6 errores de crianza que seguro no cometerás con tus hijos
¿Consideras que la forma en la que te criaron tus padres fue la correcta? ¿le cambiaras algo? si así es acá te dejo 6 errores en la crianza que tus padres quizá cometieron contigo y seguro no repetirás con tus hij
Erika Otero Romero
La crianza de los niños de hoy no es para nada similar a la de hace 10 años atrás y muy probablemente no se parece a la que te dieron a ti. No es mala, no es buena, solo diferente. Pero no solo con el paso del tiempo la educación de los hijos cambia, sino también con la idiosincrasia de cada familia y la cultura del país en el que se viva.
Una historia familiar
Recuerdo a mi abuela contar que cuando ella estudiaba en la escuela, los padres les permitían a los profesores reprender con castigos físicos a los alumnos cuando el niño les desobedecía o no llevaban una tarea o ante cualquier otra falta, y pues desde luego, las cosas no eran muy diferentes en el hogar. Mi abuela debía ayudar con el cuidado de sus hermanos más pequeños y con las labores del hogar, así que ni pensar en ir compartir con amigos y jugar en las calles del pueblo.
El caso de mi madre fue diferente. Ella tiene 6 hermanos y en su infancia, eran ellos sus compañeros de juego además de los niños de la cuadra, jugaba con ellos cada que mis abuelos se lo permitían. Sin embargo, si cometía una falta o se peleaba con sus hermanos, las reprimendas físicas no se hacían esperar. También debía ayudar en casa con algunos quehaceres y no tenía ni una excusa para ir mal en la escuela. Pero fue una infancia diferente a la de mi abuela, con menos responsabilidades de adultos.
En cuanto a mí, puedo y debo decir que pude disfrutar de largas temporadas vacacionales y juegos con los vecinitos de la cuadra, cosas inimaginables para mis abuelos o mi madre. El castigo físico en la escuela estaba abolido. Al igual que mi madre e incluso mi padre, también recibí castigo físico por mis faltas. Mi madre me enseñó las labores del hogar, así que debía ayudar en las tareas hogareñas. Hoy día esas cosas las agradezco a mis padres pues no sé qué hubiera sido de mí en mi adolescencia si no me hubieran sabido corregir a tiempo. Pero algunas cosas seguro que no las haré con mis hijos porque me lastimaron mucho.
Si tú haces memoria y recuerdas tu crianza e incluso si ya eres madre o padre, estoy segura que hay aspectos de tu crianza que has omitido en la educación de tus hijos, ya que con esos métodos en vez de hacerte sentir que te estaban educando, hacían que te sintieras herido y maltratado. Algunas de esas “técnicas” educativas que seguro NO incluirás en la crianza de tus hijos son:
Gritar a tus hijos e insultarlos en momentos de rabia
Hace poco pasaba por una casa donde una madre enfurecida con su hijito le gritaba y le decía cosas que a mí me ofendieron y eso que solo era una espectadora ajena a la familia. No me quiero ni imaginar cómo se sentía el pobre niño.
Mandarlos a dormir sin comer
No me parece una forma correcta ya que algunas familias a veces no tienen forma de dar a sus hijos una alimentación adecuada y no es por elección sino por necesidad. Si tú tienes la oportunidad de nutrirlos bien, por qué no hacerlo. Quitarle la comida a un niño es aumentar las dificultades del menor en lugar de dar una lección.
Mandarlos a la cama estando enojados con ellos
Ya lo he dicho en artículos anteriores, no tenemos la vida comprada y es mejor hacer las paces con los hijos ya que el enojo debido a la falta no dura mucho. El amor no se debe negar a un hijo jamás.
Ignorarlos o mostrarte indiferente con ellos
Esto es terrible y si a ti te castigaron de esta manera recuerda cómo te sentías al ser el “pequeño invisible en casa”.
El castigo físico
Sí, aunque a veces los padres sientan que los hijos se merecen un par de palmadas en el trasero, sepan que esa puede ser una manera de crear en los niños baja autoestima y generar rencor hacia ustedes.
Comparar a los hijos
De todas para mi es la peor. Genera inseguridad, sentimiento de inferioridad e incluso ganas de “desquitarse” con el hermano con el que se es comparado.
Ser padres no es tarea fácil, sin embargo, la vida te va dando la experiencia para ser el tipo de guía amoroso que tu hijo necesita, críalos y edúcalos con amor.