Lograron ser padres después de 20 años de intentarlo; después de nacer su bebé el padre decide abandonarlas
Mujer de 60 años logra ser madre, sin embargo su esposo decide renunciar a su mayor anhelo.
Adriana Acosta Bujan
El gran deseo de muchas parejas es convertirse en padres, algunas veces las condiciones de salud, la edad y otros inconvenientes suelen ser un obstáculo para cumplir el sueño, sin embargo, nunca es tarde cuando existe esperanza y fe.
Una historia sorprendente fue compartida por Daily Mail y otros medios, donde una mujer a sus 60 años de edad, logró quedar embarazada, cumpliendo el más hermoso sueño y anhelo de ser madre. Sin embargo, su marido pocos días después decide abandonarlas.
Atifa Ljajic, de 60 años y su esposo Serif Nokic, de 68 años, viven en Novi Pazar, en Serbia occidental. Como cualquier matrimonio sólido, deseaban con gran ilusión ser padres, después de 20 años de intentarlo, se sometieron a un tratamiento de fertilización in vitro, donde Atifa recibió un esperma donante, para lograr quedar embarazada.
Un embarazo complicado
Son muchos los cambios físicos y emocionales que sufre el cuerpo de una mujer al quedar embarazada. Cuando una mujer a los 60 años decide tener un hijo por medio de un tratamiento de fertilidad, puede correr demasiados riesgos al grado de perder su vida y la del bebé.
Marisa López Teijóndirectora del Instituto Marqués de reproducción asistida, afirma que las mujeres a edades avanzadas, pueden sufrir trastornos como diabetes gestacional, preeclampsia, alteraciones renales, hemorragias, entre otros. Atifa Ljajic, conocía los riesgos, sin embargo, decidió quedar embarazada, a pesar de tener problemas de salud como presión arterial alta.
El embarazo de Atifa fue considerado de alto riesgo por lo que permaneció en el hospital 3 meses antes del parto. Por fin, el 20 de junio de este año, nació Alina en perfectas condiciones de salud.
Una vida nueva
Serik Nokic, el esposo y ahora padre de Alina, sufre de diabetes y tiene problemas del corazón. Al llegar a casa, la pequeña Alina lloró como cualquier bebé, ocasionando un gran espanto a su papá. Lo cual provocó que él, decidiera abandonarlas, por sentirse demasiado viejo para aguantar los llantos. Serik dijo a su esposa que era imposible dormir por las noches y que sería dañino para su salud.
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Una esperanza de vida
Atifa, está muy feliz al ser madre, a pesar de que ella trabaja en una fábrica textil y tiene un sueldo bajo, confía en que puede sacar a su hija delante, criarla y educarla. Ella dijo: “Pase lo que pase, si Serif se queda o se va, lucharé para criar a Alina de la mejor manera posible y para ponerla en el camino correcto. Viviré solo por ella”.
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Una motivación
Atifa, luchó por muchos años para hacer su sueño realidad, ahora es madre y su motivación es cuidar a su pequeña Alina. Sin duda, habrá personas que la ayudarán en su recorrido, ella es un ejemplo de fe, esperanza, voluntad y vida. “Nunca es demasiado tarde para conquistar los sueños”, con paciencia, persistencia, dedicación y esfuerzo, todo es posible. La bendición tocó a su puerta y estoy segura que no estará sola.
Adriana Acosta Bujan
Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.
