¿Recién casados y no hay un inicio feliz?: conoce más sobre la depresión “postboda”
Casarse no es el fin de una historia de amor, es la construcción de una nueva vivencia llena de oportunidades.
Erika Patricia Otero
Matrimonio. Muchas personas sueñan con llegar hasta este punto con quien consideran el amor de su vida. Es como cerrar un capítulo de una historia de amor y abrir otro para seguir el hilo romántico. Todo sería muy bonito si ese “Fueron felices para siempre” existiera, pero eso es realmente incierto.
Es más, para algunas mujeres recién casadas, la fantasía de esos primeros momentos matrimoniales no son lo que esperaban. No es que la convivencia sea un desastre y su esposo un incompetente; el problema es más profundo y debe ser atendido con presteza.
¿Sabes qué es la depresión postboda?
Sin muchos rodeos diré que este “nuevo” concepto no es tan reciente cómo parece. Es más, desde que las personas empezaron a convivir como parejas, muchos se han enfrentado a este padecimiento.
Otro aspecto importante, es que en realidad no se trata de depresión. El término es usado para describir un malestar que pueden vivir ambos recién casados a inicios de su convivencia. Este, además, se puede prolongar por bastante tiempo si no es atendido con prontitud.
Una cosa para tener en cuenta es que todos somos diferentes; así que esto no lo sufren todas las personas, y quienes lo padecen, no lo experimentan de la misma manera.
Por lo regular, los síntomas son muy similares a los de una depresión , pero de menor intensidad. Los síntomas más comunes de la depresión post boda son:
1 Sensación de estar solo, vacío y angustia.
2 Tendencia a aislarse y tristeza. Esto debido a que la persona se siente desconectada de su cónyuge y a causa de esto evita su contacto.
3 Pérdida del interés por su relación.
4 Alteraciones del sueño y del apetito
5 Sensación de cansancio constante y aburrimiento.
Razones por las que surge la depresión postboda
Lo natural es que tendamos a suponer que una pareja se casa colmada de entusiasmo y felicidad. Hoy día afortunadamente es así para la inmensa mayoría de las parejas. Pese a eso, casarse colmado por estas emociones tan bellas puede verse opacado por la llegada paulatina de emociones negativas. Las razones pueden ser variadas y diferentes de cada persona que experimente depresión postboda; sin embargo, estas son las más comunes.
Expectativas insatisfechas
A veces se espera mucho de una situación novedosa. Muchas cosas de las que se esperan son un tanto irreales; sin embargo, al verse insatisfecha una expectativa, la sensación de decepción surge y aumenta con el tiempo.
Uno de los peores enemigos de los seres humanos es esperar algo de alguien y hacerse ilusiones con esto. Lo ideal es solo esperar cosas de uno mismo porque esos aspectos se pueden controlar.
Ahora bien, nada de malo hay en esperar algo de la pareja. El problema, es que lo que se espera que él o ella hagan debe estar muy ajustado a la realidad.
Por ejemplo: no es lo mismo esperar un encuentro luego del trabajo para ir a comer juntos; a esperar que al llegar del trabajo, tu esposa te lave los pies como si de un rey se tratara.
Sensación de vacío
El cambio de pasar de preparar una boda a estar casados puede resultar agobiante. Ahora está esa sensación de vacío y soledad. Para algunos será un alivio no vivir bajo tanto estrés y presión; sin embargo, otros van a echarlo de menos.
Es como pasar de ser la protagonista de una hermosa novela a solo ser alguien más en la historia. Es completamente normal. Ahora debes adaptarte a tu nueva realidad y eso solo está en tus manos.
Dificultades para adaptarse al nuevo rol
Pasar de cargar el título soltero a casado puede generar en algunas personas resistencia. Incluso, hay quienes se arrepienten de haberse casado porque sienten que perdieron en lugar de haber ganado.
Adaptarse a una realidad nueva puede costarle mucho más trabajo a unas personas que a otras. Tal vez una de las partes era muy apegada a su familia, y ahora ya no puede verlos con frecuencia. Quizás se salía mucho con amigos y ahora ya no se puede hacer esto.
Lo que hace peor esta situación, es que entirse de esta manera puede generar conflictos internos y sentimientos de culpa.
Problemas subyacentes de la pareja que fueron “tapados” por una boda
En muchas ocasiones hay parejas de novios que creen que la solución a sus problemas es el matrimonio. No, esto lo que hace es que esos problemas aumenten y se agudicen.
Lastimosamente, es muy probable que los matrimonios que se concretan bajo estás circunstancia, lleguen a un fin predecible. Son matrimonios que jamás debieron llevarse cabo.
Superando la depresión postboda
Ten en cuenta algo, sentir depresión postboda no es un anuncio de haber cometido un error al casarse; bueno, con una excepción. Se trata más de superar la novedad y el cambio radical que se ha tenido en corto tiempo. Sí, porque por mucho que se crea estar preparado para iniciar una vida en pareja, a veces no es así.
Estos pasos pueden ayudarte a superar con altura la depresión postboda:
Acepta lo que sientes:
Nada de malo hay en sentirse vació o con desdén. Acepta lo que sientes y no te recrimines. En su lugar, cambia las expectativas irreales que tenías por unas más aterrizadas. Observa el lado positivo de haberte casado y pon de tu parte para que la convivencia sea lo más armónica posible.
No te aísles de quienes amas y siempre hicieron parte de tu vida
Casarse no es igual a estar en una jaula. Solo te casaste, esto quiere decir que ahora cuentas con una compañía adicional que va a estar a tu lado para ayudarte a ser una mejor versión de ti. Además, también están esas otras personas importantes: amigos y familia, que siempre estarán ahí para apoyarte y darte más amor.
Sincérate con tu cónyuge
Es justo que tu pareja sepa cómo te sientes; quizás está pasado por lo mismo y ambos van batallando solos ese camino de incertidumbre. Hablar puede ser la fuente de consuelo y luz que ambos necesitan para superar toda esa dificultad.
Por último, si la sensación de insatisfacción va en aumento, lo justo es que busques ayuda terapéutica. Siempre es mejor buscar un soporte objetivo que te oriente y te ayude a salir de esos sentimientos que te agobian.