“Te lo dije”: por qué esta frase provoca daños emocionales en los niños
Averigua por qué esta frase puede dañar la autoestima de tu hijo y qué otras puedes usar en su lugar. El futuro de tu hijo te lo agradecerá.
Adriana Acosta Bujan
Todos los padres desean que sus hijos aprendan a controlar sus impulsos y tomen buenas decisiones para que no se expongan a los peligros que la vida les presenta.
En muchas ocasiones la frase “Te lo dije” es una manera de hacerlos comprender que lo que harán puede resultar perjudicial para su cuidado.
Claro, a todos los padres les gusta en cierta forma tener la razón, ya que son la autoridad de los hijos; sin embargo, esta frase puede perjudicar gravemente su autoestima.
Es como si le estuvieran dando otro tipo de mensaje de manera inconsciente, como por ejemplo: “Tú no puedes hacerlo bien”, “tú no sabes tomar decisiones”, “yo sé lo que hay que hacer y tú no”.
Por tal razón, los hijos al escuchar constantemente la frase “te lo dije”, creerán que no son capaces de actuar y decidir correctamente, lo cual disminuirá por completo su valía, seguridad y confianza en ellos. Incluso, tendrán temores provocados por tal frase, lo que los llevará a desconfiar de sí mismos.
Un error que se puede remediar
Sé que todos los padres procuramos y nos esforzamos para que los hijos crezcan felices manteniendo al tope su nivel de autoconfianza y seguridad. Sin embargo, esta frase que la decimos cotidianamente va en contra para lograr nuestro objetivo.
Es por ello que debemos tener cuidado al elegir las frases o palabras apropiadas cuando hablemos con los hijos, para evitar destruir su autoestima. Muchas de las palabras que podemos decirles tienen un gran poder e influencia sobre ellos; una sola frase o palabra pueden destruir por completo a alguien o hacerlos sentir poderosos.
Entonces, qué frases podemos utilizar para evitar decir “te lo dije”:
1. ¿Qué ha pasado?
Es fundamental que los padres dejen a sus hijos tomar sus propias decisiones para que aprendan las consecuencias de sus actos. De esa manera podrán comprender los peligros a los que se enfrentan.
Dicho lo anterior, será conveniente que en lugar de decir “te lo dije” lo cambies por un “¿qué ha pasado?” Así estarás dando la oportunidad a los hijos de comprender, explicar y analizar sus errores.
Incluso, si integras esta pregunta frecuentemente estarás reforzando el vínculo afectivo con tus hijos, ya que se sentirán amados y respetados al darles la libertad de decidir por ellos mismos
Recuerda, siempre es importante explicar a los hijos las consecuencias de cualquier decisión que vayan a tomar, todo adaptado a la edad de ellos.
2. ¿Qué aprendiste?
Si deseas que tus hijos aprendan a tomar mejores decisiones deben comprender sus errores. Así, poco a poco sabrán que hay situaciones que los pondrán en peligro. Entonces, en lugar de decir “te lo dije” pregúntales qué aprendió de tal situación.
Por ejemplo: si tus hijos quieren subir a un árbol y se caen entonces ellos aprenderán que no deberán trepar muy alto o seguramente encontrarán otra manera de hacerlo de forma segura.
Con esta pregunta estás invitando a tus hijos a la reflexión, a comprender cómo es mejor hacer las cosas. De esa manera ellos podrán reforzar su seguridad y confianza cada vez que logren su objetivo.
3. ¿Tú que crees que pueda suceder?
Seguramente tus hijos te van a responder que nada malo les va a suceder; sin embargo, antes de que ellos elijan hacer tal cosa diles que tú necesitas que te expliquen con detalle lo que podría suceder si hacen eso que quieren hacer.
Así podrás desarrollar el pensamiento crítico al esforzarlos a pensar en las consecuencias de sus acciones.
Incluso, les estarás dando a tus hijos la oportunidad de analizar cada situación dándoles el poder de explicarte algo que tú ya sabes. Así ellos se sentirán escuchados, comprendidos y serán más empáticos.
4. ¡Tú puedes!
Evita decirles a tus hijos “te lo dije” o “no puedes hacerlo”, ya que estarás afectando su seguridad y confianza. Dales la libertad de equivocase y de afrontar las consecuencias de sus decisiones ya sean buenas o malas.
Sí les dices “tú puedes” los estarás enseñando que son capaces de lograr sus objetivos al intentarlo una y otra vez.
Además, les estarás dejando una lección de vida al aprender que se deben esforzar para obtener lo que quieren. En este punto es importante la supervisión constante de los padres, ya que los niños pueden exponerse a peligros graves.
5. ¡Piensa bien, antes de actuar!
Invita a tus hijos a pensar lo que puede suceder antes de que tomen decisiones; es como jugar a la máquina del tiempo para que ellos logren comprender qué peligros pueden enfrentar antes de hacer cualquier cosa.
Por ejemplo: si tus hijos quieren trepar a ese árbol entonces sugiere poner una colchoneta debajo del árbol para amortiguar las caídas. Es una buena oportunidad para que ellos piensen en soluciones o para que tengan mejores ideas para hacer las cosas que quieren sin arriesgarse.
Para que los hijos tengan una buena autoestima es importante dejarlos aprender de sus errores, dejarlos tomar sus decisiones y escucharlos con atención. Muchas veces los padres aprendemos más de sus mentes elocuentes e inmaduras, que con nuestras propias experiencias de vida.
Todo es cuestión de cuidarlos, orientarlos y no dejarlos solos, así podrás ayudarlos a comprender y analizar cada situación.