Un examen de rutina le anuncia un ULTRA embarazo, con los meses esta noticia se convirtió en su peor pesadilla
“Felicidades, estás ULTRA embarazada”, le dijo la ginecóloga, lo que descubre después se convierte en un "calvario".
Mariel Reimann
Todo comenzó hace unos años atrás cuando Arachely Opazo, recibió lo que para muchas mujeres sería la mejor noticia de su vida, estar ultra embarazada, pero en este caso, no se trataba de un súper embarazo, sino de una de las enfermedades más temibles.
Opazo fue en una visita de rutina a su ginecóloga para hacerse un Papanicolaou, y también por que sus períodos estaban siendo cortos y escasos, también sentía nauseas y mareos; los típicos síntomas del embarazo.
Al persistir estos síntomas ella regresó a la ginecóloga para que le dé una orden para realizarse un examen de sangre Beta que determinara la presencia o no de la HCG u hormona del embarazo, como muchos la conocen.
El resultado fue de 56.727.40
De acuerdo con Pregnancy Birth & Baby, los niveles normales de HCG en el embarazo en las primeras 3 semanas es de entre 5 y 50 unidades internacionales, a las 4 semanas es de entre 50 y 500. Y la hormona sigue duplicándose a medida de que el embarazo avanza, alcanzando los 200.000 a las 18 semanas de gestación.
En el caso de Arachely, su resultado indicaría un embarazo de unas 10 semanas.
“Casi muero con mis 46 años y dos hijas, una de 11 y la mayor de 16”, compartió Opazo.
Piden un ultrasonido para confirmarlo y allí comienza la pesadilla
No había ningún embrión en su útero. Lo que sí encontraron fue un tumor uterino vascularizado, que es compatible con la enfermedad conocida como Trofoblástica Gestacional.
“Comenzó el calvario”
Así describe lo que siguió luego del primer diagnóstico de estar ultra embarazada a tener un tumor en su útero.
Qué es la Trofoblástica Gestacional
De acuerdo con Medline Plus esta enfermedad es un “grupo de tumores dentro del útero de una mujer. Las células anormales empiezan en el tejido que normalmente se convertiría en la placenta”.
Hay varios tipos de esta enfermedad, está la cariocarcinoma (el tipo cancerígeno) o la Mola Hidatiforme, al que también se lo conoce como embarazo molar.
Qué pasa luego del diagnóstico
En el caso de Arachely, ella fue enviada al hospital a que le hicieran una aspiración, aunque ella “aún no entendía nada”. Aparentemente todo había quedado bajo control, pero días más tarde un sangrado vaginal la lleva a la sala de emergencia y a un legrado o raspaje.
Allí es cuando descubren que se trata de un cáncer y que debe comenzar quimioterapia para tener una oportunidad de salvar su vida. En su caso, la placenta que contenía las células cancerígenas provocaron la aparición de nódulos en sus pulmones y la quimo la ayudaría a reducirlos o a unificarlos.
“Todo se volvió negros, pasó mi vida, mis hijas, mi esposo, mis padres, toda mi vida en un segundo”
El médico se despidió y le dijo que se verían, quizás sin saber lo que estaba pasando por dentro de la mente de esta madre, hija y esposa. Las sesiones de quimioterapia comenzaron, las nauseas, vómitos, mareos y debilidad.
“Estoy agradecida a Dios por el hombre que está a mi lado. Él es creyente de alma y siempre me daba ánimo y paciencia, me decía ‘tranquila esto pasará y nuestra vida seguirá lo más normal posible'”.
“Fueron los peores días, mi Carlos se encargaba de todo, de mis hijas, la casa, las compras, el negocio, todo y mi madre le ayudaba”
Por qué a mí
Una de las preguntas que todos nos hacemos cuando algo malo nos pasa en la vida. Arachely se daba fuerzas a sí misma diciéndose que había gente en peores estados que salen de algo situaciones como estas.
La caída del pelo
Para quienes no sufren de cáncer a lo mejor la caída del pelo es algo trivial, pero para alguien con una vida por delante que pensó que estaba embarazada y luego prácticamente recibe una ‘sentencia de muerte’; la caída de pelo es algo más que se pierde en la lucha y duele.
“Cómo le digo a mis hijas, ellas de pelo crespo y muy largo. Pero al final resultó más fácil de lo esperado”
Para sus hijas era sólo pelo que se le caería y luego crecería y eso la ayudó. Allí comenzó a usar turbantes de diferentes colores y estilos para sentirse bonita en medio de tanto dolor.
Lo mejor de todo
Opazo hizo las mejores amigas en sus tratamientos de quimo, entre ellas se daban fuerzas, le ayudaron a no sentirse una víctima. Se dio cuenta que en realidad era la mujer más afortunada del mundo por que tenía al mejor esposo y a las mejores hijas. Aprendió a ser más fuerte y a dejar que sólo la almohada y la ducha fueran testigos de sus lágrimas, por que sus seres queridos, sólo necesitaban saber que ella era fuerte y que aún tenía fuerzas.
Aunque sus miedos hacían sombra a su fortaleza, ella siguió luchando.
Hoy Arachely sólo va a controles rutinarios y su mensaje para otras mujeres es: “Que es feliz, que hay que tener actitud y mucha paciencia ya que pareciera que esto no termina, pero no es así, esta enfermedad termina y me siento bendecida”.
“Mi familia es mi mejor medicina”.
Posibles síntomas que no puedes ignorar y ante su presencia debes consultar con tu médico:
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Períodos escasos, irregulares o ausentes
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Nauseas, vómitos
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Fatiga
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Sangrado inusual
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Dolores pélvicos o calambres fuertes antes de los períodos
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