No temas complicar la vida de tu hijo al enseñarlo a ser emprendedor

Inyectar el espíritu emprendedor en nuestros hijos es hoy uno de los grandes desafíos a los que un padre se enfrenta. Como mujer emprendedora con dos niñas en casa, te propongo algunas ideas que pueden serte útiles.

Arelly Vela Catzín

Inyectar el espíritu emprendedor en niños y adolescentes es hoy uno de los grandes desafíos a los que un padre se enfrenta. Como mujer emprendedora con dos niñas en casa me propuse investigar acerca de cómo desarrollar en los niños y jóvenes una mentalidad emprendedora, y hacer que se transforme en una filosofía de vida. Durante casi cinco años mi esposo y yo nos hemos dado a la tarea de emprender diferentes negocios, algunos aún continúan y otros no dieron buenos resultados y se han quedado atrás. Mis hijas han crecido con ambos padres con mentalidad emprendedora. Así que desde hace un año he estado fomentándoles este espíritu de emprendimiento.

He notado que los niños en general no están interesados o no quieren montar una empresa, asumir riesgos, responsabilidades; en fin, complicarse la vida. Es más, la mayoría de ellos ni siquiera lo ha imaginado. Pero para mis hijas no es así. Ellas ya están pensando en hacer negocios, viven en nuestro mundo emprendedor y lo disfrutan. Se emocionan planeando qué pueden hacer para generar recursos, sueñan y preguntan, y preguntan mucho diría yo.

La mayoría de los niños y adolescentes tal vez tienen la idea de que asumir un emprendimiento personal implica alejarse de lo único que les importa: sus compañeros de estudio, salir de paseo, tener novia, estudiar de vez en cuando y pasarla bien. Se enfocan en estudiar una carrera y que al graduarse saldrán a repartir solicitudes de trabajo para conseguir empleo en una buena empresa, que les brinde estabilidad económica, pedir un crédito (o varios) y darse algunos gustos con lo que soñaron desde niños.

¿Cómo cambiar esta realidad?

He leído al respecto, he asistido a algunos seminarios y analizado diversos documentos con la intención de interiorizar los conceptos fundamentales para enfocar mis esfuerzos en la formación de emprendedores. Lo primero que comprendí es que nuestro sistema educativo no está preparado ni dotado para formar niños con mentalidad emprendedora y, menos aún, padres de familia. Expertos en el tema afirman que si una persona del pasado viajara en el tiempo y viniera al siglo XXI, se perdería en todos lados menos en una escuela, ya que todo sigue igual. Por lo tanto, aquí te comparto mi experiencia y un poco del conocimiento que he adquirido desde hace ya algunos años; me enfoco en cuatro áreas fundamentales que, desde mi punto de vista, influyen en la formación de emprendedores en edades tempranas, y te doy algunas recomendaciones generales para que fomentes el espíritu emprendedor en tus hijos:

Competencias y habilidades

Antes de desarrollar competencias técnicas, como las administrativas o gerenciales, enfócate en el desarrollo de las competencias y habilidades que están ligadas al espíritu emprendedor de tus hijos, las cuales se centran en desplegar el ser de excelencia. El estudio “Escalando el emprendimiento”, realizado en Colombia, concluyó que muchos de los emprendedores que habían creado empresas de alto impacto durante los últimos diez años no sabían elaborar planes de negocios, pero para ello contaban con asesores. Es decir, antes de involucrar a tus hijos en asuntos “aburridos” de papeleos, primero desarrolla en ellos el hacer buenas relaciones con personas de buena influencia que los auxilien. Conquístalos. Haz que vean el emprendimiento como una opción de vida. Guíalos a descubrir la verdadera pasión en sus vidas. La mayoría de las personas nunca logran encontrar qué es lo que en realidad los apasiona, y esto es algo importante para impulsar el emprendimiento.

Finanzas

Involucra a tus hijos en el mundo de las finanzas personales, enséñales a manejar el dinero; hay muchas maneras de hacerlo: busca páginas expertas en este tema en internet y luego, el tiempo que inviertas aprendiendo e instruyendo a tus hijos en esta área será fundamental para que desarrollen habilidades que les servirán para toda la vida; diseñen métodos y herramientas que sean divertidas, pero altamente efectivas. Recordemos que el juego, con un propósito claro y bien definido, es el mejor aliado para el aprendizaje. Ahorrar e invertir es fundamental en la formación integral de emprendedores.

Entorno

La variable más influyente pero menos manejable en la formación de pequeños emprendedores es su entorno familiar, escolar y social. Pero haz tu parte motivándolos de forma constante. Hazles sentir que ellos tienen todo para lograr lo que quieran sin importar lo que sea. Crea o llévalos a entornos temáticos e inspiradores.

Creatividad

Este es el motor esencial en todo el proceso de formación. Enséñales a aprender haciendo. No basta con hablarles, ponlos a hacer. Es decir, aplica un entrenamiento vivencial, con fundamentos en la construcción de la sabiduría humana para el SER, el HACER y el SABER, desde la excelencia y con un enfoque humanístico. Aliéntalos a pensar y a vivir diferente; a encontrar su propia forma de hacer las cosas y a llevar adelante su vida.

Ser emprendedor o formar emprendedores es algo fascinante. Deja a un lado los prejuicios o el temor y comienza ya, te aseguro que vas a cosechar muy buenos frutos.