Un gol de arco a arco a la enfermedad crónica
Este artículo pretende ser una guía para ayudar a aquellas personas, y sus familias, que padecen una enfermedad crónica y poder sobrellevarla, en aras de una mejor calidad de vida.
Marta Martínez Aguirre
Nos hallamos en la época de las enfermedades crónicas. Alcoholismo, tabaquismo, hipertensión arterial, diabetes, obesidad, cáncer, sedentarismo, son algunas de estas patologías, todas prevenibles de reducirse los factores de riesgo. Si bien en las últimas décadas se ha incrementado la esperanza de vida de ciertos padecimientos, convivir con una enfermedad crónica plantea retos y desafíos que no todas las personas saben bien cómo afrontar.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), en un reporte del año 2013, las enfermedades crónicas o conocidas como enfermedades no transmisibles (ENT) cobran la vida de más de 36 millones de personas cada año. Y Las vidas de Zahida, Roberto, Malri y Noemia son un claro ejemplo de cómo la aparición de una enfermedad crónica puede impactar a quien la padece, y atravesar la vida de sus familiares. La familia es la que ejerce un papel crucial en el cuidado y sostén del paciente crónico. El que la padece y el entorno deben reestructurarse en cuanto a roles y actividades, que no siempre son bien aceptados, ya sea por el golpe de la noticia como por los cambios y ajustes que hay que habilitar.
Afrontar una enfermedad crónica involucra a todo el núcleo familiar, pero también a amigos, maestros, líderes religiosos, profesores, compañeros de trabajo y todos aquellos que están alrededor de quien padece la enfermedad. Todos deben y pueden colaborar con entrega, ternura y lealtad, a fin de sostener y sobrellevar la dolencia.
Veamos algunas formas que posibilitan llevar adelante la situación una vez diagnosticada la enfermedad:
Busca apoyo psicosocial
Esto va a permitir, a ti y a tus familiares, a examinar y sobrellevar tus reacciones ante la noticia. En especial cuando se trata de una patología que puede llegar a ser discapacitante o afectar la salud al punto de generar cambios inesperados en la vida cotidiana. Desde la noticia inicial a la aceptación muchos pasan por etapas de angustia, de negación o incluso llegan a desear quitarse la vida. Tal vez seas de las personas que no se darán por vencidas, pero tal vez hagas caso omiso a muchas limitaciones, negando así la nueva realidad. Por todo ello contar con un equipo de sostén psicosocial es necesario y decisivo.
Conoce los detalles de la enfermedad, su evolución y pronóstico
Entender la enfermedad, los cambios, las secuelas y todo el proceso que pueda significar son factores resultantes de este conocimiento. Es útil, para ello, escribir lo que los profesionales tratantes te comuniquen; de este modo, saber los detalles del curso de la enfermedad y las medidas aconsejables a tener en cuenta permitirán no llevarte sorpresas y caer en la desolación ante los síntomas ignorados que pudieran surgir.
Responde de una forma proactiva más allá del impacto
a) Escoge un aspecto o comportamiento no saludable
b) Escribe la meta, especifica los pasos y el tiempo que le vas a dedicar,
c) Elabora un plan alternativo,
d) Confía en ti
e) Haz un seguimiento
que te esté dañando y que te daría un mejor control de tu enfermedad. Por ejemplo, podrías decidir comer sin sal, incorporar vegetales a tu dieta, dejar de fumar, o tal vez hacer ejercicio.
b) Escribe la meta, especifica los pasos y el tiempo que le vas a dedicar,“Hoy comienzo a caminar de mi casa a la parada del autobús, y lo haré de lunes a viernes”, por ejemplo.
c) Elabora un plan alternativo,que te dará opción de continuar con tus metas, ya que puedes prever inconvenientes o situaciones que te impidan continuar con el ritmo de tu plan, “¿Si llueve, qué opciones tengo en mi plan de caminar?”
d) Confía en ti, cada día checa tu nivel de confianza en ti misma, y si no te sientes confiada, revisa tu meta y ajústala a un plan más realista.
e) Haz un seguimiento.En tu visita al profesional de la salud que te asiste cuéntale sobre tus logros, y comunícale tus dificultades para llevar a cabo el tratamiento.
Libera tus emociones
Es duro recibir una noticia inesperada de este tipo; algo sano, a este respecto, es permitirte liberar tus emociones, y las lágrimas constituyen una excelente válvula de escape de tensiones. Mira lo que dice con sabiduría Yordanka Pérez “
em,Las lágrimas son la forma que tiene nuestro cuerpo de limpiarse de dentro hacia afuera”.
Aférrate al optimismo
Como dice un proverbio del rey Salomón, “El corazón alegre constituye un buen remedio; mas el espíritu triste seca los huesos” (Proverbios 17:22). Hay diversas investigaciones que vinculan un estado de ánimo adecuado con el mejoramiento y un estilo de vida saludable; por ejemplo, el que la música ayude a liberar el estrés. No estoy diciendo que no tomes en serio la enfermedad, sino que evites el pesimismo y el espíritu de derrota.
Realiza actividades placenteras en familia
Esto va de la mano con la sugerencia anterior, pero posee un ingrediente sumamente reparador, las actividades agradables en familia no solo mejoran la comunicación intrafamiliar, sino que reducen los niveles de estrés y potencian tus ganas de superarte cada día.
Busca aliados, y retroalimenta a otros en las mismas condiciones
Tal vez piensas que nada tienes para dar; sin embargo, posees mucho para compartir, quizás puedes relatar tus experiencias y logros en un blog o en la red social, y puedes aprender de otras personas que saben por lo que estás pasando; existen muchos grupos de autoayuda que pueden apoyarte y en los que puedes involucrarte y sostener a otros.
En Uruguay, el país en que vivo, el futbol es una gran pasión. En un partido, el árbitro puede expulsar al jugador que viola una regla. He visto juegos en los que un equipo se ha quedado con siete hombres. Paradójicamente, en vez de darse por vencidos, dichos jugadores pelean hasta el último minuto, llegando incluso a ganar el partido. La enfermedad crónica puede ser un juez implacable, y pretender dejarte indefensa, pero tú puedes seguir jugando el partido de tu vida y animarte a hacerle un gol de arco a arco.