¡Por fin iniciaron las clases!

Si las vacaciones, con tus hijos en casa, te dejaron extenuada y añorabas la llegada de las clases y la rutina, eres la candidata perfecta para aprender mucho hoy, Te invito a leer cómo.

Marilú Ochoa Méndez

Hay dos tipos de actitudes en las madres hacia las vacaciones: unas, disfrutan enormemente salir de la rutina y prisas para vivir en casa con sus hijos actividades distintas. En cambio, hay otras que las sufren y piden a gritos que regresen los días de clases. Si estás entre las últimas, entonces este artículo es para ti.

La paz que hay en casa cuando los niños están en la escuela es maravillosa. Sí, se despierta uno con esas horas locas donde hay que peinar, servir el desayuno, firmar notas de última hora y alistarse para llegar a tiempo. Pero una vez que la casa queda vacía, cada mamá sabe que tendrá unos minutos u horas gozosas donde podrá recoger, ordenar, sacar pendientes y hacer la comida sin sobresaltos. En cambio, en vacaciones es difícil recuperar ese tiempo y seguir con las labores diarias buscando que los niños no pasen el día entero pegados a una tableta o a la televisión; que coman sano, que no vacíen la despensa mientras recoges las recámaras y demás retos dignos de una serie televisiva. Si te encuentras en esta situación, ¡te tengo una buena noticia!, hoy aprenderás algo nuevo que cambiará la vida de tu familia:

1. Es preciso que establezcas rutinas

Si tu vida es ordenada y feliz cuando vives la rutina que la escuela exige y un poco caótica sin ella, tal vez estés esperando demasiado de la escuela. La escuela y sus horarios establecidos nos ayudan a tener cierto orden en nuestros días. El horario de clases incluso le da una estructura al fin de semana: se hace alguna tarea; se dedica tiempo para convivir y divertirnos un rato como familia. Vivir con tanto tiempo libre en vacaciones nos hace ver que es preciso elaborar una rutina ordenada para la vida de la familia, más allá de lo que “hay que hacer”, o nuestra vida se hunde en el caos absoluto.

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2. ¿Sabes cuáles son tus objetivos para con tu familia?

Para esto es preciso preguntarnos primero, ¿qué queremos de nuestra familia? La escuela implica una rutina, orden, prisas, clases extraescolares y tremendo estrés. Pero más allá de ese horario o disciplina, ¿hay un rumbo que ya sigue tu familia? ¿Tienen dirección, objetivos, metas? Hoy es el momento de que te preguntes si te gusta hacia dónde te dirigirá ese camino. Si es así, ¡enhorabuena!, a continuar por esa senda. Pero si no, lo que planees y decidas hoy puede repercutir para toda la vida de tus hijos y para que tu familia viva de una manera más plena y feliz.

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3. Cómo definir ese rumbo en tu familia

Stephen R. Covey afirma en su libro Los siete hábitos de una familia altamente efectiva, que la familia debe elaborar un Plan de Vida Familiar y que, al hacerlo, debe pensar en él como en un “plan de vuelo”. Esto significa que es preciso ser conscientes de que –como los pilotos– hay que elaborar la mejor ruta para llegar al destino deseado. Por supuesto, siempre hay que estar abiertos a modificarla, dependiendo de lo que se nos presente en la vida. Considera que es tan malo vivir sin objetivos, como el esclavizarse a ellos: nada es mejor que tener siempre proyectos flexibles.

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Hoy es un excelente momento para que desarrolles ese plan de vida familiar que garantice que en vacaciones o en periodo de clases los tuyos caminarán hacia el mejor rumbo posible: un camino feliz.

Marilú Ochoa Méndez

Enamorada de la familia como espacio de crecimiento humano, maestra apasionada, orgullosa esposa, y madre de siete niños que alegran sus días. Ama leer, la buena música, y escribir, para compartir sus luchas y aprendizajes y crecer contigo.