¿Qué hacer si tu bebé come excremento (popo)?
Los bebés son expertos en hacerlo sin ser advertidos. Conoce qué debes hacer, los peligrosos y muchas veces inexplicables síntomas.
Adriana Acosta Bujan
En muchas ocasiones puede que las madres se espanten al observar que su bebé come su propio excremento. Es algo desagradable, causa mucha angustia y preocupación, debido a que los bebés apenas están desarrollando y fortaleciendo sus defensas para combatir enfermedades.
Sin embargo, es algo muy natural y normal, el famoso psicólogo Freud se refiere a la etapa anal que va desde los 18 meses hasta los 3 años y medio, el estudio arrojo una interesante perspectiva en cuanto a que es importante pasar por esa etapa para que el niño desarrolle su propia personalidad.
El niño descubre que él es capaz de producir su propio excremento, así que lo asocia con pertenencia, algo que es solo suyo, por ello muchas veces los niños retienen su popo, porque les produce placer.
¿Es bueno o malo que coma su popo? http://pijamasurf.com/2013/03/que-tan-sano-o-danino-es-comer-tu-propio-excremento/
Los expertos opinan que el comer las heces no es dañino, si es que el individuo es saludable, puesto que las bacterias que ahí se encuentran son las mismas que vienen en su sistema digestivo, así que posiblemente la ventaja es que los organismos tóxicos son los mismos que se llevan en el cuerpo, así que no es algo de qué preocuparse.
Sin embargo, es algo que no se puede saber si el niño es totalmente saludable, así que puede enfermarse gravemente, por la cantidad de bacterias que pueda llevarse al cuerpo.
Existe un término para nombrar el comportamiento anormal involuntario de ingestión de heces que es la “coprofagia”, se da solo en los insectos y animales. También es común que se adapte este término a los niños pequeños o con retraso mental, puesto que aún no distinguen lo comestible con lo que no se puede comer y cualquier cosa que llame su atención se la llevaran directamente a la boca.
¿Qué hacer en estos casos?
1. Acudir al medico
Es importante que un especialista evalué la situación, puesto que los microbios y baterías que ingiera el niño pueden causar problemas en su salud, como tifoidea o problemas intestinales. No te alarmes porque seguramente el doctor te ayudará y guiará en el proceso, probablemente sugerirá realizar un lavado intestinal.
2. Higiene
Debes lavar perfectamente sus manos, cara y cuello, para matar las posibles bacterias, es recomendable lavar la boca con su cepillo y pasta. Como es pequeño no siempre se puede tener un enjuague bucal, sin embargo con solo tomar agua, limpiara su organismo.
3. Observarlo
Recuerda que el cuerpo es maravilloso y muy inteligente, él solo puede curarse de muchas enfermedades, así que observa a tu niño por un tiempo razonable y si te percatas que no pasó nada y fue falsa alarma podrás estar tranquila.
4. Identifica los síntomas
¡Espera con paciencia a ver si existe algún tipo de síntoma! Como nauseas, vómito, diarrea, fiebre leve. Si se llegan a presentar será después de 30 minutos hasta 4 horas después de haber consumido el excremento.
5. Prepara un remedio casero
Los tés son maravillosos, la mayoría de los medicamentos están hechas con las plantas medicinales, así que es recomendable que prepares un té de manzanilla, hierbabuena o de anís, para aliviar cualquier tipo de molestia intestinal.
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Comer por accidente las heces no es tan alarmante, si se toman las medidas sanitarias adecuadas. Si persiste ese comportamiento es importante que acudas con un especialista, muchas veces las terapias son excelentes para guiar al niño y ayudarlo.