Una mamá quitó el maquillaje de las muñecas de sus hijas y el resultado fue increíble
Un juguete nunca debe darse a un niño con ligereza, pues mediante el juego y los juguetes se construye una mente y una sociedad. Lo que llega a manos del pequeño debe sumar a su crecimiento y desarrollo integral.
Emma E. Sánchez
Mi suegra tiene poco más de 85 años y, al platicar sobre su infancia, ella recuerda con cariño sus juegos y el tiempo que pasaba correteando con amigos y mascotas. Ella dice que recuerda haber tenido una muñeca muy bonita que su papá le regaló tras verla jugar cargando entre sus brazos un bebé hecho de piedras envueltas con una tela.
Ella dice que lo que le gustaba era cargar un bebé y sentir “su peso” entre sus brazos y que la linda muñeca que le regalaron era una niña ya grande y con largos rizos, a ella simplemente no le gustó: no era un bebé y no pesaba nada. Así que la dejó en un rincón y siguió jugando a llevar un bebé en sus brazos.
Como pedagoga, desde que escuché esta sencilla historia me encantó, pues resume esa imagen que como padres muchos hemos visto: el niño prefiere la caja sobre el bello juguete que contenía. El niño prefiere aquello que satisface su deseo de crear, imaginar, inventar, ser y sentir, no lo que le obliga a jugar únicamente de cierta manera.
Los juegos y juguetes en la formación del niño
Un juguete es un instrumento para que el niño aprenda y entienda cómo es el mundo donde vive, con éste practica y conforma la manera en la que él se desenvolverá y conducirá en esa sociedad. El juguete, por lo tanto, moldea la mente de quien lo usa.
Hace un tiempo, la reconocida página Newsner publicó un pequeño video que relata la historia de una joven madre que gusta de las muñecas y que, al volverse madre, tuvo el deseo de restaurar las muñecas dañadas que se encontraban a su paso.
Al comenzar su proyecto, se dio cuenta que las muñecas más populares dirigidas para las niñas estaban maquilladas y ataviadas demasiado sexy y hasta provocativas, con ropa que dejaba “muy poco a la imaginación” y comenzó a desmaquillarlas como parte de esa “restauración”.
El resultado fueron muñecas que lucen y visten como cualquier niña que gusta de correr, saltar y trepar árboles, en pocas palabras, de niñas que se divierten como cualquier niña debería hacerlo en su infancia y no viviendo una vida hipersexualizada.
Sobre el tema de los juguetes y su influencia en el desarrollo de los niños, la BBC publicó un artículo muy interesante donde sostiene que el tipo de juguetes que usa un niño influirá drásticamente en la elección de la profesión que tendrá en el futuro.
Según la publicación del estudio “El mundo de las mujeres en 2010”, presentado por el Departamento de Economía y Asuntos Sociales de la ONU, los hombres siguen superando a las mujeres en los campos de la ciencia, la construcción, la ingeniería, las matemáticas y la agricultura, y todo esto porque desde pequeñas los juguetes que se les proporcionan están orientados al cuidado de otros y no a la acción; por ejemplo, a las niñas se les dan trastecitos para que preparen comida y a los niños juegos de construcción.
Recomendaciones para elegir juguetes para tus hijos
Si estás pensando en comprar un juguete para tus hijos o cualquier otro niño, considera estas sencillas recomendaciones:
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No compres juguetes con la idea de “juguetes para niñas” o “para niños”.
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Prefiere poner al alcance de los niños juegos de construcción a juguetes de armado.
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Promueve el desarrollo de talentos, por ejemplo, con instrumentos musicales.
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Balones, cuerdas, pinturas y herramientas diversas estimularán su creatividad.
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Regala libros y cuentos según su edad.
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Finalmente, no satures a los niños con juguetes y favorece todo aquello que le haga moverse, correr o disfrutar al aire libre, aquello que estimule su creatividad e imaginación.
Emma E. Sánchez
Pedagoga y Terapista familiar y de pareja. Casada y madre de tres hijas adultas. Enamorada de la Educación y la Literatura. Escribir sobre los temas familiares para ayudar a otros es mi mejor experiencia de vida.
