiones se da de manera natural y voluntaria.
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Movernos es sinónimo de estar vivos. Donde hay energía, vitalidad, ganas; existe también la necesidad y el deseo de moverse, todo lo contrario a este impulso natural de cambiar, evolucionar y mejorar es contra natura. Pretender que adherirnos a una silla califica siquiera como estilo de vida tarde o temprano terminará por enfermar nuestro cuerpo y nuestra alma, por ello te digo, ¡Levántate y anda!
