Presta atención porque esta puede ser la causa de tu insomnio y del insomnio de tus hijos
El uso de la tecnología puede estar causando problemas más graves de lo que piensas, para lo que tendrás que realizar cambios inmediatos si no quieres sufrir de insomnio.
Viviana Domínguez
La pantalla como causa de insomnio
Recientemente discutía con mi hijo adolescente sobre el tema, pues he observado que no importe la hora que se va a dormir, pero le lleva mucho tiempo lograr el sueño, causando que se levante varias veces de la cama a horas indeseables y utilice el baño o la cocina, y por supuesto haciendo que me despierte a mitad de la noche con él.
Por lo que le sugerí, que apagara todos los electrónicos a las 9 de la noche, leyera un libro, escuche música relajada, y meditara cada noche. Después de varios intentos, logró conciliar el sueño y ha mejorado notablemente, no obstante hay días que le cuesta más trabajo que otros, y esos días coinciden cuando utiliza la computadora o el televisor por muchas horas en el día.
Un artículo publicado en La mente es maravillosa, aborda el tema de acuerdo a un estudio publicado en LiveScience, el cual afirma que hay una conexion directa entre la pantalla azul de cualquier dispositivo y el insomnio.
Estímulos lumínicos, insomnio tecnológico
Estoy segura que al igual que yo, todos usamos el celular o la computadora, antes de descansar en la cama, pensando que esto nos relaja, pero en verdad no es así, pues la luz azul característica de estos electrónico “estimulan” y alteran el ritmo cardiaco.
De acuerdo al estudio, se cree que en la actualidad se está durmiendo 2 horas menos y que los más afectados son los niños y adolescentes, llegando a aumentar los casos de insomnio crónico en ellos, y causando además problemas de conducta y en el rendimiento escolar.
El Dr. Jesús Escribá médico Neurofisiólogo del Hospital Casa de la Salud, y experto en sueño, recientemente anunció que la situación del uso de las computadoras a la hora de ir a dormir es tan grave que ya se podría hablar de un nuevo trastorno “Insomnio Tecnológico”, y aclara que no sólo acorta las horas de dormir sino la calidad del sueño, y crea una nueva adicción, la de consumir somníferos para poder dormir.
La luz y nuestro cerebro
Hace 40 años atrás, en ausencia de la tecnología, nuestro reloj biológico estaba sincronizado con la aparición y puesta del sol, obviamente algo muy natural a lo que nuestro cerebro estaba completamente acostumbrado. Así al llegar la noche, la retina del ojo lo recibía, e inmediatamente la glándula pineal produce Melatonina y así automáticamente se activa el reloj biológico que todos tenemos.
Ahora bien, de más está decir que las computadoras y los celulares, son usados permanentemente y sin respetar la salida o entrada del sol, transmitiendo directamente una nueva energía de luz continua a la que el cerebro ya no sabe cómo leer, provocando que la misma glándula Pineal interrumpa la segregación de Melatonina causando una suma de efectos tales como:
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El cerebro es incapaz de reconocer que la noche ha llegado.
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En vez de relajarnos, se activa el sistema de alerta.
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Llevará más tiempo conciliar el sueño.
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Los tiempos de descanso se acortan automáticamente.
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En todos los casos se presentan dolor de cabeza continuos.
Cómo mejorar nuestra calidad de vida y de descanso
Entiendo que para uno como adulto es un poco más fácil de encarar el problema, ya que tenemos más conciencia de la importancia del descanso, por lo menos en mi vida personal, pero trabajar con los hijos adolescentes o niños es más complicado, y por supuesto que quitarles los celulares o tabletas, no entra dentro de una estrategia razonable, pero si podemos educar para un mejor y saludable uso.
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Enseñarles a que utilicen la “luz nocturna” durante las horas de oscuridad.
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Existen unas gafas especiales para el uso de las pantallas.
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Que dejen de utilizar los dispositivos al menos dos horas antes de descansar.
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Utilizar luces tenues en el hogar.
Conclusión
Si nada de lo comentado funciona, se tendrá que volver a los viejos tiempos, donde acompañamos a nuestros hijos hasta la cama, conversación de por medio con una taza de leche calientita, siempre funciona.