Regla de las tres R aplicada en casa
Tu granito de arena es indispensable para lograr cambios. Tú como madre eres responsable de que la formación en pro del ambiente comience desde el seno familiar.
Elitania Teresa Ruvalcaba Blancas
Tu granito de arena es indispensable para lograr cambios. Como madre de familia eres responsable de que la formación en pro del ambiente comience desde el seno familiar, pues si tus hijos aprenden a cuidar su entorno inmediato, su hogar, lo que tienen a su alrededor, podrán aplicar lo aprendido en casa en cualquier lugar.
Como parte de la formación cívica, a los niños, de manera permanente, se les fomenta una cultura del cuidado del medio, haciendo hincapié en que si no cuidamos nuestro planeta, las nuevas generaciones heredarán un lugar poco ideal para vivir, con muchas carencias, falta de oxígeno limpio, agua potable accesible, un cielo azul protegido por la capa de ozono y bosques que sean verdaderos pulmones naturales para el planeta. Como persona que vive y disfruta de este mundo, realizando a diario acciones para resarcir el daño ecológico provocado por los excesos humanos, anímate a comenzar con la transformación ambiental.
La regla de las tres R es muy sencilla: te permitirá aprovechar al máximo ciertos materiales dentro de la casa, y aquellos que ya no utilices los podrán utilizar otras personas; cómo puedes ver, con sencillas acciones se reducirá la contaminación de basura que se produce en el hogar, con beneficios adicionales.
Cada “R” tiene un propósito específico
1. Reciclar
Ahora podemos encontrar una gran cantidad de productos que se utilizan en casa, en la escuela y en la oficina que están hechos y empaquetados con materiales susceptibles al reciclado: plástico, pet, aluminio, papel, vidrio y madera son los más comunes. En el caso de que ya no los puedas reutilizar, existen empresas encargadas de su recolección y venta a otras, que por medio de procesos industriales les dan una nueva forma y un nuevo uso. Los empaques hechos de estos materiales no son biodegradables, al contrario, su descomposición tarda muchos años y contaminan en exceso, por lo que es preferible que si estos envases los puedes utilizar como contenedores para guardar objetos pequeños o juguetes, lo hagas; trata de aprovechar su vida útil.
Relee: ¿Eres derrochador? Entérate cómo dejar de gastar tanto dinero.
2. Reducir
Si tienes la idea de que la única manera de disminuir la contaminación es sólo evitando producir y eliminar la basura, te falta complementar la información. En este caso, la reducción se refiere a consumir lo menos posible aquellos productos que desechamos con mucha facilidad, aquellos que tienen un uso único y utilizar la energía únicamente lo necesario. Si acostumbras utilizar la lavadora más de dos veces a la semana, prográmate para usarla sólo un día y ahorrarás también agua, detergente y energía eléctrica. Debes considerar también las pérdidas energéticas producidas por dejar conectados los aparatos electrónicos cuando no los tienes en funcionamiento. Si los desconectas verás, con el tiempo, que además de no contaminar tendrás un ahorro económico.
Relee: Ideas para reciclar en casa.
3. Reutilizar
Esta puede ser una opción divertida para no contaminar. Todos los materiales y productos tienen una vida útil, pero cuando ésta llega a su fin, con ingenio y creatividad, puedes transformar aquello que estaba destinado para la basura y darle un nuevo uso. Los empaques de plástico y de vidrio pueden convertirse en contenedores de cereales, sopas o granos en la cocina; si son un poco más grandes, son ideales para guardar juguetes o lápices o en la caja de herramientas de papá, donde pueden guardar tornillos y clavos. Las hojas limpias de los cuadernos las puedes reutilizar creando nuevas libretas o poniéndolas en una carpeta. Piensa que reutilizar implica aprovechar al máximo las cualidades de los materiales y los productos, además de que cubrirá alguna necesidad familiar.
Relee: Cómo reciclar para ahorrar dinero y echarle una mano al medio ambiente.
Enseñarle a los niños en qué consiste reciclar, reducir y reutilizar, hará que en el futuro ellos sepan aprovechar al máximo los materiales y productos con los que están familiarizados y con los que toda la vida van a tener contacto. Lo que redunda en una gran ganancia para todos.