¡No más berrinches! Trucos sencillos para que tu hijo controle sus emociones
Aplica estos consejos fáciles y sencillos para ayudar a tus hijos a desarrollar su inteligencia emocional.
Adriana Acosta Bujan
Cuando somos padres sabemos de la necesidad de establecer límites y reglas a los hijos para que ellos aprendan lo que es correcto y no. Pero algunas veces es muy complicado, ya que ellos suelen hacer berrinches cuando algo no les parece, o están en desacuerdo.
En más de una ocasión recuerdo que mi hijo hacía unos espectáculos enormemente vergonzosos cuando se enojaba, solía tirar patadas al aire, golpeaba la pared con sus puños, gritaba, lloraba, se tiraba al piso y por supuesto me decía que me odiaba.
Claro, cada vez que lo hacía se me estremecía el corazón al instante, y ponía en duda la aplicación de mis reglas, haciéndome creer que era muy estricta y autoritaria.
Comencé a observar que sus comportamientos no eran adecuados, ya que explotaba sus emociones con mucha facilidad y frecuencia. Por un tiempo, dejé de establecer límites y dejaba que él hiciera lo que quisiera, para poder controlar la situación momentáneamente. Sin embargo, me percaté que no era lo más adecuado y que tenía que trabajar para enseñarle a controlar sus emociones y erradicar el problema de raíz.
¿Cómo empezar?
Los especialistas lo llaman inteligencia emocional. Se trata de la comprensión y el conocimiento de las emociones. Cuando no sabemos controlarlas, por lógica somos excluidos socialmente, convirtiéndonos en personas inadaptadas, frustradas e infelices.
Por tal razón, es importante enseñar a nuestros hijos desde muy pequeños a controlar sus emociones, así como aceptar y obedecer las reglas y límites que imponemos; todo ello, pensando en su bienestar y felicidad en su vida adulta.
Detecta el foco rojo
Cuando los niños desean llamar la atención de los padres y se sienten frustrados por tener que cumplir esas reglas establecidas, que no están de acuerdo, suelen irritarse fácilmente volviéndose berrinchudos e irascibles por el simple hecho de no saber controlarse.
Puedes detectar un comportamiento agresivo en la vida cotidiana de tu hijo, como por ejemplo: cuando existe rivalidad entre hermanos, conflictos con los amigos, situaciones escolares, presión ejercida por lo compañeros y vida familiar.
Aplica la inteligencia emocional en tus hijos
Maurice J. Elias autor de “Educar con inteligencia emocional”, propone una manera fácil y sencilla para cambiar el comportamiento de los niños, enfocándose en la comunicación profunda y gratificante, así como con la idea de enseñarles de manera positiva.
Te comparto algunas ideas:
1 Reconocer las emociones
Existe una cantidad inmensa de emociones como la alegría, la felicidad, el enojo, la frustración, por mencionar algunas. Muchas de ellas son similares unas a las otras. Sin embargo, enseñar el significado de cada una de ellas, así como la diferencia entre los sentimientos que se van experimentando en diversas situaciones, ayudará a comprender mejor las emociones.
Ponerlo en práctica
Realiza con tus hijos una representación de los sentimientos y emociones ante diferentes contextos y problemáticas cotidianas. Por ejemplo: el miedo y la angustia ¿son lo mismo? Utiliza herramientas como cuentos, dibujos o historias donde los protagonistas pasen por situaciones alegres o tristes, y así podrás explicar cada emoción con mayor facilidad.
2 Error no es igual a frustración
Todos solemos frustrarnos cuando cometemos errores, y por ello actuamos a la defensiva. Para reforzar la inteligencia emocional se debe explicar que los errores son aprendizajes. Al hacerlo, los hijos serán más tolerantes con los problemas.
Ponerlo en práctica
Usa frases positivas para fortalecer la autoestima, seguridad y confianza de tu hijo como por ejemplo: “eres muy inteligente y estoy segura que encontrarás una solución”. Incluso utiliza juegos donde tus hijos tengan que enfrentar desafíos o retos como los rompecabezas, los crucigramas, y la sopa de letras.
3 Descubrir las causas
Es importante enseñar a canalizar las emociones descubriendo el origen, ¿Cuál fue la causa de tal emoción? ¿Por qué te sientes enojado o con miedo? Por lo general, cuando nos sentimos en peligro o no alcanzamos las metas deseadas, explotan las emociones negativas.
Enseña a tus hijos a descubrir el origen de sus sentimientos contando tus propias experiencias de cómo te sentías en momentos felices o tristes; de esa manera abrirás la puerta a la comunicación.
Ponerlo en práctica
Enfrenta a tu hijo a distintas situaciones para descubrir el origen. Por ejemplo: asígnale una tarea complicada para su edad y observa cómo enfrenta los retos; llévalo a lugares donde pueda jugar con distintos niños de diferentes edades para percatarse cómo se relaciona, entre otras cosas.
4 Ser empáticos
Enseñar a los hijos a comprender lo que sienten los demás, es una forma de ser empáticos y con ello lograrás que se sientan aceptados, y al mismo tiempo fortalecerán sus valores. Enfócate en enseñar la sensibilidad y el dolor ajeno y la manera en cómo poder ayudar.
Ponerlo en práctica
Se recomienda hacer acciones humanitarias, como adoptar animales de la calle, ayudar a personas necesitadas, visitar alguna institución donde se requieren voluntarios. Incluso, ayudar a los abuelos en las labores del hogar.
5 Con el ejemplo
¿Sabes controlar tus emociones?, ¿Tu hijo ve cómo actúas cuando te sientes frustrada? La manera más sencilla de ayudar a los hijos a controlar sus emociones, es desarrollando el autocontrol en nosotros mismos.
Recuerda que los niños aprenden imitando las acciones de los padres; por tal razón, es fundamental que aprendas a controlarte y así enseñar con el ejemplo.
Ponerlo en práctica
En este caso debes explicar que cada acción tiene consecuencias. Por ejemplo: si tu hijo está enojado porque alguien lo trató mal, ayúdalo a razonar acerca de lo negativo de vengarse. Junto con tu hijo reflexionen y encuentren distintas alternativas para solucionar los conflictos, como la comunicación, tranquilizarse, respirar contando hasta diez y sobretodo el valor del perdón.
La importancia de la inteligencia emocional, va más allá de tener un buen comportamiento, se trata de enfrentar problemas, de tener empatía con los demás, de motivarnos, de controlar los impulsos, regular los estados de ánimo. Incluso nos sirve para tomar decisiones.
Enseña a tus hijos a controlar sus emociones, ya que ello te dará tranquilidad, al saber que serán capaces de enfrentarse por ellos mismos a los obstáculos y problemas de la vida.