¿Soplas la comida de tu bebé? Un estudio sugiere no hacerlo por este motivo
Si tu bebé acaba de comenzar la alimentación complementaria, entonces este artículo te va a interesar.
Camila Ignacia Gómez González
Desde que nos convertimos en padres comenzamos a buscar las mejores alternativas para poder criarlos de una manera eficaz y libre de peligros innecesarios para su salud. Sin embargo, muchas veces las costumbres en el diario vivir pueden jugarnos en contra.
Y un claro ejemplo de esto es cuando nuestro hijo cumple 6 meses de vida y el pediatra nos sugiere comenzar con la alimentación complementaria (un bebé NUNCA debe consumir nada más que leche materna antes de los 6 meses de edad, según la Organización Mundial de la Salud). En ese momento comenzamos a sacar el chef que llevamos dentro y empezamos a probar diferentes recetas, algunas heredadas claro está, otras sacadas de internet y más de algún experimento propio, suelen acompañar las primeras papillas del bebé. Sin embargo, el problema viene después, cuando se comienza a soplar su comida.
Sí, soplar la comida del bebé es MUY perjudicial, aunque no lo creas. El principal motivo es el que indicó Art Nowak, ex presidente de la Junta Estadounidense de Odontología Pediátrica, donde señala que a través de esta conducta los padres transmiten caries a sus hijos, incluso cuando no tienen dientes.
LA EXPLICACIÓN CIENTÍFICA
Al momento de nacer, el cuerpo del bebé no ha sido expuesto al streptococcus mutans, una bacteria que habita en la boca de los seres humanos y que suele alimentarse de los restos de comida que quedan entre los dientes. Y aunque el bebé no tenga dientas, ésta puede establecer pequeñas colonias bacterianas y sobrevivir hasta el momento en que los dientes comienzan a crecer.
«Ya sea que tome leche materna o fórmula, la actividad comienza dentro de esa placa. En poco tiempo, esa actividad crea ácido y eso inicia todo el proceso de la enfermedad. A los cinco, seis o siete meses, es cuando empieza a suceder». , indicó Nowak al portal vix.com
CÓMO EVITARLO
Para evitar la aparición de las molestosas y dolorosas caries es necesario seguir las siguientes indicaciones:
- Limpiar de manera frecuente la boca del bebé
Para hacerlo no debemos esperar a que tenga dientes. Por el contrario desde el mismo momento de su nacimiento, puedes comenzar a pasar una gasa húmeda por sus encías, luego de cada toma de leche (independiente si es alimentado con fórmula o con leche materna exclusiva).
- NO soplar la comida de los bebés
Lo mejor es dejar que la comida se enfríe de manera natural, así que si es necesario planifica unos minutos adicionales a la hora del almuerzo o cena de tu bebé para que puedas dejar enfriar con tranquilidad su plato.
NUNCA dejes el plato caliente a la altura del bebé, puede generar quemaduras graves en su cuerpo en caso de que lo tome y lo de vuelta sobre sí mismo.
- NO lo alimentes con la misma cuchara que has usado tú.
Procura que tu bebé tenga sus propias cucharas, de materiales suaves, bordes redondeados y del tamaño adecuado para su edad.
De esta forma evitarás que las bacterias pasen de boca a boca, generando caries.
- Visita frecuentemente al dentista
Incluso si sus dientes no han aparecido aún, es necesario que el primer control odontológico de tu hijo se haga alrededor de los 6 meses. A modo de verificar que la rutina de higiene sea la adecuada y que no existan problemas con el desarrollo bucal del niño.