¿No puedes quitar a tu hijo de la pantalla? Puede estar volviéndose una adicción
Hay ciertas señales que te indican que tu hijo se está volviendo adicto a la tecnología. No dejes que eso suceda.
Fernanda Gonzalez Casafús
El uso diario de los teléfonos móviles y tablets por parte de los niños es algo que a muchos padres nos preocupa. Podemos decir que la tecnología es la nueva niñera de este siglo. Hay ciertas señales que te indican que tu hijo se está volviendo adicto a la tecnología.
En las redes sociales circula un video que muestra cómo un bebé de pocos meses patalea y llora cuando le quitan el celular de las manos. Alguien entonces decide dárselo nuevamente, y el niño se calma al ver las luces del aparato. A modo experimental, vuelven a quitárselo y el niño se tira al piso y comienza a llorar insistentemente. La escena se repite una y otra vez.
El hecho de que a muchos les cause gracia el video deja a las claras cómo la sociedad concibe el uso de la tecnología y cuánto nos cuesta reconocer el daño que les hace a los más pequeños al darle de forma indiscriminada un dispositivo móvil.
A todos los niños les gusta mirar videos
Mis hijos de 4 y 6 años adoran mirar videitos de dibujos. No se los prohíbo, y de hecho, reviso cada cosa que ven. Si los dejo, pueden estar horas. Y debo decir que chillan cuando se los quito, pero intento siempre sustituirlo por alguna actividad que les interese.
Pero seamos sinceros. ¿Cómo no nos va a costar quitarle el móvil de la mano a nuestros hijos si ni nosotros mismos podemos hacerlo? Primero, debemos enseñar con el ejemplo para poder esperar algo de ellos.
¿Deberían tener su propio celular?
El uso de los dispositivos electrónicos en la población infantil a nivel mundial, tiene cifras alarmantes. Hasta el año 2015, de acuerdo a un estudio, alrededor del 46% de los niños de 9 a 16 años tenían un teléfono inteligente. Imagino que esas cifras han ido subiendo.
De acuerdo a otra investigación, los padres encuestados opinaron acerca del momento óptimo para comprar un teléfono móvil para sus hijos: 19.5% de los padres respondieron entre los 6 y los 11 años; y el 59.8% pensaron que era aceptable entre los 12 y los 17 años.
Existe una disparidad de opiniones a nivel mundial respecto de cuándo es el momento adecuado para que los niños tengan su celular. Sin embargo, hay consenso acerca de que muchos niños tienen acceso a los dispositivos electrónicos de entretenimiento desde muy temprana edad, aún a sabiendas de que los expertos no recomiendan la exposición a las pantallas antes de los 2 años de edad.
Cuando se convierte en adicción
El acceso de los niños a las pantallas es un hecho cotidiano y adyacente a la sociedad ajetreada en la que vivimos. La tecnología llegó para quedarse y a nosotros mismos como adultos se nos hace imposible sucumbir a sus encantos.
Muchos padres se quejan de que sus hijos juegan todo el día en su consola o mirando videos. Cabe preguntarnos qué hacemos nosotros como padres para que esta situación no se nos vaya de las manos y poder lograr que los niños y jóvenes puedan crecer alejados del daño que produce estar permanentemente conectados a las pantallas.
Señales de que tu hijo podría estar volviéndose adicto al móvil o tablet
- Apenas se despierta lo primero que busca es el celular
- Pasa demasiadas horas frente a la pantalla
- No le interesa ver a sus amigos, sólo quiere jugar o estar en su móvil
- Se lleva el móvil o tablet a todos lados (aún al baño)
- Pospone sus actividades cotidianas
- Su ritmo de sueño se altera
- Su mal humor se calma cuando tiene su dispositivo en las manos
- Sufre de ansiedad y ataques de ira si no puede utilizar el dispositivo o consola
- Siente frustración constante ante cosas que no puede resolver de inmediato
Involúcrate
Puede ser cómodo darle el celular a tus hijos para que puedas trabajar o hacer los quehaceres, y de hecho todos los padres lo hacemos alguna vez. Pero el punto de inflexión viene dado por la cantidad de tiempo al que sometemos nuestros hijos frente a la pantalla, ya que de esto depende mayormente que su uso se vuelva una adicción.
Sé firme en tus convicciones
No eres mala madre por poner horarios para el uso del celular, o por prohibirlo durante la cena, o incluso por cambiar la contraseña del wi fi. Controla el tiempo con reloj si es necesario, y no permitas tampoco que el niño vaya a la cama con el móvil. A veces pienso que es más fácil que miren un video antes de dormir, pero mi misión como padres no es entretenerlos sino educarlos. Y entonces voy por el libro de cuentos.
Puedes pactar además ciertas reglas como la restricción de uso durante una reunión familiar, o apagar y silenciar el móvil en la cena o en una conversación importante. Tú tienes las herramientas necesarias para que el uso de la tecnología no pase el límite.
Busca ayuda si es necesario
Pero sobre todo, dedica tiempo a tus hijos. Vayan a recoger hojas en otoño, cocinen juntos un pastel, refresquen sus pies en el arroyo. El tiempo junto a nuestros hijos es demasiado precioso para que se lo lleve una pantalla. Tienes la oportunidad de aprovecharlo ¡Hazlo ahora! Tus hijos te lo agradecerán en un futuro.