Maneras efectivas de ayudar a una persona que sufre ansiedad
Todas las personas en algún momento han experimentado ansiedad. Pero cuando esa sensación de expectativa es permanente y genera síntomas físicos, es difícil de soportar.
Erika Patricia Otero
Uno de los males que más aquejan a las personas hoy en día es la ansiedad. Cómo alguien que sufre este trastorno, puedo decirte que los días muchas veces se hacen insoportables. La realidad es que al ser un trastorno medianamente incapacitante, es prácticamente imposible ocultar.
Muchas personas que sufren ansiedad optan por tolerar los ataques a solas, y los entiendo. Muchas personas le restan importancia a este padecimiento e incluso pueden llegar a creer que exageramos o mentimos. Esto es lo que lleva a la persona ansiosa a aislarse.
Ahora bien, para los familiares de una persona con ansiedad, resulta angustiante ver a su ser querido pasar por una crisis. La realidad es que muchas veces no tienen idea de cómo ayudarle a lidiar con un episodio de ansiedad.
Es justo por esa razón que hoy compartiré contigo algunas herramientas que pueden ayudarte a ser un apoyo efectivo para tu familiar ansioso.
No te asustes y acércate con cuidado
Para este punto, ya sabes que esa persona sufre ansiedad. Ver a una persona querida pasar por una crisis de este tipo resulta agobiante, pero el miedo no ayuda.
Trata de calmarte y acércate con calma para evitar que se sobresalte. Recuerda el tipo de relación que tienes con esa persona. Esto evitará que la persona tome una actitud defensiva y rechace tu ayuda.
Permítele el tiempo suficiente para que se recupere
Las crisis de ansiedad tienen tiempos irregulares de duración. Hay personas a las que una crisis puede durarle media hora y otras que pueden estar todo el día lidiando con la ansiedad.
Muchas veces necesitamos espacio y tiempo para hacer algunas maniobras que disminuyan la crisis. Con un poco de paciencia y calma se logra tener cierto estado de normalidad.
Pregunta con cautela
El primer paso es preguntarle acerca de cómo se siente. Por lo regular, lo que respondemos con tal de no incomodar a nadie es “estamos bien”.
Tú sabes que esto no es cierto, así que sé precavido con la siguiente pregunta exploratoria que será “¿Estás seguro? Porque la verdad es que noto que estás agitado”.
Si notas que la persona tiene deseos de responder francamente, entonces el siguiente paso es apertura.
Ábrete a escuchar
La apertura te permite tener la disposición adecuada para establecer un intercambio sano de información necesaria para -de esa manera- poder ayudar adecuadamente.
Muchas veces lo único que nosotros necesitamos es una persona que nos escuche sin interrumpir o dar opiniones. Si deseas ser de ayuda para una persona ansiosa solo escucha y cuida de tener tus brazos y tu postura en una posición relajada y tranquila; eso hará que la persona se sienta cómoda y se relaje.
Ponte en su lugar
Todas las personas en algún momento han experimentado ansiedad. La diferencia es que esa sensación de expectativa es permanente y genera síntomas físicos que son difíciles de soportar.
Puedes decirle que lo que siente es normal, que tú lo has experimentado y que sabes lo difícil que es. Validar los sentimientos es importante porque le hace sentir que puedes ponerte en su lugar.
Sugiere algunos recursos
Si notas que la persona es receptiva a recibir recomendaciones; entonces disponte a ofrecerle una gama variada de opciones que le puedan ayudar a lidiar de alguna manera con su padecimiento.
Procura estar atento
Si te acercaste a ofrecer ayuda (en caso de que la persona no sea un familiar), entonces es porque se preocupa por el bienestar de ella.
Busca la manera de acercarte y establecer algún tipo de contacto, ya sea charlando ocasionalmente. Pregúntale sobre su salud y las medidas que ha tomado para aliviar la ansiedad. Esto le demostrará al afectado que tú en realidad te preocupas por ella.
Solo queda decir que la ansiedad es un trastorno que se puede tratar de maneras naturales o médicas. Si quieres ayudar a alguien, sigue estos pasos y no juzgues las razones por las cuales no ha buscado ayuda terapéutica y psiquiátrica.
Solo sé amable y solidario en todos los casos.
Erika Patricia Otero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
