Seguro lo padeces y te avergüenza, ¡pero es necesario que sepas cómo tratarlo!
Es posible que sufras este padecimiento en silencio. Infórmate, ten una vida más plena y saludable cuidando lo que comes y la manera cómo vives.
Erika Otero Romero
El colon irritado es un mal muy común, pero que genera vergüenza en quien lo padece, por lo que es probable que las personas afectadas sean muchas más de las que se supone. Posiblemente tú o alguien en tu familia lo padezca.
¿De qué se trata?
Para ser exactos, todos tenemos hemorroides. Anatómicamente hablando, “las hemorroides son plexos, cojinetes o almohadillas de tejido submucoso donde están contenidas las vénulas y arteriolas del conducto anal”. Solo se consideran como una enfermedad cuando el flujo de sangre en esta zona de vasos sanguíneos se interrumpe a causa de dilataciones (inflamaciones) varicosas de las venas hemorroidales idénticas a nudos en la mucosa anal, y esto trae consigo molestias como picor, dolor, exudado o sangrado de la región anal.
Muchas personas creen que es solo un mal de adultos que trabajan durante mucho tiempo sentados en oficinas o en sus hogares pero no es así, pues los jóvenes también pueden llegar a padecerlo.
Causas
Pueden ser múltiples y van desde el estreñimiento hasta el sobrepeso, pero aunque no lo creas también el hecho de permanecer mucho tiempo sentado en el retrete, una dieta inadecuada o incluso debilidades congénitas del tejido conectivo y cirrosis hepática pueden ser causas de esta enfermedad.
Síntomas
Las hemorroides por lo general no son dolorosas, pero si se forma un coágulo de sangre, pueden causar mucho dolor y sangrado.
Las señales más evidentes de que una persona padece de este mal son:
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Aparición de sangre (indoloro) proveniente del recto
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Prurito (picor) anal
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Dolor en la zona anal especialmente mientras se permanece sentado
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Dolor durante la deposición
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Una o más protuberancias duras y sensibles cerca del ano
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Prevención de las hemorroides
Contrario de lo que se piensa esta enfermedad se puede prevenir y es muy sencillo lograrlo. Acá la forma.
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Escucha a tu cuerpo:No reprimas o aguantes la necesidad de defecar, ve cuando solo sea necesario y no permanezcas sentada en el baño más de lo necesario y, en lo posible, no hagas fuerza al ir al servicio.
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Hidratarse: Beber la cantidad adecuada de líquido, infusiones de frutas y hierbas aromáticas así como jugos de frutas desde luego todo natural y no conservados.
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Ejercicio: El que sea que elijas el punto es no estarse quieto. La actividad física hace que el organismo funcione de manera óptima, ¡claro esta! Sin exagerar.
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Evitar sobrepeso: mantenerse en el peso adecuado a la estatura es básico ya que al tener sobrepeso, mayor es la presión a la que se somete la zona anal.
strong,Dieta recomendada para combatir la enfermedad hemorroidal
Es importante que las personas que padecen hemorroides incluyan en su dieta una buena cantidad de fibra para mejorar el transito digestivo, de la misma manera es necesario que se consuman cereales integrales, verduras, frutas y legumbres.
Algunos alimentos que se pueden y deben consumir son: maíz, frijoles, aguacate (palta), pan integral (pan de grano entero), lentejas, peras, manzanas, avena, brócoli, arroz integral, centeno y mijo.
Ahora bien, lo que no debes consumir son alimentos saturados en sal, de la misma manera que son perjudiciales especias como pimienta debido a que ejercen una función vasoconstrictora que empeorará las hemorroides.
Lo mismo ocurre con el café o un alto consumo de alcohol y otras sustancias estimulantes que empeorarán el estado de las hemorroides, aumentando de esa manera las molestias que causan.
Como puedes ver éste es un mal fácil de tratar y combatir y que se puede padecer desde la juventud, así que ponte lista y recuerda que es mejor prevenir que lamentar.
Erika Otero Romero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
