Policía responde a llamada por abuso infantil; lo que nunca imaginó es que se trataría de su propio hijo
El Oficial relata haberse encontrado con la peor escena que jamás en su vida de policía había enfrentado.
Viviana Domínguez
Un llamado de ayuda al comenzar el día
Jody Thompson un oficial de Policía de la ciudad de Poteau, Oklahoma, recién comenzaba su jornada cuando escuchó un llamado por la radio de asistencia a una casa por abuso infantil, por lo que decidió acudir por ayuda de acuerdo a lo relatado en Little Things.
El Oficial relata haberse encontrado con la peor escena que jamás en su vida de Policía había enfrentado.
Un niño de 8 años, atado de pies y manos con una soga, com moretones y mojado. El niño contó que había sido tirado al tacho de la basura para luego dejarlo bajo la ducha.
Para el oficial Thompson fue todo lo que necesitó ver para tomar una decisión en ese instante “No me apartaría de ese niño nunca más”.
Y así lo hizo, después de transportar al niño al hospital donde fue alojado en cuidados intensivos, Jody jamás se despegó de su lado, y tomó la decisión junto a su esposa de adoptarlo.
Actualmente John Thompson (nuevo nombre después de la adopción) asiste al colegio, es un muy buen estudiante y se encuentra feliz con su nueva familia. Pero la historia no termina aquí, pues Jody y su esposa se enteraron que la madre biológica del niño había tenido una niña en la prisión, por lo que decidieron adoptarla también.
El abuso infantil no discrimina
Trabajo en un refugio de menores quienes fueron removidos de sus casas por abuso de los padres. Cuando me preguntan mi opinión en cuanto a si recibimos más chicos hispanos, o refugiados o americanos, siempre respondo, el abuso infantil no discrimina por raza, lo encuentras en todas las naciones, culturas o clases sociales, aunque te parezca extraño, claro que el porcentaje mayor se da en las poblaciones de bajo nivel económico también.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud el abuso infantil es considerado como “los abusos y la desatención de que son objeto los menores de 18 años”, e incluye todos los tipos de maltrato físico o psicológico, abuso sexual, desatención, negligencia y explotación comercial o de otro tipo que causen o puedan causar un daño a la salud, desarrollo o dignidad del niño, o poner en peligro su supervivencia, en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder.
Además explica que es un problema a nivel mundial y muy grave; las estadísticas a nivel internacional muestran que:
- Una cuarta parte de los adultos manifestaron haber sufrido maltrato infantil.
- una de cada cinco mujeres sufrieron abuso infantil.
- Uno de cada trece hombres denuncia haber sufrido abuso infantil.
Las estadísticas asustan y nos muestran la realidad que veo todos los días en mi trabajo.
Prevención desde el hogar
De acuerdo a las Naciones Unidas, el término niñez incluye a los menores de 18 años, y existen dos tipos de abuso infantil, el acto de violencia que los padres o cuidadores hacen a los menores de 14 años, y aquel acto violento sufrido por parte de una comunidad o entidad pública por menores entre 15 y 18 años.
La aceptación de la violencia a menores lamentablemente comienza en el hogar, con el ejemplo de nosotros los padres. En el hogar los niños observan y aprenden lo que es permitido y lo que no lo es, y cuánto valor personal ellos mismos reciben.
La violencia es un acto de dos, el que lo realiza y el que lo permite, y ese es el gran desafío como padres. Pero no importa cuanto se lo digas, son nuestras acciones las que enseñan.
Si hemos vivido violencia familiar, y no hemos pedido ayuda o resuelto de alguna manera los efectos emocionales, seguiremos creando familias que acepten esta forma de trato por generaciones como algo natural.
Algunas recomendaciones para que evalues en tu hogar el nivel de aceptación a la violencia, recuerda que esto incluye violencia emocional, física, sexual y negligencia, por lo que la lista puede ser larga, aquí sólo incluyo algunos más comunes que puedo ver por mi área de trabajo y las divido en tres categorías:
Aceptación de la violencia, lo que enseñas como comportamiento correcto
- Permites que tu pareja te insulte, o lastime físicamente.
- Permites que tu o tu pareja, se dirijan a los niño de forma que afecta su autoestima.
- Aceptas la crueldad animal.
- Expones a tus hijos en situaciones inapropiadas.
- Permites que en tu hogar haya un clima de tensión.
- Nivel muy bajo de comunicación.
- Uso extremo de la televisión
Negligencia parental
- No te ocupas de la salud física o emocional de tu hijo
- Descuidas la higiene personal de tus hijos.
- Permites que asista irregularmente a la escuela.
- No lo apoyas en sus metas o desafíos.
- Lo dejas mucho tiempo solo.
- Lo dejas al cuidado de los niños menores de la casa frecuentemente.
Uso indebido de alcohol y drogas, actividades inapropiadas
Al hablar del abuso de drogas ilícitas o alcohol se incluye las actividades íntimas inapropiadas, por parte de los progenitores hacia los hijos o entre ellos mismos. El abuso de estas drogas ilegales producen un efecto directo al cerebro, por lo que perturba completamente el accionar del individuo, llegando a realizar actividades inapropiadas en contra de su persona o alguien más, en estos caso a sus propios hijos.
Es lamentable, pero es la realidad, y a esta categoría pertenecen la mayoría de las niñas con las que trabajo a diario. Niñas que nacen en un hogar donde los actos de violencia son aceptados, provocando dolor, enojo y el abandono por parte de los progenitores, quedando en un limbo donde el estado debe hacerse cargo.
Programas de padres sustitutos o adopción
Jody Thompson y su esposa, héroes de la humanidad, ya que la adopción de niños en esta situación no es fácil, ellos vienen con mucha carga emocional, pero se pueden ayudar con amor, paciencia y PAZ . Si no puedes adoptar, puedes informarte en tu comunidad por los programas de padres temporales. Si eres tú quien vives una situación de violencia en tu hogar PIDE AYUDA.
Viviana Domínguez
Psicopedagoga, escritora y orientadora familiar. Oriunda de Argentina, actualmente reside en Utah. Es amante de la buena literatura, la música, el arte y de pasar tiempo en familia.
