¿Tu hijo adolescente te enfrentó? Cómo calmar la rebeldía
La rebeldía de los adolescentes solo es una etapa en la vida, la cual los padres deben estar aletas para evitar tragedias familiares. Aprende a controlar una pelea entre padres e hijos.
Adriana Acosta Bujan
Todos fuimos adolescentes alguna vez; es una etapa de muchos cambios hormonales, donde se busca la independencia e identidad. ¿Cuántas veces recuerdas haber discutido con tus padres? Es algo muy común que los hijos a esa edad no compartan las mismas ideas de los padres.
Cuando un hijo se enfrenta con los padres y pierde el control de sus emociones, toda la familia se ve afectada, generando un ambiente hostil y negativo (lo digo por experiencia). Se debe tener cuidado, como son adolescentes son más propensos a buscar en otro lugar la comprensión y el supuesto amor que los padres no le ofrecen.
Algunos de los adolescentes desean vivir lejos de casa, buscan refugio con los vicios y lo peor es que se deprimen en demasía, que hasta atentan contra su propia vida. Hace unos años un amigo de mi hijo se suicidó, por no ser capaz de enfrentar sus problemas. Así que es de suma importancia que los padres aprendan a calmar la rebeldía de sus hijos para evitar tragedias familiares.
¿Qué hacer?
Piensa sí el problema merece tu atención
¿Has notado que tu hijo se comporta siempre a la defensiva, que todos los consejos que le brindas, para él son solo regaños? Es importante, poder identificar la gravedad de los problemas o comportamientos de los hijos. En algunos casos es mejor no generar una discusión y no llevarla la contraria sobre su estilo de vida.
Si tu hijo decide vestir diferente o pintarse el cabello de rosa, es porque está buscando su identidad. Son solo modas que a lo mejor por tus valores conservadores crees que son malos.
Para esos casos lo recomendable es aceptar su estilo de vida, en vez de generar una discusión abrir la puerta al dialogo, ¿Por qué lo hace?, ¿Qué siente?, dedica tiempo para conocer a los amigos de tu hijo y comprenderás algunas situaciones.
¡La pelea es inevitable!
¡Tu hijo ha rebasado los límites, ha puesto en riesgo su propia seguridad, su rebeldía afecta a la familia y es importante que entre en razón?
1. Usar la razón y calmarse
Los padres deben ser los primeros en mantener la cordura ante un enfrentamiento, nada bueno ganarán si los padres e hijos se enfrentan. Deja pasar su falta solo por un tiempo razonable, invítalo al dialogo después que se hayan calmado.
¡Nunca inicies con reclamos! Comienza por que él entienda tu preocupación y el amor que le tienes, explícale las causas, consecuencias y los porqués que sus acciones afectan a la familia.
2. No llevar la contraria pero ser firmes
Deja que tu hijo se exprese, que explique las razones de su comportamiento, aprende a escuchar sin llevarle la contraria, crea un espacio de comprensión y entendimiento. Después de ello, es tu turno y expresa lo que sientes, tus preocupaciones y miedos. Establezcan reglas en conjunto y y solucionen los conflictos? Deja que él tome las decisiones y enfrente las consecuencias de sus actos.
3. No invadas su intimidad
Deja de espiar a tu hijo, no lo acorrales y trates de controlar su vida. Explícale que de ninguna manera invadirás su intimidad, que él es un adolescente capaz de comprender e identificar lo bueno y lo malo. Establece reglas y crea un lazo de confianza, deja que tu hijo sepa que confía en ti y que sí rompe la confianza que le has depositado dejaras de darle ciertas libertades.
4. Motiva a tus hijos
Si crees que su estilo de vida y sus comportamientos afectarán su salud y estabilidad emocional, es tiempo de compartir tiempo de calidad; involúcrate en las cosas que le gusta hacer, inscríbelo a un deporte o actividad artística, sácalo de su zona de confort y experimenten nuevas experiencias y conocimientos de vida. En pocas palabras hagan cosas diferentes para distraer su atención.
No olvides la motivación y darle una recompensa por sus buenas acciones.
5. Castiga justamente
Los castigos han cambiado con los años, los padres educaban a sus hijos a golpes, ahora ya no es recomendable, es importante que tu hijo conozca los castigos que deberá cumplir antes de que inventes alguno que con el enfado pueda ser injusto. Es importante que los castigos sean efectivos y vigilar que sean cumplidos.
De esa manera tu hijo sabrá que eres firme en tus decisiones y tendrá precaución al realizar una falta.
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Cuando los hijos comienzan a enfrentar las consecuencias de sus actos y decisiones, maduran. Es solo una etapa en su vida, llegará el momento que ellos comprendan que toda su rebeldía era en busca de su propia identidad. Con amor, dialogo, respeto y firmeza, tus hijos aprenderán a cuidarse y a controlar sus emociones.
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Adriana Acosta Bujan
Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.
