Vacaciones ¿terror de las madres?
¿Las vacaciones deben ser un periodo de estrés para las madres? ¡No! Pueden ser el momento perfecto para ayudar a los hijos a desarrollar hábitos positivos y acercarse más a mamá.
Marilú Ochoa Méndez
A veces, los padres vivimos en piloto automático. Llegan los niños, y a la edad convenida los enviamos al kinder y luego a la educación primaria. Compramos sus libros y confiamos en la escuela para que los eduque como “buenos hombres y mujeres”. Mientras ellos están en el colegio, trabajamos o atendemos la casa, a veces sin vivir el instante como algo valioso, sino como algo necesario. Si estamos inmersos en esta dinámica de vida, es común que las vacaciones nos causen terror a las madres: ¿Dónde quedará ahora nuestro tiempo? ¿Cómo podremos recoger, ordenar, limpiar y además atender a los niños? ¿Qué hacer para que no se la pasen todo el día en la televisión, con videojuegos o frente a la computadora?
Por qué no debes “asustarte” por las vacaciones
Las vacaciones son un excelente momento para que –al salir de la rutina- dejemos de ser autómatas y consigamos autodirigir cada pequeña decisión que tomamos. Un tiempo para ser conscientes de la enorme trascendencia que cada elección trae consigo, en especial en lo que toca a la educación de nuestros hijos.
Piensa que esta temporada es el tiempo ideal para reforzar los lazos con tus hijos, trabajar los valores de la cooperación y solidaridad familiar y aprender a divertirse juntos. Recuerda que el tiempo que pases con ellos, más que lo que puedas comprarles o pagar para que se les enseñe, es lo que quedará grabado en sus corazones.
Cómo hacer de tus vacaciones una experiencia “cero estrés”
1. Plenea las vaciones con tus hijos
Siéntate con tus hijos y pregúntales qué se les antoja hacer, te sorprenderás de sus ideas creativas
2. Diseña actividades diversas
Busca cada día hacer “un poco de todo”: recoger y embellecer tu casa, actividades manuales, salidas a parques o museos. Planea incluso momentos de descanso y, ¿por qué no? hasta un rato de televisión o de cine en casa.
3. Estar en casa puede ser divertido
Haz divertidos los momentos de apoyo en el hogar. ¿Se les antoja limpiar los cristales? ¡Que lo hagan! ¿Por qué no hacerlo en traje de baño y terminar con unos cuantos cubetazos de agua que los refresquen y luego les lleven derechito a bañarse?
4. Juegos de mesa
Los juegos de mesa crean un excelente momento para convivir. Sentados todos al mismo nivel pueden generarse pláticas y muy ricos momentos para compartir. Además, existen muchos juegos de mesa para todas las edades, que se pueden aprovechar.
5. Regula el uso de las “pantallas”
Asegúrate de haber establecido con tus hijos criterios claros para el uso de la televisión, computadoras y tablets. Si está establecido el tiempo permitido para su uso, cuentas con aplicaciones y/o programas aprobados, te evitarás muchos dolores de cabeza. Además, así tendrás tú el tiempo para poner lavadoras, hacer la comida o simplemente disfrutar viéndolos aprender y entretenerse.
Date un tiempo para cada uno de tus hijo. Es común que el tiempo de vacaciones haya menos estrés, menos citas por la tarde y menos correteo. Aparta tiempo para pasarlo con cada uno de tus hijos, todos los día. Te aseguro que tus hijos disfrutarán mucho poder compartir un momento exclusivo contigo, en privado.