Mujer, de 23 años, pasó 16 años luchando contra el dolor paralizante y la pérdida de memoria; NUNCA imaginaron que una garrapata era la culpable
Pasó 16 años buscando un diagnóstico y los médicos no fueron capaces de dar respuesta a su solicitud, hasta que fue muy tarde. Los síntomas para que NO te suceda.
Camila Ignacia Gómez González
Comenzar a asistir a la universidad puede ser uno de los retos más importantes que se enfrentan a lo largo de la vida. Los nervios del primer día de clases, la expectativa y el entusiasmo por convertirse en un profesional, pueden terminar en un gran cuadro agudo de estrés. Al menos eso pensó Rhiannon Collins, una mujer de 23 años de edad que jamás imaginó que el inicio de su vida adulta sería sinónimo de dolor, testamento y un sinfín de síntomas que ningún médico era capaz de asociar a alguna enfermedad.
Y es que el inicio de esta historia se remonta a cuando Rhiannon tenía 4 años y visitó un parque de ciervos en Londres. En esa ocasión fue mordida por una garrapata, pero en ese momento nadie imaginó que aquel episodio marcaría tan tajantemente su destino.
Luego de aquel episodio comenzaron a aparecer algunas complicaciones de salud que ningún médico era capaz de diagnosticar, de hecho tuvieron que pasar largos 16 años para que por fin se le indicara que todos sus problemas sí tenían un nombre: Síndrome de Lyme.
Y es que fue esta condición la que según sus propias palabras le quitó hasta la dignidad, pues aunque suene increíble afectó de tal manera su vida que fue incapaz de recordar los nombres de los integrantes de su familia por varios años. Pero eso no fue todo, poco a poco comenzó a afectar su independencia, hasta el punto de dejarla postrada en una cama, sin ser capaz siquiera de poder lavarse los dientes o ir al baño sola, todo esto a raíz de los fuertes dolores que sufría a diario.
Y es por este motivo que ella ha decidido comenzar a utilizar sus redes sociales para dar testimonio de lo grave que puede ser la enfermedad que no le fue diagnosticada a tiempo y que asegura que si hubiese recibido atención de manera oportuna, hoy su vida sería diferente, según el Daily Mail.
Pero ¿de qué se trata esta enfermedad? ¿Cómo se transmite? ¿Todas las garrapatas son capaces de contagiar a los seres humanos? Son preguntas que seguramente estás pensando y que podrás encontrar respuesta a continuación:
La enfermedad la contagian las garrapatas de patas negras, es producida por una bacteria llamada Borrelia burgdorferi (B burgdorferi)Las garrapatas inmaduras se denominan ninfas y tienen aproximadamente el tamaño de una cabeza de alfiler. Las ninfas adquieren las bacterias cuando se alimentan de pequeños roedores, como los ratones, que están infectados con B burgdorferi. Por tanto la enfermedad se contrae en caso de ser mordido por una garrapata infectada. Aclara la página web de Medlineplus.gov
Pero eso no es todo, también se debe tener en cuenta que la enfermedad cuenta con 3 etapas:
La primera, llamada enfermedad temprana y localizada. Que quiere decir que la bacteria aún no ha sido capaz de propagarse por todo el cuerpo.
La segunda, de diseminación temprana, que comienza cuando la bacteria realiza su primera propagación por el organismo.
Y la tercera y más grave, denominada diseminación tardía. Que como en el caso de R. Collins, la bacteria se ha propagado por todo el cuerpo.
Entre los factores de riesgo que se deben tener en cuenta encontramos los siguientes:
Actividades físicas al aire libre
Estas incrementan la exposición a las garrapatas, pues aunque no lo podamos creer ellas son capaces de esconderse incluso en el cemento para poder crecer “seguras”.
Convivir con mascotas
Por una razón lógica, ellas pueden llevar de manera constante garrapatas al hogar.
Por este motivo resulta vital que si se van a realizar actividades al aire libre se procure que sea un área segura para su desarrollo y además que si se tienen mascotas la casa sea fumigada de manera constante y los animales sean sometidos.
Camila Ignacia Gómez González
Camila, es Relacionadora Pública, con orientación en Marketing, actualmente reside en Villa Alemana, Chile. Es esposa y madre, y ama escribir para ayudar a fortalecer los lazos familiares.
