Nuevo estudio revela la VERDAD de la relación entre la anestesia epidural y la prolongación del parto
Conoce qué le estás haciendo a tu bebé cuando usas esta anestesia.
Viviana Domínguez
Anestesia epidural
Durante mi último parto en el que ya estaba fuera de los límites de la edad esperada, por lo que se consideraba un parto de alto riesgo, el doctor y yo planeamos y conversamos muy bien con anticipación todas las opciones, menos una, la posibilidad de una cesárea.
Lo que llevó a que ese parto fuera todo un PARTO, ya que estuve casi 12 horas pujando, y cuando solicité otra opción para dar a luz, se me negó por no haberlo “planeado antes”. Pero sí se me ofreció la anestesia epidural, la cual recibí como un oasis para mí en esos momentos, sobre todo que yo tenía el poder de apretar el botón y enviar más anestesia.
Finalmente mi último hijo nació, con la cabeza alargada como un cohete y yo sin sentir nada.
Pero, ¿qué hace la epidural?
La anestesia epidural brinda alivio constante durante el parto porque adormece la parte inferior del cuerpo de la mujer pero a la vez la mantiene completamente consciente.
Se aplica a través de un catéter delgado y blando en el área epidural, un espacio que está por afuera de la membrana que rodea la espina dorsal y el fluido espinal.
El estudio, epidural o solución salina
De acuerdo a un artículo publicado por Vix, la Universidad de Boston decidió realizar un estudio para comprobar si el uso de la epidural afectaba directamente el tiempo de un parto alargándolo.
Para esto buscó al azar a 400 mujeres embarazadas. Parte de este grupo recibió anestesia epidural, mientras que el resto recibió solución salina durante la segunda parte del parto, etapa durante la cual el cuello de la matriz está completamente dilatado.
Los resultados fueron asombrosos, ya que la diferencia de tiempo entre un parto y el otro fue mínimo, según el informe publicado en la revista Obstetric and Gynecology, las mujeres que recibieron la epidural en esta segunda parte del parto tardaron 52 minutos, mientras las que recibieron solución salina 51 minutos en dar a luz.
La epidural NO prolonga el parto
Los investigadores observaron que la diferencia era mínima por lo que no se consideró hacer una distinción estadística, además no encontraron diferencias en el peso o niveles de oxígeno de los bebés en cuestión.
La única diferencia clara fue respecto al dolor, las mujeres que recibieron la anestesia epidural no sufrieron de dolor alguno en comparación con las se les administró solución salina. Por lo que los investigadores pueden afirmar que no hay ningún indicio directo que relacione a la epidural con la prolongación del parto.
Cómo actúa la epidural en tu cuerpo
Una vez introducido el catéter en la parte baja de la espalda de la madre, se introduce a través del mismo la medicina, que por lo general es una combinación de anestesia local y narcótico, por lo que la anestesia bloquea la sensacion de dolor, movimiento y tacto, mientras que el narcótico calma el dolor pero no afecta la capacidad de movimiento. Juntos, evitan el dolor pero aun permite algo de movimiento.
Los efectos de esta forma de anestesia, aparecen 10 -20 minutos después de haber sido inyectada, y el paciente puede regular la cantidad que desee agregar durante el procedimiento. Los doctores recomiendan aplicar este método cuando la madre está en tiempo de parto activo, y no antes, para así asegurarse que las contracciones no disminuyan.
Ventajas y desventajas de la epidural
Las ventajas están a la vista, pues evita el dolor, mantiene consciente a la persona y puede realizar movimientos, además la medicina no llega al bebé o si lo hace es una pequeña cantidad.
A diferencia, las desventajas, llenan una lista:
- Posición incómoda para la administración de la inyección, aunque el beneficio es prometedor.
- Puede afectar el movimiento de las piernas, imposibilitando que estés de pie.
- Por ser una inyección intravenosa, requiere de un constante monitoreo de la presión arterial de la madre y del bebé.
- El adormecimiento de tu parte baja del cuerpo, a veces, disminuye la fuerza del pujado, ya que la madre pierde por completo la sensación.
- La falta de sensación de las contracciones aumenta la necesidad del uso de fórceps, provocando desgarros.
- El catéter a veces se mueve provocando que sólo el efecto llegue a algunas zonas.
- Aumenta la posibilidad de que la madre tenga fiebre durante el parto, aunque aún se desconoce con exactitud qué provoca este efecto.
- En un futuro puede causar infección o lesiones en los nervios.
En lo personal, no sé si lo haría de nuevo
Puedo afirmar que al vivir la experiencia, fui beneficiada por las ventajas, pero algunas desventajas también me alcanzaron, como haber quedado con un desgarramiento de quinto grado, al final no sentía nada, me costó volver a caminar, no podía ni siquiera rotar las piernas en la cama para levantarme, con el tiempo y después de esta experiencia, suelo tener un sueño que se repite, que me caigo de la cama sin poder moverme.
Lo mejor de todo, es que mi ya no voy a tener que decidirlo más porque la fábrica de bebés se ha cerrado en mi caso.
Viviana Domínguez
Psicopedagoga, escritora y orientadora familiar. Oriunda de Argentina, actualmente reside en Utah. Es amante de la buena literatura, la música, el arte y de pasar tiempo en familia.
