¿Temor a jubilarte? disfruta de un nuevo respiro
jubilarse es la oportunidad que da la vida de volver a vivir pero de una manera más placentera. Lee este artículo y re-descubre la magia de la vida.
Erika Otero Romero
La edad de jubilación difiere mucho de país a país, lo que no cambia es cómo las personas se sienten al llegar a esa edad. Algunos hombres y mujeres ven el fin de su vida laboral como un descanso merecido después de haber dado a una empresa o compañía muchos años de servicio. Sin embargo, hay muchos otros que se deprimen y empiezan a sentirse mal consigo mismos, precisamente por eso, porque dejan de sentirse “útiles”.
Pensionarse supone un gran cambio en la vida de un ser humano. Se pasa de estar acostumbrado a un horario establecido por muchos años, lo que supone pasar de una rutina diaria, a estar en casa a la espera de “algo” y del pago mensual que viene tras muchos años de “ganarse el pan con el sudor de su frente”.
El gran problema de las personas que llegan a la edad de jubilación, es que se abandonan a sí mismas. No siempre ocurre, pero cuando pasa es por un periodo de tiempo corto. La dificultad radica cuando ese tiempo libre no se usa más que para “dejarse morir” frente al televisor.
Por esa razón acá te presento algunas ideas de lo que puedes hacer en el momento de pensionarte para no sucumbir ante el tedio de la monotonía.
1. Dedica tiempo a tu cuidado personal
Años y años de estar frente a una máquina o un escritorio pueden haberte dejado con algunas molestias corporales. Ve al médico y practícate un chequeo. Quizá te hicieron uno antes de salir de tu trabajo, pero no está de más que te realices otro resto de exámenes complementarios para cerciorarte que todo está a las mil maravillas con tu organismo.
2. Come de manera sana
Quizá por estar trabajando no comiste lo que debías y con el tiempo que dan al mediodía las grandes compañías o fábricas, ¿cómo comer un buen plato? Bien, ahora es el tiempo, empieza por desayunar con frutas o cereales y hazlo con calma, ya no hay apuro por salir a tiempo al trabajo. Come también de manera adecuada durante el día.
3. Haz ejercicio
No te dediques solo a comer, también es justo contigo mismo que dediques un poco de tu tiempo diario a salir a caminar, nadar o montar bicicleta con el único fin de respirar aire puro. Invita a tu cónyuge a que se ejercite contigo.
4. Alimenta tu mente
Haz lo que siempre quisiste; entre pintar, leer, escribir tus memorias para tus hijos y nietos, o lo que sea que siempre quisiste hacer y no hiciste por falta de tiempo o dinero, ahora puedes hacerlo y si es en compañía, mejor.
5. Ama a tu pareja
Ahora sí hay tiempo y no hay excusas. Ir de paseo un fin de semana a algún lugar para renovar la relación, hacer actividades de interés mutuo, salir en citas como cuando eran novios o un matrimonio joven; créeme, tu compañero te agradecerá salir de la monotonía.
6. Disfruta del resto de tu familia
Tus hijos y si tienes nietos, te van a agradecer que compartas tiempo y grandes momentos con ellos, y por qué no, de vez en cuando un helado, frituras y películas como cuando eras un niño.
7. Reinvéntate laboralmente
Si no toleras estar sin hacer nada, pues una buena opción es poner un negocio (tienda, bazar, ferretería, etc.) no solo servirá para que te sientas activo, sino además ganarás algo de dinero extra.
Jubilarse no tiene por qué ser una época de completa pasividad, por el contrario, es un momento de la vida donde la misma existencia te da la oportunidad de reivindicarte contigo mismo y con los tuyos, para así sacar provecho de todo lo que no pudiste hacer estando más joven.
Erika Otero Romero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
