Niño de 5 años ve a su madre ir al baño haciendo algo que sólo las mujeres hacemos; la dibuja y las redes arden en críticas hacia ella
¿Está bien dejar que tus hijos miren cuando haces esto? Los expertos nos dicen qué es lo mejor para cada edad.
Viviana Domínguez
Una verdadera pesadilla
Recientemente un artículo publicado por Up Socl relata la historia de una madre que publicó el dibujo de su hijo mostrando a su amdre en su período menstrual.
Claro, esto pasó después de que la propia mujer se cambiara la toalla higiénica frente al niño de 5 años.
Penny Rohelder consideró apropiado contar su experiencia y subir el dibujo a su muro en facebook, creando así una polémica en línea, llena de opiniones encontradas. Incluyendo opiniones a si estaba bien que un niño tan pequeño sepa acerca del periodo menstrual de la mujer, o tenga una experiencia visual de la situación.
La madre de alguna manera justifica lo ocurrido explicando que recientemente sufrió de una Embolia Pulmonar, por lo que consume anticoagulantes periódicamente, provocando periodos menstruales más fuertes, obligándola a cambiarse con más frecuencia y apremio, llevando a la madre a explicar a sus hijos lo que le pasa.
Por ende, un día como todos, mientras ella se estaba cambiando de toallita, su hijo se hizo presente y observó.
Ella decidió no darle mucha importancia, hasta que encontró el dibujo en cuestión, en el que se encontraba la familia completa, pero en una de las personas del dibujo y en el lugar correcto había una mancha roja. Al preguntarle sobre el detalle, el hijo respondió “es tu periodo”.
A qué edad es adecuado hablar del tema con nuestros hijos
Si bien durante mi niñez fui muy ingenua, y aprendí en forma gradual y sistemática la información sobre mi desarrollo como mujer, no fue así con el tema de la menstruación.
Como tenía una personalidad muy determinada, cuando observaba sabía que alguna cosa se estaba cocinando a fuego lento y hasta que no lo supiera no dejaba de insistir. Cuando mi hermana mayor iba a cumplir 12 años, mi madre encomendó a mi otra hermana que ya había ingresado a la Universidad que le explique el tema, como hicieron lo imposible para dejarme fuera de la situación, luché hasta el final para que se me informe que estaba pasando, en conclusión, decidieron explicarnos juntas e invitaron a mi hermano para que escuche la disertación, y así a mis 9 años me enteré del ciclo menstrual de la mujer.
De más está comentar que quedé sumamente decepcionada de lo que se trataba todo, pero me ayudó en toda mi vida.
Entonces, ¿cuál es la edad adecuada?, primero debemos diferenciar dos cosas, antes de hacernos esta pregunta, necesitamos determinar qué tipo de información vamos a compartir y la madurez intelectual y/o emocional en que se encuentra el niño, de ahí obtendremos la edad adecuada.
Hablemos de la información y madurez
Recuerda, el desarrollo de crecimiento físico siempre está acompañado de uno intelectual y emocional, por lo que la información debe estar a nivel de madurez de la persona, por ejemplo es obvio que a un niño de 5 años no podemos explicarle todo el proceso de ovulación con su ciclo menstrual, pues aún no ha creado las estructuras de pensamiento previas para comprender dicho proceso.
Pero volviendo al ejemplo de la madre en la nota, y más allá que el niño fue testigo del hecho, que es muy diferente a brindar información, obviamente él quedó satisfecho con la información de que tan sólo era el “período” de la mamá.
Sabemos que el desarrollo intelectual y emocional del niño es gradual, y la inteligencia se va construyendo en base a conocimientos anteriores, esto quiere decir, que el niño requiere siempre de nueva información o aprendizajes.
Lo correcto entre los 3 y 5 años
Los niños de entre 3-5 años requieren y esperan respuestas simples y verdaderas sobre el tema, y no sólo se aplica a el tema específico de la menstruación sino que se adapta a todos los temas tabúes como los genitales, embarazo, concepción, etc.
¿Qué padre no ha pasado por la embarazosa experiencia en la que su hijo pregunta por dónde salen los bebés? y otras más complicadas.
La respuesta siempre debe ser sencilla y directa, sin agregar más explicación ni detalles.
Sin inventar palabras, sinónimos o palabras en diminutivo, y si te animas a nombrar las cosas por su nombre, como ejemplo, las partes íntimas de la mujer y del hombre, vagina y pene.
Recuerda que a esta edad ya reconocen las partes propias del cuerpo en sí mismos, por lo que simplemente estará integrando nuevos conocimientos a lo ya conocido, pues este es su nivel de conocimiento intelectual y emocional.
Qué sucede entre los 6 y 7 años
Entre los 6-7 años, los niños no preguntan mucho sobre estos temas, porque pasan por una etapa de adormecimiento de interés. Por lo que los niños nos dan un respiro después de la etapa anterior, pero nos preparan para lo que vendrá.
Lo correcto a los 8 años
A partir de los 8 años, el nivel de pensamiento permite integrar todo lo que en forma concreta se muestra, y se puede comprobar, por lo que todo lo que él aprenda a través de la lectura o programas educativos, serán de mucha ayuda.
Se puede hablar en forma científica sobre estos temas pero, desde lo anatómico, o funcional. Aquí es bueno utilizar libros educativos con ilustraciones, si el niño está interesado en conocer más.
Entre los 9 y los 12
Entre los 9-12 años llega la hora de la verdad.
Antes se consideraba la etapa entre los 9-10 de pre-pubertad, pero actualmente con el desarrollo tecnológico y acceso a internet, más el sistema de alimentación, las etapas de pre y pubertad se han acercado tanto que se pueden considerar una sola.
Y es este tiempo donde se debe presentar toda la información necesaria en forma clara, y apropiada, y en el hogar, si no puedes hacerlo, pide ayuda, pero permite que tu hijo reciba este conocimiento desde tu casa, y que no averigue por afuera, o por alguien cuáles principios morales son diferentes a los que vives en tu hogar.
Información visual – lo que NO están preparados para ver
Entender que los niños, no están preparados para VER algunas cosas a temprana edad es muy importante, porque eso es más complicado de explicar.
Es algo así como si saltaras tres escalones más en la escuela y no entiendes cómo empezar.
Sabemos que la convivencia en el hogar nos lleva a tener “accidentes”, como en el caso de la madre de esta nota en la que el niño observó el acto. Pero no es lo más favorable para los pequeños porque la información es demasiada para un sólo instante, creando a veces en el niño, confusión, ansiedad y poca libertad de preguntar honestamente, ya que por ser inmaduro emocionalmente percibe lo que no es correcto.