Tu sonrisa es embajador de tu persona. Conoce al ángel que puede cuidarla
Dicen que el mejor accesorio de una mujer es su sonrisa, yo agregaría que de los hombres, ancianos y niños, también.
Yordy Giraldo
Tengo amistades odontólogas o —lo que es lo mismo— dentistas. Y debo confesar que yo imaginaba que su profesión sería la típica a la que nunca le faltarían clientes. Es más: creía yo que todos los dentistas debían tener muchísimo dinero. Lo cierto es que no es así.
Pasa que en ocasiones escasean sobremanera los pacientes, aun cuando tienen facilidades de pago, y personas con problemas bucales hay —y muchas—. Sin embargo tenemos las tarjetas saturadas de compras a meses sin intereses, de pagos de locos fines de semana o vacaciones que quizá no debimos haber tomado en ese momento, pero si se trata de la salud de nuestros dientes, creemos que no es algo urgente. Es más: algunos estamos dispuestos a sacrificar nuestras piezas con tal de no invertir en ellas.
Estoy de acuerdo que no son baratos, a veces he pensado: “Caramba es sólo un diente, no estoy dando enganche por auto nuevo”. Pero lo cierto es que mis dientes deberían ser más valiosos que un auto nuevo.
Los dientes son los encargados de triturar los alimentos y que puedan ser correctamente procesados, ayudan cuando hablamos puesto que permiten articular sonidos, y además son los encargados de mantener la posición de la piel de nuestro rostro. ¿Has visto cómo se ve toda arrugada una cara sin dientes?
La salud de nuestra boca es realmente fácil de mantener (solo necesitas pasta dental, un cepillo y disciplina: mucha disciplina) y, sin embargo es de las más descuidadas y —lo que es peor— casi siempre es por pura desidia. El secreto de una buena dentadura se resume en tener una buena higiene dental. Por supuesto que hay unos pocos aspectos más pero, si cumples con la limpieza, estás casi del otro lado.
Sin embargo no quiero decirte cómo mantener tu boca sana, o más bien no quiero ahondar en ello, porque de hecho ya acabo de decirte cómo hacerlo. Quiero más que nada darte algunos argumentos de por qué debes mantener tus dientes limpios.
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Hay evidencia médica de que existe relación entre las infecciones periodontales, es decir, infección en las encías y dientes, y las enfermedades cardiovasculares.
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Las afecciones bucales en mujeres embarazadas, pueden provocar trabajo de parto anticipado, bebé con bajo peso, tumores conocidos como granulomas piogénicos, o incluso abortos espontáneos.
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Las enfermedades de las encías que no son tratadas pueden llegar a provocar arterioesclerosis silenciosa. Éstas, a su vez, pueden causar complicaciones de procesos diabéticos, artritis, accidentes cerebro-basculares, entre otros.
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Las caries no tratadas pueden provocar trastornos gastrointestinales y neurológicos.
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Las personas que no tienen dientes o no tienen todos sus dientes no aprovechan todos los beneficios de los alimentos.
Como verás, la dentadura va mucho más allá de tener una hermosa sonrisa. Incluye 32 piezas divididas en incisivos, caninos, premolares y molares, y muchos, muchos más beneficios médicos que con un poco de “colmillo”, cepillo y pasta, evitarás que te pasen factura. Relacionado con este tema, te invito a leer estos artículos.
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