Un vuelo con niños: ¿Y dónde está el piloto?

Para muchos viajar es algo normal o muy divertido, pero cuando viajas con niños la cosa cambia. Te invito a leer estas recomendaciones que me resultaron muy útiles en mis años de mamá joven.

Emma E. Sánchez

Vamos a imaginar que pronto viajarás sola en avión con dos o más niños pequeños. Eres responsable de ellos 100 por ciento, así como de no causar malestar o conflictos a los pasajeros. Un vuelo con niños: ¿Y dónde está el piloto?Así que vamos a trabajar para que tu viaje sea seguro, placentero y constituya una gran experiencia para toda la familia:

1. Políticas de la aerolínea

Al momento de la compra de los boletos debes declarar la edad de tus niños. Algunas aerolíneas NO permiten que viajes con más de tres niños, pues en caso de accidente, lo más probable es que nadie te pueda auxiliar con ellos, y solo tú deberás hacerte cargo; por eso es importante que en ventanilla digas las edades de tus hijos y solicites toda la información necesaria y reglamentos de la empresa.

Sugerencia: Por lo regular el mismo vendedor te hará saber las recomendaciones sobre los lugares más seguros para ti y para tus hijos, no te ofendas por ello, ten en cuenta que es por la seguridad de todos los pasajeros, de ti y PRINCIPALMENTE de tus niños. Si por alguna razón te dan a escoger los lugares, prefiere aquellos cercanos a alguna puerta de emergencia o donde puedas ubicar a tus hijos de la ventanilla hacia el pasillo: tú te sentarás al final, del lado del pasillo, para desde ahí tener control, cuidando que los menores no se salgan de ese espacio -a menos de que sea estrictamente necesario- y provoquen problemas.

2. Preparación previa en casa

Habla siempre de manera positiva tanto del vuelo como del viaje en sí. No con miedo, porque si tú misma lo tienes o te muestras nerviosa, en lo que digas estarás transmitiendo temor en los niños, lo que puede desencadenar una situación difícil en el avión, por ejemplo, en caso de turbulencia.

Da pequeñas lecciones a tus hijos sobre aviones: cómo funcionan, sus diferentes modelos y tipos, etcétera, y luego habla de las reglas que se deben seguir en el avión, así como aquellas de seguridad que hayas establecido para salidas familiares. Haz que tus niños, según sus edades, memoricen su nombre completo, edad y nombres de sus padres. Recuérdales que no deben soltar tu mano y que deben seguir TODAS tus instrucciones. ¡Tú eres el líder de la esa tropa! De modo que hazlo divertido.

Prepara el siguiente material: hojas para colorear, no libros; solo hojas o con actividades y algunas crayolas, con ejercicios impresos para escribir, si tus niños están en edad preescolar. No lleves tijeras o pegamento, prefiere actividades con estampas adhesivas (stickers).

3. Haz maletas

Piensa que tus manos estarán ocupadas, y si llevas bebé tu pecho también lo estará, por lo que una maleta en la espalda es la mejor opción. No lleves ropa de más, solo lo estrictamente indispensable y, si algo te hace falta, lo podrás solucionar después o adaptarte; no apartes de tu mente que lo más importante es tu seguridad y la de tus niños:

• Lleva una maleta a la espalda, y que tus pequeños lleven otra igual, donde carguen sus actividades y algunos bocadillos, NADA DE LÍQUIDOS, ni dulces pequeños, ni galletas de chocolate; son buena opción los CEREALES que acostumbres. No lleves nada que necesite refrigeración o preparación en el vuelo; inclusive, puedes llevar una o dos mamilas ya preparadas, pero no más.

• Evita llevar carriola, y si decides lo contario avisa al personal de la aerolínea. Las carriolas se recomiendan cuando vas a hacer trayectos muy largos en los aeropuertos, así que no la utilices a menos de que sea indispensable.

• Marca tus maletas con algo que las identifique aun a la distancia: un gran moño, un dibujo, algo que te ahorre tiempo buscándolas y te robe la atención de cuidar a tus pequeños. No escatimes en pedir ayuda a algún maletero. Eres una gran mujer, fuerte y capaz, pero ¡hasta Batman necesita la ayuda de Robin!

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4. Durante el vuelo

Preséntate con la asistente de vuelo, quien debe estar consciente de que viajas con niños. Normalmente, los más vulnerables abordan y bajan primero; esta es una buena medida. No te molestes y acepta la ayuda cuando te la ofrezca alguien de la tripulación o los pasajeros ya en el vuelo, nunca antes o de algún desconocido en el aeropuerto.

No les des a los niños las actividades en cuanto se sienten, más bien platica con ellos, explícales lo que está sucediendo; tal vez la azafata los invite a ir a la cabina y el conocer al piloto; posteriormente, incentívalos a que duerman. Sí se inquietan, busca satisfacer sus necesidades, no vayas al baño sin avisar a la asistente de vuelo para que vigile a los niños durante tu ausencia y no permitas que nadie más que tú misma los lleve al baño.

Si tienes amenaza de berrinche, ¡no lo permitas! No temas aplicar una consecuencia y nunca, bajo ninguna circunstancia, dejes que molesten a los pasajeros. La autoridad con los niños se gana en casa, y si no la tienes desarrollada no pretendas ganarla durante el vuelo. Los niños pueden ser molestos, pero los adultos llegan a serlo aún más.

5. En el aeropuerto

Haz, siempre que sea posible, arreglos para que alguien te recoja y te ayude a la brevedad, y no olvides las medidas de seguridad en ningún momento. Si vas a viajar acompañada de otro adulto, verifica que entienda y utilice las mismas reglas de seguridad que has establecido con tus hijos; habla con claridad sobre la ayuda que requieres, y sé específica al solicitarla.

Si educas a tus hijos en disciplina y orden diariamente en casa, viajar será agradable, porque sabrán comportarse correctamente. ¿Qué te parece hoy comenzar a planear tu próximo viaje?

Emma E. Sánchez

Pedagoga y Terapista familiar y de pareja. Casada y madre de tres hijas adultas. Enamorada de la Educación y la Literatura. Escribir sobre los temas familiares para ayudar a otros es mi mejor experiencia de vida.